Boff, 70 a?os en camino

El te¨®logo brasile?o Leonardo Boff ha cumplido setenta a?os (Concordia, Santa Catarina, 1938), durante los cuales ha hecho un largo y fecundo itinerario por los caminos de la vida que se bifurca en m¨²ltiples sendas: la experiencia religiosa, la teolog¨ªa, la ecolog¨ªa, la pol¨ªtica, la academia, el p¨²lpito, la c¨¢tedra, la foresta, la ciudad. "Caminante no hay camino, se hace camino al andar", dec¨ªa Antonio Machado. Y Boff ha hecho camino al andar dejando huella por donde ha pasado y sigue pasando. Y siempre desde el pensamiento cr¨ªtico y heterodoxo. "Lo mejor de la religi¨®n", escrib¨ªa Bloch en su libro El ate¨ªsmo en el cristianismo, "es que crea heterodoxos". Boff es un excelente ejemplo de este aforismo. Ah¨ª radica precisamente su creatividad en todos los campos en los que ha trabajado. Su vida y su pensamiento demuestran que es un intelectual que rompe esquemas (y algunos cr¨¢neos), abre horizontes nuevos y propone alternativas donde parece que no hay salida o se cree que la salida es una sola. ?l es uno de los te¨®logos m¨¢s innovadores de la teolog¨ªa latinoamericana, que propone una ¨¦tica centrada en las "virtudes para otro mundo posible", t¨ªtulo de su reciente trilog¨ªa.

En su quehacer teol¨®gico ha sabido compaginar ejemplarmente, durante m¨¢s de cuatro d¨¦cadas, el rigor metodol¨®gico y la denuncia prof¨¦tica. El rigor metodol¨®gico lo demuestra con su recurso a la doble mediaci¨®n de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n: la socio-anal¨ªtica y la hermen¨¦utica. Boff recurre a la mediaci¨®n de las ciencias humanas y sociales para un mejor conocimiento de la realidad donde se ubica, para descubrir los mecanismos de opresi¨®n que atentan contra la vida de los pobres y para liberar a la teolog¨ªa de su, quiz¨¢ falsa, neutralidad social, de su, supuesta, neutralidad pol¨ªtica y de su, s¨®lo aparente, indiferencia ¨¦tica. Recurre asimismo a la hermen¨¦utica, necesaria para el estudio y la interpretaci¨®n de los textos fundantes del cristianismo y para no caer en el fundamentalismo, una de las manifestaciones m¨¢s perversas de las religiones. A trav¨¦s de la hermen¨¦utica analiza el pre-texto y el con- texto de dichos textos, descubre su sentido primigenio y pregunta por su significado hoy a la luz de los nuevos desaf¨ªos y de las nuevas preguntas que plantea la realidad.

Boff es considerado, y con raz¨®n, uno de los principales cultivadores de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n (TL). A ella accedi¨® a partir del impacto que le produjo el gran basurero que formaban las favelas de Petr¨®polis, donde llev¨® a cabo un intenso trabajo socio-pastoral desde comienzos de la d¨¦cada de los setenta del siglo XX. Su reflexi¨®n teol¨®gica en clave liberadora naci¨®, asimismo, de la necesidad de dar respuesta a las preguntas que le plante¨® un grupo de sacerdotes comprometidos con el mundo ind¨ªgena de la selva amaz¨®nica hace ahora cuatro d¨¦cadas: ?c¨®mo anunciar la muerte y la resurrecci¨®n de Jes¨²s a ind¨ªgenas que est¨¢n siendo exterminados y muriendo por las enfermedades de los blancos? ?C¨®mo anunciar la buena noticia de la salvaci¨®n a las poblaciones explotadas? ?C¨®mo hablar de Dios inteligiblemente, y no de manera c¨ªnica, a personas ind¨ªgenas que viven la experiencia de lo sagrado en contacto con la naturaleza? Las experiencias vividas en el mundo de la pobreza extrema y de la marginaci¨®n cultural y la necesidad de responder a las preguntas que surg¨ªan de ah¨ª le llevaron a dedicarse por entero, profesional y vitalmente, a fundamentar la nueva metodolog¨ªa de la liberaci¨®n.

La teolog¨ªa apenas ha mostrado inter¨¦s por la ecolog¨ªa. Boff ha llenado ese vac¨ªo llevando a cabo una reflexi¨®n teol¨®gica en perspectiva ecol¨®gica, que cuestiona la supuesta fuerza emancipadora del paradigma cient¨ªfico-t¨¦cnico de la modernidad. Un paradigma selectivo, centrado en el ser humano, que ni es universalizable ni integral, ?ni siquiera humano! Como alternativa propone un nuevo paradigma en el que el ser humano no compite con la naturaleza sino que est¨¢ en di¨¢logo y comunicaci¨®n sim¨¦tricos con ella con relaciones de sujeto a sujeto, y no de sujeto a objeto. El ser humano y la naturaleza conforman un entramado de relaciones multidireccionales caracterizadas por la interdependencia y no por la autosuficiencia. Se establece, entonces, un pacto entre todos los seres del cosmos regido por la solidaridad c¨®smica y la fraternidad-sororidad sin fronteras, gremialismos o tribalismos. Es "la opci¨®n tierra", t¨ªtulo de su ¨²ltimo libro.

"La raz¨®n no puede florece sin esperanza", escribe Bloch. "La esperanza no puede hablar si raz¨®n". Raz¨®n y esperanza o, mejor, optimismo militante es lo que mejor define la vida, la personalidad y la obra de Boff. A veces ha sido acusado de ut¨®pico, sin darse cuenta sus acusadores de que esa acusaci¨®n, m¨¢s que un insulto es un elogio. Como en el poema de Eduardo Galeano, la utop¨ªa le sirve para caminar, que no es poco teniendo las piernas tan quebradas. ?Todo un milagro! Ad multos annos, Leonardo.

Virtudes para otro mundo posible. I. Hospitalidad, derecho y deber de todos. II. Convivencia, respeto y tolerancia. III. Comer y beber juntos. Leonardo Boff. Traducci¨®n de Jes¨²s Garc¨ªa-Abril. Sal Terrae. Santander, 2008. 168, 120 y 136 p¨¢ginas. 11, 7,50 y 8,50 euros, respectivamente. La soluci¨®n para la tierra no cae del cielo. Leonardo Boff. Traducci¨®n de J. Garc¨ªa-Abril.