El precario cient¨ªfico de ¨¦lite
Un costoso proyecto de investigaci¨®n est¨¢ parado porque el CSIC no ha habilitado espacio para su desarrollo - Los equipos adquiridos esperan en el almac¨¦n
La Factor¨ªa Espa?ola de Cristalizaci¨®n, un proyecto para investigar en cristalograf¨ªa y proporcionar servicios a los investigadores, fue aprobada con todos los parabienes en la primera convocatoria del programa Consolider-Ingenio 2010, una iniciativa del Gobierno para fomentar la investigaci¨®n de excelencia. Casi tres a?os despu¨¦s, el proyecto, de cinco a?os de duraci¨®n, no se ha podido desarrollar porque el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), la entidad gestora, no ha sido capaz de proporcionarle el espacio necesario.
Juan Manuel Garc¨ªa Ruiz, coordinador de la factor¨ªa, afirmaba ya en 2007 que lo que "debi¨® ser una gran alegr¨ªa se convirti¨® en el episodio m¨¢s triste" de su carrera investigadora, en una carta dirigida a la entonces ministra de Educaci¨®n y Ciencia, Mercedes Cabrera. Hoy piensa lo mismo, y la satisfacci¨®n de haber publicado recientemente con gran repercusi¨®n un trabajo sobre cristales biomorfos en Science no le ha quitado la tristeza.
El edificio proyectado se lo qued¨® el Instituto de Estudios ?rabes
"Tenemos dinero pero no sitio", explica. El proyecto dispone de siete millones de euros (cinco de Consolider, uno de la Junta de Andaluc¨ªa y otro del propio CSIC). Pero el Laboratorio de Estudios Cristalogr¨¢ficos del CSIC, que deb¨ªa ampliarse para acoger parte de la factor¨ªa, no s¨®lo no se ampli¨®, sino que cambi¨® de sitio y vive de prestado en 120 metros cuadrados en otro centro del CSIC en Granada.
Los problemas se originaron cuando, una vez aprobado el proyecto, el CSIC, entonces presidido por Carlos Mart¨ªnez, actual secretario de Estado de Investigaci¨®n, decidi¨® qued¨¢rselo entero, en vez de crear una fundaci¨®n o consorcio participado con la Junta de Andaluc¨ªa, tal como se propon¨ªa en la memoria del proyecto, explica Garc¨ªa Ruiz. Con el agravante, a?ade, de que, a pesar de que se hab¨ªa negociado la cesi¨®n del Carmen de los M¨ªnimos por el Ayuntamiento de Granada al CSIC para albergar el laboratorio, que ya entonces sufr¨ªa de falta de espacio, en 2005 se decidi¨® ubicar all¨ª el Instituto de Estudios ?rabes.
El resultado de aquellas decisiones es que los instrumentos del laboratorio, los antiguos y los nuevos adquiridos para la factor¨ªa, por un valor que supera el mill¨®n de euros, est¨¢n desperdigados o en los almacenes de los fabricantes. Adem¨¢s, no se han podido contratar todos los investigadores previstos.
"Entonces estuve a punto de renunciar al proyecto, porque sab¨ªa que en el CSIC no iba a prosperar, pero en el ministerio me convencieron para que no lo hiciera, y ahora me arrepiento", se?ala Garc¨ªa Ruiz. Las dificultades para gestionar cualquier proyecto grande en el CSIC, incluidos los financiados por la Comisi¨®n Europea, constituyen una queja recurrente en el mayor organismo p¨²blico de investigaci¨®n de Espa?a. El coordinador de la factor¨ªa propone, para futuras convocatorias de Consolider, que se haga como en los nuevos Proyectos Avanzados del Consejo Europeo de Investigaci¨®n. Se dan al investigador, y la instituci¨®n que le acoge se compromete a proporcionar el espacio y el apoyo administrativo necesarios. "Si el investigador no est¨¢ contento, se puede ir con el proyecto (y el dinero) bajo el brazo", comenta Garc¨ªa Ruiz.
Este cristal¨®grafo reconoce que su equipo ve coartado tambi¨¦n su desarrollo cient¨ªfico, dejando aparte la factor¨ªa. "En este tema de la biomineralizaci¨®n publicado en Science, sobre las estructuras geol¨®gicas que imitan las formas de la vida, quer¨ªamos adquirir una c¨¢mara de atm¨®sferas para generar estructuras en una atm¨®sfera igual a la de Marte, para que se pueda distinguir all¨ª la vida de la no vida, y no lo hemos podido hacer por falta de sitio".
El propio investigador se sorprende de que en las condiciones en que trabaja su laboratorio conserve un papel de liderazgo internacional. "Esta vitalidad del grupo hace, si cabe, m¨¢s amarga la situaci¨®n de marginaci¨®n en que nos encontramos, pues mantiene candente la pregunta de hasta d¨®nde habr¨ªa llegado el laboratorio en un contexto menos desafortunado", escrib¨ªa en una reciente carta al delegado del CSIC en Andaluc¨ªa.
Por su parte, el CSIC afirma que apoya totalmente el proyecto de Factor¨ªa de Cristalizaci¨®n, como prueba que lo ha cofinanciado con un mill¨®n de euros. Ya se est¨¢ construyendo, seg¨²n su portavoz, un edificio para geociencias que tendr¨¢ 4.500 metros cuadrados, de los cuales 1.100 ser¨¢n para el Laboratorio de Estudios Cristalogr¨¢ficos. Tambi¨¦n ha puesto el dinero para las becas y contratos necesarios en 2008 y 2009. El nuevo edificio estar¨ªa terminado, lo que no quiere decir que est¨¦ equipado, a finales de 2009. Quiz¨¢ demasiado tarde para Garc¨ªa Ruiz.
La cristalograf¨ªa est¨¢ detr¨¢s de todo
La farmacolog¨ªa, la qu¨ªmica, la biolog¨ªa, y tantas otras disciplinas cient¨ªficas necesitan las t¨¦cnicas cristalogr¨¢ficas, que permiten determinar la estructura de las mol¨¦culas. Si se descubre o sintetiza una nueva mol¨¦cula, conocer su estructura es imprescindible para patentarla. En la Factor¨ªa de Cristalizaci¨®n participan nueve grupos de investigaci¨®n, cinco del CSIC y cuatro universitarios, con el objetivo, entre otras cosas, de crear una plataforma integrada de servicios de cristalizaci¨®n y cristalograf¨ªa que federe los esfuerzos que se hagan sobre la materia en Espa?a y que preste servicios de calidad a empresas y grupos de investigaci¨®n en biomedicina, farmacolog¨ªa, biotecnolog¨ªa, nanotecnolog¨ªa, ciencia de materiales y otros.
Se persigue, adem¨¢s, que cualquier grupo que a¨ªsle, sintetice o desarrolle una mol¨¦cula interesante tenga acceso, con el nivel de confidencialidad necesario, a los conocimientos y tecnolog¨ªa para su cristalizaci¨®n, adquisici¨®n de datos de difracci¨®n en los mejores laboratorios nacionales o en grandes instalaciones participadas por Espa?a, su resoluci¨®n estructural y el asesoramiento para la protecci¨®n de resultados. Para ello, se prev¨¦n cuatro departamentos: Cristalograf¨ªa Fundamental, Servicios de Cristalizaci¨®n y Cristalograf¨ªa (en Granada, en los grupos participantes y en los sincrotrones ALBA y ESRF); Desarrollos Instrumentales y de Software y Departamento Legal y de Transferencia de Resultados.
Los aparatos de que no puede disponer libremente el laboratorio son: un difract¨®metro microfoco de monocristal (600.000 euros), un banco ¨®ptico de interferometr¨ªa y un microscopio AFM (70.000 euros); dos difract¨®metros de polvo (408.000 euros); un sistema de cromatograf¨ªa de alta resoluci¨®n (59.000 euros); un sistema automatizado de preparaci¨®n de disoluciones (90.000 euros); un robot de cristalizaci¨®n (140.000 euros); un sistema ¨®ptico de difracci¨®n de luz l¨¢ser (61.000 euros) y un control de temperatura para el difract¨®metro (42.000 euros).
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