Rajoy concede una tregua a Aguirre pero mantiene viva su amenaza

Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre son como la noche y el d¨ªa. Ella es una mujer de acci¨®n, en ocasiones precipitada; ¨¦l es hombre de reacci¨®n, y s¨®lo a veces. Por eso, ayer fue ella la que, de nuevo, en una situaci¨®n de bloqueo que amenazaba con destrozar la imagen de su Gobierno y romper el partido, movi¨® ficha. Ante la evidencia de que se iba a enfrentar en G¨¦nova, sede central del PP, a todos los barones, muy molestos por c¨®mo ella ha esquivado cualquier responsabilidad en el esc¨¢ndalo de los esp¨ªas en la Comunidad de Madrid, Aguirre se adelant¨® y, a primera hora, antes de la reuni¨®n de los l¨ªderes regionales, anunci¨® que aceptar¨¢ la comisi¨®n de investigaci¨®n en la Asamblea de Madrid que piden PSOE e IU.

Cospedal dej¨® claro que no quiere que la comisi¨®n sea un mero parip¨¦

Los marianistas creen que se debe resolver el esc¨¢ndalo con alguna dimisi¨®n

Rajoy tard¨® varias horas en reaccionar, pero lo hizo. A ¨²ltima hora de la tarde, la secretaria general, Dolores de Cospedal -el l¨ªder sigue huyendo de los periodistas y s¨®lo habla, a veces, fuera de Madrid- anunci¨® solemnemente que suspende temporalmente -"no se cierra", aclar¨® dos veces- la investigaci¨®n interna que hab¨ªa abierto la guerra total entre Rajoy y Aguirre.

El l¨ªder concede as¨ª una tregua a su gran enemiga interna, como respuesta al gesto de ¨¦sta, pero mantiene su amenaza de reabrir la investigaci¨®n en cualquier momento si la comisi¨®n no resulta satisfactoria y no despeja las sospechas. Fuentes de ambos bandos insisten en que no hab¨ªa pacto previo, que ha sido m¨¢s bien una acci¨®n-reacci¨®n en esta delicad¨ªsima jugada de ajedrez que tiene en vilo a todo el PP.

La guerra no ha terminado. Cospedal dej¨® muy claro que quiere que la comisi¨®n no sea un parip¨¦ en el que Aguirre aproveche su mayor¨ªa absoluta para negar las comparecencias clave. De hecho, lleg¨® a decir que ella, que tiene mucha informaci¨®n tras sus 10 d¨ªas de investigaci¨®n, y Rajoy, que conoc¨ªa de la existencia de dossiers y espionajes desde 2006, est¨¢n dispuestos a acudir.

Aguirre y Rajoy, despu¨¦s de varias llamadas telef¨®nicas con infructuosos intentos de pacto, han encontrado as¨ª una v¨ªa intermedia que les permite ganar algo de tiempo, aunque tambi¨¦n garantiza que este asunto estar¨¢ en la primera plana durante toda la campa?a electoral de las vascas y, sobre todo, de las gallegas, claves para el futuro del l¨ªder.

Pero las espadas siguen en alto. Dirigentes regionales y del entorno de Rajoy insisten en que las revelaciones period¨ªsticas son de tal gravedad, y la reacci¨®n de los aguirristas desvelando supuestas irregularidades del tesorero del PP tan inauditas, que este asunto s¨®lo se puede resolver con alguna dimisi¨®n. "La direcci¨®n recuerda a todos los dirigentes su obligaci¨®n de mantener una conducta acorde con los estatutos", dice el comunicado como aviso a navegantes. El texto deja muy claro que G¨¦nova abre la puerta para que sea la propia Aguirre, a trav¨¦s de la comisi¨®n, quien depure responsabilidades: "La direcci¨®n del PP considera que la comisi¨®n parlamentaria, en el ¨¢mbito de la mayor claridad y transparencia posibles, es un cauce adecuado para depurar eventuales responsabilidades pol¨ªticas".

Varios dirigentes marianistas expresan claramente en privado su deseo de que todo este esc¨¢ndalo acabe con la dimisi¨®n de Ignacio Gonz¨¢lez, la mano derecha de Aguirre, centro de dossiers, seguimientos y sospechas, y enemigo declarado de Rajoy, que lo ech¨® sin contemplaciones de la direcci¨®n nacional.

El enfado del l¨ªder con los ¨²ltimos acontecimientos y con la reacci¨®n de los aguirristas era de tal nivel, seg¨²n los que hablan con ¨¦l, que algunos empezaban a dar por hecho que iba a pedir alguna cabeza. De hecho, as¨ª se hab¨ªa interpretado por algunos barones una frase que Rajoy pronunci¨® en la reuni¨®n de la ma?ana.

Aguirre ya se hab¨ªa marchado, a inaugurar una exposici¨®n de Francis Bacon en El Prado, despu¨¦s de anunciar ante los barones -que ya lo sab¨ªan por los teletipos de agencia- la comisi¨®n de investigaci¨®n. Al final, despu¨¦s de horas hablando de financiaci¨®n, Luisa Fernanda Rudi, presidenta del PP aragon¨¦s y lo suficientemente veterana como para atreverse a romper el hielo, dijo que se alegraba de la noticia que hab¨ªa dado Aguirre y que esperaba que todo esto "se aclare cuanto antes". Rajoy recogi¨® el guante. Dijo que era "muy positiva" la noticia de la apertura de la comisi¨®n, que se iba a cerrar en cuanto se pudiera la investigaci¨®n interna -no parec¨ªa que a esa hora estuviese decidido suspenderla- y al final, en un an¨¢lisis sobre las responsabilidades de cada cual en la crisis, solt¨®: "Cada uno tiene que saber lo que tiene debajo". Esto es, un pol¨ªtico no puede alegar desconocimiento de lo que hacen sus subordinados para evitar asumir responsabilidades.

Otra de las claves de la versi¨®n oficial ofrecida ayer por Cospedal hay que buscarla en la prensa. Rajoy y los suyos le dan mucha credibilidad a lo publicado por EL PA?S -fue la revelaci¨®n del espionaje de Alfredo Prada lo que les hizo abrir la investigaci¨®n interna-, y esperan nuevas entregas en cualquier momento. Por eso, Cospedal hizo una salvedad a esa suspensi¨®n: "Estamos abiertos a que cualquier dato relevante que aparezca y pueda ser importante sea puesto en conocimiento de la comisi¨®n de investigaci¨®n". En cualquier caso, Cospedal, en tono muy serio, dej¨® clara la gravedad de la crisis: "Trabajamos en defensa de la honorabilidad del PP y por respeto a nuestros 10 millones de votantes".

Cospedal suspende la investigaci¨®n interna sobre el caso de espionaje en Madrid

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