Blanca Portillo ser¨¢ Hamlet

Los ecos de la bronca y el pataleo a¨²n resuenan en la memoria. Fue en 1960 cuando N¨²ria Espert os¨® meterse en la piel de Hamlet. Seg¨²n sali¨® a escena, sin haber mostrado la actriz a¨²n su trabajo, comenzaron los abucheos. Blanca Portillo, int¨¦rprete superdotada, abonada a los premios y a los elogios, vuelve a atreverse con el herc¨²leo empe?o de interpretar al pr¨ªncipe de Dinamarca, inmortal creaci¨®n de Shakespeare. "Lo interesante de esta idea no es el elegir a una mujer para hacer de hombre, lo que no es nuevo, sino convertir a Hamlet en una mujer criada como hombre, en alguien que posee ambas facetas", dice Portillo, que afronta el reto con sereno aplomo.

No hay duda de que es uno de los montajes que m¨¢s expectativas ha creado esta temporada teatral en Espa?a. No es para menos. Y no hablamos s¨®lo de g¨¦nero, del sexo del protagonista, sino tambi¨¦n de talento. Detr¨¢s de la idea est¨¢ el director esloveno Tomaz Pandur, reconocido internacionalmente como uno de los grandes valores de la nueva dramaturgia. "Este montaje es el reflejo perfecto de los tiempos que vivimos", explica. "Estamos cambiando el concepto que imperaba en el Teatro del Globe, un teatro del Renacimiento en el que s¨®lo los hombres pod¨ªan actuar. Vivimos un tiempo andr¨®gino, y los roles masculinos y femeninos est¨¢n cambiando. El mejor lugar para romper reglas y prejuicios son las tablas de un teatro, porque lo que sucede encima del escenario no es mentira. Es una verdad". Son ideas que comparten ambos. La ambig¨¹edad, dicen casi al un¨ªsono, lo llena todo: "Hamlet es un ejemplo crucial del h¨¦roe dual, tiran de ¨¦l desde el cielo y el infierno".

"Nuestro h¨¦roe es dual, sin genitalidad, pero no asexuado", dice la actriz

Debido a su adicci¨®n al trabajo y a su probada pasi¨®n por el teatro, Blanca Portillo (Madrid, 1963) se ha convertido en los ¨²ltimos a?os, adem¨¢s de en una s¨®lida actriz, en una arriesgada directora. Tambi¨¦n en productora de proyectos esc¨¦nicos que no saldr¨ªan adelante sin su ayuda. Sin ella, este Hamlet, que ahora se estrena en las Naves del Espa?ol de Matadero Madrid (del 12 de febrero al 12 de abril), no habr¨ªa sido posible.

"No puedo pensar en este montaje si no tengo a alguien que lo haga; encontrar a Blanca fue pura inspiraci¨®n y proyect¨¦ en ella todas las ideas que se me ocurr¨ªan para abordar este Hamlet del tercer milenio", explica Pandur, que presenta este proyecto como una continuaci¨®n l¨®gica de aquello en lo que ambos creen: "Contar la verdad, que es lo que hicimos en Barroco", dicen en referencia al espect¨¢culo que montaron el a?o pasado, basado en Las amistades peligrosas, de Choderlos de Laclos, y en Cuarteto, de Heiner M¨¹ller. Sus dos primeros encuentros esc¨¦nicos forman parte de una trilog¨ªa que completar¨¢n el pr¨®ximo agosto con el estreno de Medea, dentro del Festival de M¨¦rida.

"Intentamos convertir a Hamlet en un ser humano con sus cualidades, sus lados m¨¢s oscuros y brillantes", abunda Portillo. "Que represente lo masculino y lo femenino, la tierra, la conexi¨®n con la naturaleza, la parte intelectual e inteligente..., un ser humano completo, en el que se elimina la genitalidad, no el sexo ni las inclinaciones".

Como se ve, y m¨¢s trat¨¢ndose de Pandur, son muchas las licencias tomadas con respecto al Hamlet registrado en el imaginario colectivo. Aunque ¨¦l y Portillo dejan bien claro que todo lo que se dice en el texto (traducido por el dramaturgo Jos¨¦ Ram¨®n Fern¨¢ndez) est¨¢ en Shakespeare. Otra cosa es que Claudio, el t¨ªo de Hamlet que asesina a su padre para robarle trono y esposa, sea un jovenc¨ªsimo Hugo Silva y no un veterano actor como se acostumbra. O que el espectro del padre del pr¨ªncipe de Dinamarca est¨¦ permanentemente en escena encarnado en Asier Etxeandia, o que Guildenstern y Rosencrantz, personajes claves de la trama, sean aqu¨ª dos parejas de gemelos.

Para escoger a Ofelia, uno de los papeles m¨¢s dif¨ªciles y deseados del canon shakespeariano, se recurri¨® a un casting: "Hab¨ªa una joven actriz que nos interes¨® mucho y al contarnos su curr¨ªculum yo no hac¨ªa m¨¢s que preguntarme qui¨¦n ser¨ªa, ya que se supon¨ªa que yo deb¨ªa conocerla", dice Portillo, quien no se enter¨®, y tampoco Pandur, hasta mucho m¨¢s tarde de que se trataba de Nur Al Levi. En ning¨²n momento mencion¨® ser la hija de la actriz y directora Cristina Rota y por tanto hermana de Juan Diego y Mar¨ªa Botto. El resto del reparto lo completan Quim Guti¨¦rrez, Susi S¨¢nchez, Manuel Mor¨®n, F¨¦lix G¨®mez y Manuel Moya.

La colaboraci¨®n de David Delf¨ªn como figurinista del montaje encaja perfectamente en la est¨¦tica panduriana. Muy expresionista, marcada en esta ocasi¨®n por la presencia del agua como s¨ªmbolo de renacimiento, como espejo que no siempre devuelve la imagen que uno quiere: "Aqu¨ª el agua es m¨¢s un estado mental, un sitio perfecto para la melancol¨ªa de Hamlet", comentan ambos.