"Soy actriz para que la gente sepa que existo"

De peque?a, Mar¨ªa Valverde quer¨ªa ser inmortal. Ahora, con 21 a?os, esta madrile?a de Carabanchel sabe que esa aspiraci¨®n resulta imposible, pero desea con mucha fuerza perdurar en la memoria de los otros. "Quiero que me recuerden dentro de cien a?os, y creo que soy actriz porque busco que la gente sepa en el futuro que he existido". Con ese tono tan maduro y tan reflexivo, impropio de su edad, esta actriz, descubierta por su papel de adolescente en La flaqueza del bolchevique (2003) -por el que obtuvo el Goya a la mejor actriz revelaci¨®n-, pide una carta para celiacos en una de sus pizzer¨ªas favoritas del centro de Madrid. "Ser celiaca desde ni?a y estar siempre alerta para que ning¨²n alimento contenga gluten me ha hecho ser una persona m¨¢s responsable y disciplinada. Estoy convencida de que mi tipo de alimentaci¨®n ha influido en mi car¨¢cter, aunque tambi¨¦n tengo un lado malvado".

La int¨¦rprete cree que debe su sentido de la disciplina al hecho de ser cel¨ªaca

Siempre tuvo claro que su vocaci¨®n pasaba por ser actriz, y ella misma reconoce que cuando algo se le pone entre ceja y ceja, no se rinde hasta que lo consigue. "Mi madre es enfermera y trabaja con ni?os discapacitados, as¨ª que yo imitaba a chavales con par¨¢lisis cerebral, por ejemplo, para llamar su atenci¨®n". Su temprana fama le permiti¨® encadenar una pel¨ªcula tras otra hasta llegar a un momento tan dulce como el actual, en el que Mar¨ªa Valverde cuenta en cartel con el filme La mujer del anarquista, mientras se sube todos los d¨ªas al escenario del Centro Dram¨¢tico Nacional (CDN) para interpretar a una prostituta en la obra Llueve en Barcelona.

En la pel¨ªcula encarna a la pareja de Juan Diego Botto, y ella misma pidi¨® a los directores Marie No?lle y Peter Sehr representar a una mujer treinta?era que vive el drama de los bombardeos en Madrid y el desarraigo del exilio en Francia. "Me inspir¨¦ en mi abuela para construir ese personaje y para recrear aquella ¨¦poca. De ella aprend¨ª gestos, actitudes o miradas", comenta esta joven de ojos color de miel mientras despacha con hambre un queso parmesano y unos espaguetis. "Lo peor de ser celiaco", confiesa, "es cuando tienes que comer fuera de casa y, en especial, durante los viajes. No resulta f¨¢cil encontrar restaurantes con cartas para nosotros". Dentro de apenas un par de horas deber¨¢ ponerse en la piel de una prostituta del Raval y enfrentarse a un p¨²blico que la observa a escasos metros. "En el fondo soy t¨ªmida, pero cuando tengo que meterme en un papel, lo hago y ya est¨¢. El director de Llueve en Barcelona, Francesco Saponaro, dijo que me inspirara en un travesti y buscara mi faceta macarra".

Mar¨ªa Valverde est¨¢ encantada con este trabajo en el CDN, donde comparte escenario con Toni Cant¨® y V¨ªctor Clavijo en un original tri¨¢ngulo, despu¨¦s de haber sido elegida entre varias actrices. Admiradora de Kate Winslet, Juliette Binoche y Maribel Verd¨², se ha convertido Mar¨ªa Valverde en una de las actrices espa?olas de moda. Ahora bien, ella pone los pies en el suelo: "Nuestra profesi¨®n est¨¢ llena de altibajos y nunca te has de creer nada. Espero que la fama no se me suba a la cabeza. Adem¨¢s, me encanta que no me reconozcan porque as¨ª puedo observar a la gente o pasear sola, que son algunas de mis aficiones favoritas".