Belloch escandaliza en Zaragoza dando una calle al santo Escriv¨¢

La decisi¨®n del alcalde de Zaragoza, el socialista Juan Alberto Belloch, de dedicar una de las calles del centro de la ciudad al fundador del Opus Dei, san Josemar¨ªa Escriv¨¢ de Balaguer, quien naci¨® en la localidad oscense de Barbastro, ha encendido una pol¨¦mica que crece m¨¢s deprisa que el caudal del Ebro y que tiene tambi¨¦n muchas posibilidades de desbordarse. Belloch ya ha advertido que la decisi¨®n ha sido suya y que no dar¨¢ su brazo a torcer.

El asunto arranc¨® cuando el Ayuntamiento se dispuso a aplicar la Ley de Memoria Hist¨®rica. Entre las propuestas para renombrar las calles dedicadas a personajes franquistas, el alcalde incluy¨® una singular: que la calle dedicada al general Sueiro (miembro del primer claustro de profesores de la Academia General Militar junto a otros destacados militares golpistas que lleg¨® a desempe?ar una capitan¨ªa general) pasara a homenajear al fundador del Opus. Se da la circunstancia de que en ella hay un colegio propiedad de esa organizaci¨®n cat¨®lica.

"A un se?or se le pone una calle por m¨¦ritos. Y Escriv¨¢ los tiene: ser santo"

Desde entonces se vienen sucediendo las manifestaciones de ciudadanos en contra de la iniciativa de Belloch. Frente a ellas, el alcalde socialista argumenta que Escriv¨¢ es un aragon¨¦s de renombre universal y que, adem¨¢s, es santo. "No hay un marxista culto que se oponga a esto", dice, "porque, independientemente de cuales fuesen sus ideas, que han generado bastantes cat¨¢strofes en la humanidad, es un hombre importante. A un se?or no se le pone una calle por consenso, sino por m¨¦ritos. Y la verdad es que [Escriv¨¢] los tiene: ser santo".

El concejal de IU, Jos¨¦ Manuel Alonso, ha puesto el grito en el cielo. Pero la contestaci¨®n m¨¢s dura a la iniciativa del alcalde la protagoniz¨® el jueves un socialista hist¨®rico: el diputado constituyente Antonio Piazuelo, hoy diputado regional, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza y medalla de oro de la ciudad. En una carta dur¨ªsima, Piazuelo acusa al alcalde de fraude de ley: "Me permito recordar que en uno de los ¨²ltimos Gobiernos presididos por el General Franco, con participaci¨®n de cuatro ministros del Opus, se produjeron las ¨²ltimas condenas a muerte de antifranquistas. Dedicarle una calle [al fundador del Opus Dei] me parece un fraude de ley claro y rotundo que tendr¨¢, espero y deseo, defensa y contestaci¨®n jur¨ªdica".

En la misma l¨ªnea se pronunci¨® ayer el historiador Juli¨¢n Casanova, autor del libro La Iglesia de Franco. Escriv¨¢, se?ala, "no tuvo que ver con la violaci¨®n de derechos humanos (...), pero el Opus mantuvo el aparato de la dictadura y a sus miembros nunca les import¨® que ese aparato asesinara a miles de espa?oles y violara los derechos humanos m¨¢s elementales".

La inclinaci¨®n del alcalde de Zaragoza por la Iglesia no es nueva. Ya en las primeras primarias del PSOE sorprendi¨® al entonces candidato Josep Borrell llev¨¢ndole a rezar ante la virgen del Pilar, "cosa que yo hago nada m¨¢s llegar a Zaragoza", le dijo.

Este mismo a?o, apoy¨® el rechazo de la compa?¨ªa de transportes urbanos a la campa?a de anuncios con el lema: Probablemente Dios no existe.