"Veo la campa?a con cierta verg¨¹enza"
El presidente de los promotores inmobiliarios reivindica m¨¢s seriedad
Pertenece a una generaci¨®n, la de 1961, tremendamente politizada. Con la muerte del dictador y en plena adolescencia ya conoc¨ªa al dedillo la situaci¨®n pol¨ªtica de este pa¨ªs. En su familia hubo comunistas que sufrieron la represi¨®n, como Ram¨®n Valenzuela, y pol¨ªticos de derechas, como Fernando Garrido, conselleiro de agricultura con Fern¨¢ndez Albor en la Xunta. Le gustan las campa?as, incluso dice que se meti¨® en pol¨ªtica. "Lo dej¨¦, soy muy idealista".
Javier Garrido, presidente de la Federaci¨®n de Promotores de Galicia, cree que el 90% de los electores en estas auton¨®micas no sabr¨ªan nombrar ni a cinco candidatos de las listas del partido al que votan. "La televisi¨®n, los peri¨®dicos, la Red... El componente medi¨¢tico es cada vez m¨¢s importante. Como testigo de la Transici¨®n sigo los comicios con un poco de verg¨¹enza". Cree que es muy triste asistir a la simplificaci¨®n de los mensajes, del debate p¨²blico. "Era justo lo que critic¨¢bamos antes en Espa?a: que en otros pa¨ªses cualquier an¨¦cdota pudiese perjudicar o beneficiar a un candidato en las urnas... Ahora estamos cayendo en eso". Le sonroja. Pero a¨²n tiene esperanza: "?Reivindico el estilo del programa La Clave de Jos¨¦ Luis Balb¨ªn!", dice levantando la voz. Y eso que opina que en los medios de comunicaci¨®n est¨¢ parte de la culpa: "El hecho de que las empresas period¨ªsticas est¨¦n vinculadas en una u otra medida a los partidos hace que los mensajes no lleguen de manera completa". Pero hay cosas que no cambian: "El voto emigrante, la Ley Electoral... Hace 20 a?os que hablamos de todo esto y nadie hace nada". ?Habr¨¢n, por lo menos, cambiado los pol¨ªticos? ?ser¨¢n m¨¢s sinceros? "Generalmente dicen lo que piensan, antes y ahora. Acaba de empezar su momento, porque todo resultar¨¢ in¨²til si tras esta campa?a no logran el poder". Echa pestes, pero no puede ocultar que le gusta la final electoral. "Siempre he votado, sigo todas las elecciones con atenci¨®n".
"Hacemos lo que antes critic¨¢bamos, fijarnos en las an¨¦cdotas"
No todo es malo. Asegura que su sector, el del ladrillo, ha padecido una persecuci¨®n, "pero no ser¨¦ yo", advierte, " quien demonice a los pol¨ªticos". Reflexiona que en las tripas de cada candidato est¨¢ impregnado un gran esp¨ªritu social que canalizan por la v¨ªa del poder. Pero enseguida rectifica: "No siempre ocurre, no vivimos en el pa¨ªs de las maravillas".
Hace su an¨¢lisis de partidos y de candidatos tratando de ser imparcial porque no quiere que se le vea el plumero. Para ¨¦l, Anxo Quintana representa la esperanza de la moderaci¨®n del Bloque. N¨²?ez Feij¨®o combina "centrismo con un toque nacionalista o regionalista". Emilio P¨¦rez Touri?o es "una persona con un respaldo muy potente del partido". Cada uno tiene su cara y su cruz. La del PP: el esc¨¢ndalo de Madrid con ramificaciones gallegas. La debilidad socialista est¨¢ en que "nunca sabes qu¨¦ propuestas de su programa de gobierno podr¨¢n sacar adelante en coalici¨®n". Con el BNG pasa un poco lo mismo, "pero juegan con que si gobiernan, no van a pasar por alto ciertas exigencias en el pacto". No le gusta esa bipolaridad pol¨ªtica cuando afecta a las cosas de comer. Por eso pide que, gane quien gane, "las competencias de urbanismo y vivienda est¨¦n en la misma conseller¨ªa".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.