Si hoy es martes, esto es Lugo

En la campa?a de las elecciones generales de 1996, creo, a la entonces ministra de Asuntos Sociales y entonces socialista Cristina Alberdi le escuch¨¦ con estas orejas invocar en un mitin en el Colegio Curros Enr¨ªquez, en el barrio de Monte Alto de A Coru?a (en el que siempre comenzaba las campa?as Paco V¨¢zquez) el siguiente argumento electoral: "?Cu¨¢ntos de vosotros no vist¨¦is el mar por primera vez gracias a las excursiones del Imserso?". El mar estaba (estuvo siempre) a menos de cien metros, pero el p¨²blico aplaudi¨® educadamente.

En unos comicios generales, los primeros espadas de la capital (los paracaidistas, en el argot period¨ªstico y pol¨ªtico) sufren una variante del jet lag denominada Si hoy es martes, esto es B¨¦lgica, t¨ªtulo de una divertid¨ªsima parodia de los viajes organizados (If It's Tuesday It Must Be Belgium) dirigida por Mel Stuart en 1969. Pero en unas auton¨®micas, llega el fin de semana y la first class pol¨ªtica se deja caer desde Madrid como orensanos en agosto por Samil. A finales de los a?os 80, Coalici¨®n Galega (sus restos) de Lugo lleg¨® a insertar un ir¨®nico anuncio en prensa dese¨¢ndoles una feliz estancia, buen viaje de vuelta y que se volviesen a pasar por la provincia cuando quisiesen.

Como tiene m¨¢s tiempo -y desde luego m¨¢s ganas de salir de Madrid- Rajoy ya se vino el viernes. Para encontrarse con una nueva bomba, la de las presuntas irregularidades del n¨²mero uno por A Coru?a, Carlos Negreira en su gesti¨®n al frente de Portos de Galicia: "De eso sabr¨¢n en el PSOE o en la Xunta", despej¨®. P¨²blico dedicaba su portada de ayer al asunto. Ya no se puede descansar ni en provincias, aunque sea la de uno. Ayer intervino en uno de sus espacios m¨¢s queridos: la plaza de toros de Pontevedra. Ser¨¢ de los pocos actos que har¨¢ en una ciudad, porque el presidenciable popular prefiere ser Feij¨®09 que el candidato del PP y ha despachado al jefe al rural, donde la gente no pregunta por lo de Garz¨®n. Los informativos nacionales de la COPE, que hac¨ªan de su cr¨®nica electoral un monogr¨¢fico de las andanzas del que denominaban "el presidente Mariano Rajoy", destacaba que en Camari?as compr¨® en un mercadillo un pa?uelo para su se?ora.

En el campo socialista, los ministros, y a mayores Rodr¨ªguez Zapatero y su antecesor Felipe Gonz¨¢lez, han venido en rebati?a, sin hacerle ascos siquiera a encuentros sectoriales, esos de medio ciento de asistentes del mismo ramo. Todos pastoreados discretamente y en la sombra por Jos¨¦ Blanco, que no se sabe si est¨¢ o va y viene, pero s¨ª que es el que tiene m¨¢s background de lo que pasa aqu¨ª. "Ayer, en Ourense coincidieron Rajoy y la n¨²mero tres del PSOE en Espa?a, Leire Paj¨ªn. Pudo haber una foto de ambos en la puerta de una televisi¨®n local, pero se evit¨®. No est¨¢n los tiempos para im¨¢genes de concordia", contaba Anxo Lugilde en El Progreso, al tiempo que dejaba caer su impresi¨®n de que los candidatos locales se contagiaban de la aprehensi¨®n de los for¨¢neos.

Un te¨®rico contagio del que te¨®ricamente est¨¢n libres los nacionalistas. "Si antes daba un poco de pena la soledad del BNG, ahora producen l¨¢stima los gallegos del PSdeG, obligados a hacer de anfitriones de ministros desgastados o desconocidos que pueden meter la pata en cualquier momento, o esos pep¨¦s aut¨®ctonos que no tienen m¨¢s remedio que hacer de gu¨ªas de dirigentes de G¨¦nova, con sus maletas llenas de los l¨ªos de all¨¢", analizaba el fen¨®meno en El Correo Gallego Carlos Luis Rodr¨ªguez. "A diferencia de otras campa?as, el nacionalismo cuenta con candidatos cuya gesti¨®n resiste perfectamente las comparaciones. La vivienda p¨²blica se asocia con Teresa T¨¢boas y no con, y no con, c¨®mo se llama... Beatriz Corredor (confiesen que ustedes tampoco se acordaban). Fernando Blanco ha dejado sin espacio pol¨ªtico en Galicia a su colega Sebasti¨¢n".

En el arranque de la campa?a, Quintana s¨ª se ha encontrado con un paracaidista, seg¨²n destacan todos los cronistas de la campa?a del Bloque. En una reuni¨®n con usuarios de galescolas (usuarios y padres) en A Coru?a intervino un autodefinido "castellano (sic) del Bierzo" que le reproch¨® que no podr¨ªa bailar con su padre, dependiente sin ayuda. "Dependientes ya los hab¨ªa antes, pero nosotros creamos 57 centros de d¨ªa", no se arrug¨® el candidato nacionalista, que adem¨¢s aprovech¨® la interrupci¨®n como argumento en el mitin que dio por la noche en As Pontes. Pues eso, hasta la pr¨®xima.