Sin referencia internacional
Lo malo no es la crisis, que lo oscurece todo. Lo peor es que nos hemos quedado sin modelos internacionales para lo nuestro, para nuestro Problema milenario. En otras elecciones siempre hubo un referente, un espejo en el que mirarse y buscar inspiraci¨®n. A principios de los 90, fueron las rep¨²blicas b¨¢lticas, Checoslovaquia. A mediados, Quebec y la querida Irlanda, que iniciaba su proceso de paz. M¨¢s tarde, Montenegro, Escocia. Hace un a?o, Kosovo, pero sin gran entusiasmo.
Estos comicios, sin embargo, estamos hu¨¦rfanos de faros en los que buscar rumbo y gu¨ªa. No hay m¨¢s que leer los programas de los partidos para darse cuenta de ese vac¨ªo. Desde que el conflicto norirland¨¦s se encarril¨® sentando en el mismo gobierno a las expresiones m¨¢s extremas del republicanismo y el unionismo, ha dejado de tener inter¨¦s para nosotros. Y la propuesta de Obama, pese a su fresco atractivo, resulta demasiado ambivalente.
Escocia, Quebec (e Irlanda, de refil¨®n) son los ¨²nicos productos for¨¢neos que pueden hallarse en los programas. Figuran en los de Eusko Alkartasuna y el PNV como apoyatura al derecho de decisi¨®n. Sin embargo, incluso en el caso de EA, que es la formaci¨®n que est¨¢ poniendo toda la carne independentista en las urnas, la invocaci¨®n a aquellos dos pa¨ªses suena poco convencida y algo forzada. La consulta sobre la independencia que el l¨ªder nacionalista escoc¨¦s Alex Salmond anunci¨® para antes de 2011 ha quedado ya aplazada hasta 2017, con lo que terminar¨¢ la pr¨®xima legislatura sin que los vascos sepamos qu¨¦ van a decidir en Edimburgo.
En cuanto a Quebec, las citas de los dos partidos que fueron uno aparecen un tanto sesgadas. El Tribunal Supremo de Canad¨¢ no se reconocer¨ªa en la interpretaci¨®n que se hace de su dictamen de 1998 sobre la secesi¨®n de Quebec. De ella s¨®lo se toma la obligaci¨®n de negociar ante una situaci¨®n de hecho. Pero se omite la negaci¨®n previa de que sea aplicable en Canad¨¢ el derecho de autodeterminaci¨®n y la exigencia de que la demanda secesionista venga respaldada por una mayor¨ªa clara y sobre una pregunta tambi¨¦n inequ¨ªvoca. Definitivamente, nos quedamos sin referentes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Opini¨®n
- Programas electorales
- Elecciones Vascas 2009
- Independentismo
- Relaciones Gobierno central
- Elecciones Vascas
- Comunidades aut¨®nomas
- Debates parlamentarios
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Elecciones auton¨®micas
- Ideolog¨ªas
- Elecciones
- Parlamento
- Pa¨ªs Vasco
- Espa?a
- Administraci¨®n p¨²blica
- Pol¨ªtica