260 repiques a 86 decibelios

Los vecinos del entorno de la iglesia de Cristo Rei, en uno de los barrios m¨¢s poblados de Gandia, tienen contados los repiques de las campanas de la parroquia. Cada cuarto, media hora, y hora en punto. Desde las 8 de la ma?ana hasta las 22. De lunes a s¨¢bado. Entre las 10 y 10.30 de la ma?ana, adem¨¢s, volteo continuo de llamada a misa. A las 12, recuerdo del rezo del ?ngelus. Y a las 17, nueva llamada a misa. Hasta 260 repiques diarios, con una intensidad de 86,6 decibelios. Un grupo de vecinos del barrio se ha cansado de soportar este sonido diario, que altera su vida cotidiana. Llevan aguantando esta situaci¨®n una d¨¦cada, desde la ¨²ltima reforma del campanario, y han pedido al Ayuntamiento que intervenga.

"Un matrimonio con hijos peque?os se tuvo que ir a otra residencia familiar porque las campanas despertaban a los ni?os. Tambi¨¦n se ha dado el caso de una familia que vendi¨® la casa porque no soportaba el ruido. Y propietarios que no han podido vender sus pisos por el mismo problema", comenta una de las vecinas. Ver la televisi¨®n, concentrarse para estudiar o trabajar, o hablar por tel¨¦fono, se altera cada 15 minutos, con cada volteo. Las quejas no son balad¨ªes. T¨¦cnicos municipales comprobaron que en una vivienda cercana se alcanzan 86,6 decibelios. Un grupo de residentes ha iniciado la recogida de firmas para pedir al Ayuntamiento una soluci¨®n. El departamento de Territorio y Sostenibilidad ya ha propuesto al p¨¢rroco medidas correctoras, entre ellas, limitar el uso de las campanas a las horas en punto, y por motivos l¨²dico-culturales o festivos. Y para atenuar los niveles de emisi¨®n sonora, propone revestir el interior de las campanas y el p¨¦ndulo con materiales fonoabsorbentes.