Alivio en La Habana
La decisi¨®n de EE UU de suavizar las restricciones que pesaban desde 2004 sobre el env¨ªo de remesas y las visitas de familiares a Cuba han generado alivio entre la poblaci¨®n de la isla, que espera como agua de mayo las divisas para poder comprar buena parte de los art¨ªculos de primera necesidad. "Aqu¨ª todos tienen a alguien en EE UU que quiere saber c¨®mo est¨¢n", explicaba a Efe Javier, un trabajador habanero. "Adem¨¢s, hay mucha necesidad, y si vienen con un poco de ayuda de all¨ª, pues mejor". La alegr¨ªa de la poblaci¨®n contrastaba con el silencio oficial. El Gobierno cubano guard¨® ayer mutismo y los medios dedicaron sus espacios al apretado triunfo del equipo cubano sobre Australia en el Mundial de b¨¦isbol.
Bush endureci¨® las sanciones a ra¨ªz de la oleada represiva de mayo de 2003, que llev¨® a la c¨¢rcel a 75 disidentes. De ellos, 55 siguen hoy en prisi¨®n. Es cierto que el r¨¦gimen cubano no ha hecho ninguna concesi¨®n y que La Habana tiene la ¨²ltima palabra, al entregar o denegar los visados a los visitantes. Pero los beneficios de la medida son indudables.
"Dicen los chinos que el viaje m¨¢s largo empieza con el primer paso", opina el economista ?scar Espinosa, v¨ªctima de la primavera negra de 2003 y excarcelado por motivos de salud. "Desde el punto de vista familiar y de la ayuda, tiene un significado muy fuerte. Ahora el Gobierno cubano tiene la pelota en su tejado". Omar L¨®pez, de la Fundaci¨®n Nacional Cubano-Americana, de Miami, cree que "el puente de cubano a cubano es fundamental para producir un proceso de cambio".
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