CC OO afronta el cambio de direcci¨®n con tensiones internas

El congreso de CC OO, que hoy decide el relevo de Xan Mar¨ªa Castro, no ser¨¢ un camino de rosas para Xos¨¦ Manuel S¨¢nchez Agui¨®n, su m¨¢s que probable sustituto. La formaci¨®n arrastra tensiones internas desde varios flancos y debe cerrar heridas abiertas. Una parte de los afiliados ha criticado el papel del sindicato en los primeros compases de la crisis, y prueba de ello son las objeciones al informe general del congreso, que a modo de resumen sintetiza los ¨²ltimos cinco a?os de lucha sindical. Aunque de puertas a fuera se habla de la etapa del bipartito como una ¨¦poca en la que se ganaron espacios de representaci¨®n y se consolidaron los acuerdos del di¨¢logo social, el documento recibi¨® un respaldo desigual y m¨¢s de un jarro de agua fr¨ªa en el turno de ponencias.

El candidato con m¨¢s apoyo pide que la huelga general no se use "como un fin"

Otro obst¨¢culo a salvar es la herencia del dif¨ªcil congreso confederal del que sali¨® el nuevo l¨ªder nacional, Ignacio Fern¨¢ndez Toxo, en sustituci¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Fidalgo. Los que apoyaron a Toxo en Madrid, representados en Galicia por Eusebio Justo y Jaime L¨®pez Golpe, intentar¨¢n hasta hoy forzar un acuerdo para una candidatura ¨²nica de consenso. Si no lo logran antes de las cinco de esta tarde, la comisi¨®n electoral se cerrar¨¢ con dos aspirantes a la secretar¨ªa general: la de Justo y la de S¨¢nchez Agui¨®n. Sea como fuere, Agui¨®n, que en Madrid apoy¨® a Fidalgo, cuenta con el respaldo mayoritario de la ejecutiva saliente para tomar las riendas en un momento "decisivo y dif¨ªcil", con la crisis encima y con un gobierno del PP en la Xuntaia. El candidato se postula como defensor del di¨¢logo y la independencia de quienes "en el pasado nos demonizaban y ahora dicen que estamos siendo blandos". Defiende una l¨ªnea de di¨¢logo sin descartar acciones contundentes para que los trabajadores "no paguen ni una de las consecuencias de la crisis". Y sobre una posible huelga general, repite invariablemente que "es un instrumento que hay que utilizar con mucha responsabilidad, no es un arma arrojadiza ni un fin en s¨ª mismo".

Xan Mar¨ªa Castro, que dejar¨¢ la primera l¨ªnea de acci¨®n despu¨¦s de nueve a?os al frente de CC OO, pidi¨® ayer unidad con el resto de fuerzas de cara al pr¨®ximo 1 de mayo.