El 22@ resiste la crisis econ¨®mica
El sector de las tecnolog¨ªas crece en empresas y trabajadores
En un panorama general de destrucci¨®n de empleo, el sector ligado a las nuevas tecnolog¨ªas resiste. Una radiograf¨ªa de ello es el 22@, el distrito tecnol¨®gico de Barcelona que empez¨® a caminar hace nueve a?os, con la apertura de la Diagonal de Gl¨°ries al mar. Desde entonces, se han instalado en ese territorio 1.411 empresas relacionadas con las tecnolog¨ªas -excluyendo los hoteles. comercios y restaurantes -que han generado 42.000 puestos de trabajo, el 73% directamente ligados a la actividad tecn¨®logica y el resto de los servicios que ¨¦sta requiere.
Es una actividad que se empieza a notar en la calle, sobre todo por las ma?anas. De los bares, restaurantes y locales comerciales abiertos en los ¨²ltimos a?os es habitual ver salir j¨®venes camino de oficinas en telem¨¢ticos edificios. Espacios abiertos, con poco papel. La mayor concentraci¨®n est¨¢ en la zona m¨¢s cercana a la plaza de las Gl¨°ries: desde la torre Agbar, con todo el frente de la Diagonal -lado mar- hasta Pere IV. ?se fue uno de los clusters que antes empez¨® a caminar -el de los medios de comunicaci¨®n y tambi¨¦n las tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n (TIC)- y, por tanto, el que m¨¢s forma tiene.
En esa ¨¢rea se agrupa una de las sedes de la Universidad Pompeu Fabra, el edificio Mediapro, Indra, T-Systems, el edificio Interface, el edificio Capgemini -una firma de consultor¨ªa inform¨¢tica- y la nueva sede de RBA, en construcci¨®n.
Lo que tambi¨¦n est¨¢ pasando es que no todo el espacio que generan los grandes edificios est¨¢ ocupado. Por ejemplo, una torre de oficinas de 14 pisos que se alza en el n¨²mero 197 de la Diagonal est¨¢ pr¨¢cticamente vac¨ªa. De hecho, en el directorio s¨®lo hay dos firmas y los letreros de "oficinas en alquiler" lucen bien a la vista. Algunos solares aguardan en barbecho la llegada de las gr¨²as y m¨¢quinas y no pocas obras van a un ritmo mucho m¨¢s lento del marcado en los a?os de expansi¨®n inmobiliaria.
Esa frenada, que no crecimiento negativo, que se aprecia en el d¨ªa a d¨ªa, se traslada a las cifras y estad¨ªsticas: el ritmo de crecimiento de empresas del 22@ se est¨¢ desacelerando. Si en el trienio de 2004 a 2006 cada a?o se creaban 200 empresas, en los ¨²ltimos dos ejercicios no han pasado de 150-160 por a?o y en 2008 se registraron 40 bajas, pero el crecimiento no se ha parado.
"Lo que importa es que es un sector consolidado y ejemplo de la l¨ªnea que hay que seguir no s¨®lo en el 22@, sino en la gran Barcelona", contest¨® el alcalde Jordi Hereu en un tono de enfado indisimulado al ser preguntado por los medios de comunicaci¨®n por la desaceleraci¨®n. Hereu record¨® que faltan todav¨ªa a?os para que el 22@ se desarrolle. No menos de diez, si los c¨¢lculos de los que fueron sus impulsores -el ex alcalde Joan Clos y el entonces arquitecto jefe, Josep Anton Acebillo- no estaban errados.
Ahora, ante un panorama general poco alentador, el Consistorio y los gestores del 22@ conf¨ªan en el tir¨®n de algunas instituciones y empresas que se trasladar¨¢n al 22@ en los pr¨®ximos a?os, si el ritmo de construcci¨®n de sus nuevas sedes no se ve afectado. Es el caso, por ejemplo, de la nueva sede de Telef¨®nica, en el F¨®rum; el de la C¨¢mara de Comercio que ocupar¨¢ un solar entre Pujades, Fluvi¨¤, Selva de Mar y Diagonal, y el de la sede de la Comisi¨®n del Mercado de Telecomunicaciones (CMT), tambi¨¦n cerca del F¨®rum.
Por ahora, de las 1.441 empresas instaladas en el 22@, el 55% se han trasladado de otras zonas de la ciudad y del ¨¢rea metropolitana, principalmente. El 45% restante son de nueva creaci¨®n.
Las que generan m¨¢s empleo son las vinculadas a las TIC con 15.000 trabajadores. Otros 4.200 trabajan en el sector de los medios de comunicaci¨®n, 4.000 en el dise?o, 3.500 en la energ¨ªa y 1.800 en las tecnolog¨ªas m¨¦dicas. Abunda el pez chico: el 64% tienen menos de 10 trabajadores. Y por ello se agrupan en edificios de negocios. Como el Cinc, en la calle de Llull, donde conviven m¨¢s de 50 firmas.
Desde San Francisco a Barcelona
En la segunda planta del edificio Imagina, en el 22@ de Barcelona, media docena de peque?as empresas relacionadas con la tecnolog¨ªa de la informaci¨®n (TIC) han montado sus despachos. Una de ellas es Apeer, una firma con sede en San Francisco (EE UU) que se dedica a la creaci¨®n de software y que cre¨® una sucursal en Barcelona a mediados del a?o pasado.
Nacho S¨¢nchez, un ingeniero de telecomunicaciones, es el alma de Apeer en el 22@. Tiene 27 a?os y complet¨® la carrera que curs¨® en la UPC con dos a?os en Estocolmo para obtener la doble titulaci¨®n. En 2005 inici¨® la b¨²squeda de trabajo ya en Barcelona: "el panorama era malo, s¨®lo en consultor¨ªas trabajando todo el d¨ªa por poco dinero". As¨ª que ¨¦l, junto con un amigo de recorrido casi gemelo -complet¨® su formaci¨®n en Estados Unidos- decidieron probar por su cuenta present¨¢ndose a concursos y desarrollando prototipos de dom¨®tica.
Un a?o despu¨¦s se encontraron ante una propuesta de desarrollo de software por la citada firma norteamericana para la que trabajaron de forma externa durante algo m¨¢s de un a?o hasta que se integraron en ella. "Ahora tiene dos sedes, la de San Francisco -que tambi¨¦n es peque?a- y la de Barcelona. El software -programas de v¨ªdeo e imagen que utilizan, sobre todo, empresas de mercadotecnia y publicidad- se vende a los dos lados del Atl¨¢ntico. "De momento no nos quejamos; va bien. Empezamos los dos y ahora ya somos cinco". Todos ellos tienen entre 22 y 27 a?os. Es decir, gente joven para un sector joven.
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