En pie de guerra por el liderazgo en el campo

El campo andaluz vive una de sus crisis m¨¢s profundas. El desplome de los precios y la p¨¦rdida de rentabilidad de miles de explotaciones parecen motivos suficientes para unir a los agricultores, pero nada m¨¢s lejos de la realidad. Las tres principales federaciones, Asaja, UPA y COAG, mantienen desde hace semanas un calendario de movilizaciones por separado con reivindicaciones muy similares en muchos casos. La unidad de acci¨®n se antoja poco menos que una quimera, en gran medida por la guerra sin cuartel que mantienen las organizaciones por el liderazgo agrario, una batalla que trasladan tambi¨¦n al movimiento cooperativo.

La disputa por la representatividad en el campo es m¨¢s visible entre COAG y UPA, formaciones que defienden un mismo modelo agrario basado en la explotaci¨®n familiar.

"Es posible dialogar con Asaja, pero muy dif¨ªcil hacerlo con COAG", reconoce Agust¨ªn Rodr¨ªguez, secretario regional de la UPA, que envi¨® en enero de 2008 una carta a su hom¨®logo de la COAG, Miguel L¨®pez, invit¨¢ndole a la unidad de acci¨®n para "fortalecer a ambas organizaciones". En esa misiva, Rodr¨ªguez no ocultaba la sinton¨ªa ideol¨®gica de ambas formaciones: "Tenemos la suerte de contar con un gobierno, el andaluz, que est¨¢ m¨¢s cerca de nuestras posiciones, que de las de Asaja". L¨®pez le contest¨® d¨ªas despu¨¦s en la prensa: "No podemos trabajar condicionados por una unidad ideol¨®gica o pol¨ªtica, y convertirnos en un instrumento del Gobierno". Desde entonces, el di¨¢logo entre ambas formaciones ha sido pr¨¢cticamente nulo.

Ahora, coincidiendo con la crisis del sector del aceite, la COAG ha dirigido cartas al resto de organizaciones apelando a la unidad, pero la ¨²nica respuesta recibida fue de Asaja, rechazando la invitaci¨®n. "No es posible la unidad de acci¨®n con otras organizaciones, ya que hay distintos intereses en juego", apunta Eduardo L¨®pez, secretario de organizaci¨®n de la COAG en Andaluc¨ªa, que lanza sus principales cr¨ªticas hacia Asaja, en especial por la manifestaci¨®n convocada para el pr¨®ximo d¨ªa 31 en Sevilla por la crisis del campo. "Est¨¢n confundiendo a los agricultores con una movilizaci¨®n pol¨ªtica, mafiosa y malintencionada", se?ala L¨®pez, que censura los planteamientos de la patronal agraria en temas como su defensa del olivar superintensivo o la utilizaci¨®n de transg¨¦nicos en el algod¨®n.

Desde Asaja se tilda a la COAG de propugnar una agricultura "contemplativa" y de "ir contra el progreso". Eduardo Serra, presidente de Asaja en Sevilla, cree que las descalificaciones de la COAG "s¨®lo intentan distraer y desviar la atenci¨®n de sus graves problemas internos". Serra alude as¨ª a la aparici¨®n de la Uni¨®n de Uniones, la cuarta organizaci¨®n agraria nacional, creada a partir de la escisi¨®n desde la COAG de asociaciones como la Uni¨®n de Campesinos de Castilla y Le¨®n, Uni¨® de Llauradors de la Comunidad Valenciana y la Uni¨® de Pagesos de Catalunya.

"S¨®lo ha habido puntos de encuentro cuando el enemigo ha estado fuera, sobre todo en Bruselas", admite un portavoz de Asaja. El consejero andaluz de Agricultura, Mart¨ªn Soler, va a convocar esta semana a un grupo de trabajo en el que est¨¦n todas las organizaciones agrarias para aportar soluciones al sector. Aunque las organizaciones defienden su independencia, todas tienen el sambenito de ser muletas de los partidos pol¨ªticos. En todo caso, el movimiento agrario se convierte en ocasiones en cantera de los partidos pol¨ªticos. El caso paradigm¨¢tico fue el de Fernando Moraleda, que dio el salto desde el liderazgo nacional de la UPA a la secretar¨ªa de Estado de Comunicaci¨®n.

La transferencia a Andaluc¨ªa de las competencias del Guadalquivir reabri¨® otra de las guerras m¨¢s intensas de los agricultores, la del control del agua. La hegemon¨ªa de Feragua, la principal federaci¨®n de regantes con m¨¢s de 290.000 hect¨¢reas de riego, la mayor¨ªa en el bajo Guadalquivir, la amenaza ahora Areda, una organizaci¨®n nacida al amparo de la UPA y que es mayoritaria en Ja¨¦n, Almer¨ªa y M¨¢laga. Por si fuera poco, el pasado viernes Asaja constituy¨® la asociaci¨®n de titulares de pozos, manantiales, concesiones por tomas directas y embalses privados de Sevilla, Asagua, con la que pretende situar "en pie de igualdad" a todos los regantes.