La complicada direcci¨®n de los mejores virtuosos
Arnaud Desplechin luce reparto en 'Un cuento de Navidad'
Arnaud Desplechin (Roubaix, 1960) ama la m¨²sica. El cineasta maneja a sus actores como si fueran una orquesta: a cada uno le permite un momento de lucimiento, pero sin que pierdan de vista que la partitura -el gui¨®n- debe interpretarse en com¨²n. Si entre los instrumentistas virtuosos est¨¢n Catherine Deneuve, Chiara Mastroianni, Mathieu Amalric, Melvin Poupaud, Hippolyte Girardot, Anne Consigny y m¨¢s nombres clave del cine franc¨¦s, la labor de Desplechin como director de Un cuento de Navidad parece asimilarse a la de un domador. "Pienso mucho en la m¨²sica mientras dirijo. Pero hecha de manera que se oiga cada instrumento muy claro. Como si fuera jazz: tienes presente cada sonido y a la vez disfrutas de la amalgama".
"Siempre parto de ideas complicadas para contar hechos sencillos"
Desplechin se mesa sus sempiternos pelos despeinados y sonr¨ªe. "Te confieso que era terror¨ªfico, pero delante de ellos no me pod¨ªa permitir pasar miedo. Lo aprend¨ª al principio de mi carrera. Si te mira mal, t¨² le miras peor. He tenido que aprender a mirar en los rodajes. Pero la primera vez que estuve rodeado del reparto, me asust¨¦ [risas]. Pensaba que si se aburr¨ªa uno, que si se enfadaba otro...". El franc¨¦s, uno de los cineastas m¨¢s importantes en su pa¨ªs y menos conocidos en Espa?a, ha vuelto con Un cuento de Navidad al leitmotiv de su carrera: el tema del hijo, del bastardo, de la familia. "No la siento tan personal como otros trabajos. En Cannes, cuando present¨¦ la pel¨ªcula, me hablaban de esa relaci¨®n. Pero yo no odiaba a mi madre [vuelve a re¨ªrse]". Un cuento de Navidad muestra al espectador, en la semana m¨¢s familiar de la cultura occidental, el choque entre los miembros de una familia, una explosi¨®n de caracteres y de sentimientos.
"Nunca estoy contento con mis filmes. Siempre parto de ideas complicadas, nebulosas, confusas para contar hechos sencillos. Cuando me doy cuenta de que la organizaci¨®n material del trabajo no me permite esa simplificaci¨®n, me desespero". Desplechin habla de los problemas del rodaje: no nev¨® cuando deber¨ªa ("Sufr¨ª el calentamiento global, un calor en los Alpes...") o que comprendi¨® el gui¨®n seg¨²n lo filmaba ("En montaje descubr¨ª grandes hallazgos y alguna digresi¨®n; lament¨¦ mucho mi torpeza"). Por cierto, al final, tras nueve selecciones, gan¨® un solo C¨¦sar. ?C¨®mo se aguanta eso? "A m¨ª no me import¨®. Es lo l¨®gico con el tipo de cine que hago. ?Cu¨¢ntos premios ganaron Fahrenheit 451 o La sirena del Misisipi? Y ¨¦sas s¨ª que son pel¨ªculas grandes".
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.