Final redondo en el homenaje de la Sinf¨®nica a Mendelssohn

El oratorio Elias, de Mendelssohn, fue la obra programada para el concierto final del ciclo que la Orquesta Sinf¨®nica de Galicia (OSG) ha dedicado al autor alem¨¢n con motivo del segundo centenario de su nacimiento. La versi¨®n de la obra fue acogida con entusiasmo por el p¨²blico coru?¨¦s, al que, gracias a su gran calidad, sus m¨¢s de dos horas no se le hicieron largas. De este concierto hay que destacar en primer lugar al Coro de C¨¢mara del Palau de la M¨´sica barcelon¨¦s. El conjunto que dirige Jordi Casas tuvo una actuaci¨®n redonda en todos los aspectos por su calidad de voces, musicalidad, t¨¦cnica, y ductilidad.

Tambi¨¦n el conjunto de voces de los Ni?os Cantores de la OSG cuaj¨® una actuaci¨®n memorable por su afinaci¨®n y buen hacer. Pero la distribuci¨®n de sus m¨¢s de 30 voces, con s¨®lo siete varones, es muestra de la educaci¨®n que nuestra sociedad da a sus m¨¢s j¨®venes. Mientras el deporte se extiende en igualdad, persiste una clara renuencia a la participaci¨®n de los varones en actividades art¨ªsticas.

Sandrine Piau es m¨¢s que una bella voz. Aunque la suya enamora al primer golpe de o¨ªdo, la gran artista que es Piau la convierte en un perfecto instrumento al servicio de la partitura. Imprime a cada intervenci¨®n suya el car¨¢cter m¨¢s adecuado, con esa falsa facilidad de los elegidos. Enorme tambi¨¦n el El¨ªas de Mark Stone, que llen¨® de car¨¢cter y fuerza expresiva su dur¨ªsimo papel y salv¨® la fatiga vocal l¨®gica de la segunda parte, pese al esfuerzo de dos conciertos en dos d¨ªas seguidos.

Paloma Silva, la olvidada

Dos veteranos como Ann Murray y Philip Langidge aportaron, con lo mejor de sus a¨²n hermosas voces, su gran t¨¦cnica, oficio y musicalidad. Una adecuada proporci¨®n de todos estos factores, decisiva en el equilibrado resultado final del concierto. La tersura de la voz de Paloma Silva es como un hilo de plata bien bru?ida con el que sac¨® el m¨¢ximo partido a su precioso pero brev¨ªsimo papel. Tan breve, que el director de la OSG, V¨ªctor Pablo P¨¦rez, lleg¨® a olvidar su presencia al final de la primera parte y la jovenc¨ªsima soprano coru?esa tuvo que retirarse sola del escenario para poder regresar a recibir los aplausos y saludos del p¨²blico con el resto de los solistas.

La Sinf¨®nica y V¨ªctor Pablo P¨¦rez tuvieron uno de esos d¨ªas que acaban siendo recordados por la afici¨®n como los grandes hitos de la temporada. Todas las secciones y solistas brillaron a la gran altura de su calidad. Se debe destacar el largo solo de chelo de Tanasescu en el recitativo Du mann Gottes, subrayando id¨®neamente el sentido de la acci¨®n descrita por el bar¨ªtono.