Hollywood escribe el obituario de la prensa

La sombra del poder ser¨¢ la ¨²ltima cinta que transcurra en la redacci¨®n de un peri¨®dico. As¨ª lo afirma Ben Affleck, insospechado gur¨² de la sociedad de la informaci¨®n y protagonista junto a Russell Crowe de la adaptaci¨®n al cine de la miniserie brit¨¢nica hom¨®nima. Tremendismos aparte, esas palabras esconden una mentira. Porque ya hay otra pel¨ªcula sobre el fin de la prensa: The soloist, que se estrena el 25 de septiembre. Cuenta la amistad entre un sin techo que iba para virtuoso (Jamie Foxx) y un columnista de Los Angeles Times (Robert Downey Jr.) que ve c¨®mo la redacci¨®n de su peri¨®dico se viene a pique. Dos historias inconexas con el mismo tel¨®n de fondo: la desaparici¨®n de la prensa escrita.

Robert Downey: "La Red es la muerte de los peri¨®dicos. Da miedo"

Russell Crowe: "Es confusa la l¨ªnea que separa informaci¨®n y espect¨¢culo"

"Internet es la muerte de la prensa. Los blogs les est¨¢n comiendo el terreno. Y da miedo", sopesa Robert Downey Jr., ¨¢vido lector de peri¨®dicos tanto del respetable The Washington Post como del diario sensacionalista New York Post. "La figura de un periodista y columnista como Steve L¨®pez es fundamental en nuestra sociedad", admite el actor de su personaje en la pantalla. "Pero The soloist tambi¨¦n habla de las dudas de L¨®pez, de si sus historias quer¨ªan reflejar la vida de los sin techo o salvar su puesto de trabajo", a?ade Downey Jr., que ya encarn¨® a un periodista en Zodiac.

El cine y la prensa siempre se han dado la mano pese a la tirria que se profesan mutuamente. "Es normal ese ellos y nosotros, aunque mi percepci¨®n cambi¨® cuando el a?o pasado prepar¨¦ Nothing but the truth

[pendiente de estreno en Espa?a]. Vi los paralelismos entre nuestros trabajos, nacidos de una vocaci¨®n, obsesivos y en los que todo depende de la historia. Un grupo cerrado donde, como los actores, es normal que los periodistas se casen entre ellos", bromea la actriz Kate Beckinsale.

Ya sean comedias como Luna nueva o Primera plana o dramas como Ciudadano Kane o El gran carnaval, a Hollywood le gusta la vida en una redacci¨®n. En algunos casos han sido fuente de inspiraci¨®n para nuevas generaciones de periodistas, ya sea con Todos los hombres del presidente, Al filo de la noticia, la serie Lou Grant o la mism¨ªsima rana Gustavo ("el reportero m¨¢s dicharachero de Barrio S¨¦samo"). Pero a juzgar por el ritmo acelerado de despidos en la prensa y de peri¨®dicos en v¨ªas de desaparici¨®n, las predicciones de Affleck est¨¢n a la vuelta de la esquina. "Mis hijas ser¨¢n ya de las que se asombren de que en su d¨ªa se imprimieran las noticias en papel. Lo ver¨¢n como algo in¨²til", insiste Affleck, que disfruta con la inmediatez de los bloggers aunque le preocupa su falta de rigor. "Es la democratizaci¨®n del periodismo", a?ade Affleck, fen¨®meno que en su opini¨®n puede significar "que se acabe con la ¨¦tica y el rigor que debe ser el basti¨®n de la prensa". Como dicen en el filme, la verdad muere en aras de vender m¨¢s.

Las l¨ªneas est¨¢n cada vez m¨¢s borrosas incluso sin necesidad de blogs, como demuestra la promoci¨®n de The soloist en el mismo peri¨®dico en el que naci¨® esta historia en 2005. El fin de semana del 5 de abril el diario confundi¨® a sus lectores con un suplemento publicitario que, evocando las p¨¢ginas de informaci¨®n, reprodujo una entrevista con L¨®pez, columnista habitual del diario, as¨ª como otros textos promocionales encubiertos como noticias. Como reconoce Russell Crowe, "la l¨ªnea entre lo que es informaci¨®n y lo que es espect¨¢culo cada vez est¨¢ m¨¢s confusa".