Ciencia e Iglesia cat¨®lica

Mart¨ªnez Camino, portavoz de la Conferencia Episcopal, en el art¨ªculo publicado en EL PA?S el 25 de abril de 2009 relativo a la investigaci¨®n con c¨¦lulas madre, dice cosas como "se elimina a los enfermos para dejar vivir a los sanos"; "se selecciona a unos para la muerte y a otros para la vida".

Si la ciencia tuviese que regirse por estos se?ores, Andr¨¦s, el ni?o sevillano, continuar¨ªa siendo un ni?o enfermo, y Javier, su hermano, podr¨ªa acompa?arle padeciendo la misma enfermedad. ?Se creen ustedes que puede haber una madre que si tiene la posibilidad de curar a su hijo enfermo no lo har¨ªa mediante la selecci¨®n gen¨¦tica? Yo me considero cristiano y no veo nada malo en que utilizando la ciencia nazcan ni?os sanos; m¨¢s bien casi me parece un milagro.

Despu¨¦s tenemos los enfermos de alzh¨¦imer, p¨¢rkinson, sida, c¨¢ncer, etc¨¦tera, que est¨¢n esperando a ver si la ciencia les llega a tiempo. Con su criterio, ni esa esperanza tendr¨ªan; cualquiera de nosotros puede llegar a padecer esas enfermedades, por lo que s¨®lo nos queda confiar en la buena disposici¨®n del Gobierno actual -al que la Conferencia Episcopal no para de criticar por todo-, que, pese a quien pese, sigue apoyando a la ciencia.