La piqueta acaba con un lujo de 18 millones
Derribada en Ibiza una mansi¨®n ilegal de 3.159 metros tras a?os de pleitos
Las excavadoras trabajaron sin licencia durante seis meses de 1996 para rebajar la cumbre de un monte de pinares en la zona virgen de Corona, en Sant Antoni de Ibiza. El m¨²sico de nacionalidad francesa Michael Cretu (Bucarest, 1957), alma del grupo Enigma, desmoch¨® una colina y, tras un a?o de obras, obtuvo un permiso municipal (que result¨® ilegal) para que cupieran los 3.150 metros cuadrados de su mansi¨®n so?ada. Catorce a?os y un mont¨®n de pleitos despu¨¦s, otras retroexcavadoras derriban desde el jueves por orden judicial el enorme complejo. Cretu valora en m¨¢s de 18 millones de euros el patrimonio inmobiliario perdido.
"Estaban advertidos de la ilegalidad. Es una victoria que nos hubiera gustado no celebrar pero es hist¨®rica porque era una brutalidad", razona Neus Prats del Grupo de Estudios de la Naturaleza (GEN-GOB), que encabez¨® las denuncias contra el edificio hasta llegar al Tribunal Supremo. Cretu tard¨® nueve a?os en levantar su mansi¨®n, con un estilo arquitect¨®nico a mitad de camino entre un monasterio y un castillo, para lo que rebaj¨® en tres metros la altura de la colina. Para amortiguar el impacto visual, rode¨® la casa de cipreses y palmeras.
El m¨²sico ha peleado hasta el final para intentar conservar su impresionante mansi¨®n. En su pelea, Cretu lleg¨® a conseguir que el Gobierno balear de Jaume Matas hiciera una ley ad hoc para que Cretu no tuviera que demoler. No cuaj¨® la maniobra. En 2003, el Supremo dictamin¨® que deb¨ªa ser pasto de la piqueta. Pero los a?os pasaban y la casa segu¨ªa en pie. La pertinaz demora municipal en ejecutar el derribo provoc¨® que el Ayuntamiento de Sant Antoni tuviera que pagar dos sanciones de 600 euros por los retrasos en la demolici¨®n. Agust¨ª Cerver¨®, abogado de cuestiones urban¨ªsticas, recuerda que la licencia municipal fue declarada nula en los juzgados porque el paraje natural goza de la m¨¢xima protecci¨®n por las leyes propias del Parlamento balear.
"La casa de Cretu podr¨ªa haberse destinado a usos p¨²blicos", manifest¨® el edil de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, del PP, que rechaza la eventual indemnizaci¨®n por 18 millones a Cretu al recordar que la licencia s¨®lo permit¨ªa edificar 700 metros cuadrados.
El abogado Jaume Roig, defensor de Cretu, lamenta la supuesta discriminaci¨®n contra el propietario por ser muy conocido y extranjero. "La demolici¨®n s¨ª es ejemplar", dice el jurista Cerver¨®. "Se acab¨® la impunidad", sentencia Neus Prats. Algunos vecinos de la zona, payeses y turistas, lamentan el gasto y destrozo de una mansi¨®n.
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