Su 'escala real'

En una de sus geniales ocurrencias, Borges dec¨ªa que hay cierto tipo de artistas a los que admiras, y a otros a los que, adem¨¢s, consideras amigos, y a?ad¨ªa que de Quevedo es imposible ser amigo porque es demasiado perfecto, es como un diamante que en el que nada se puede transformar, pero que, sin embargo, de Cervantes pod¨ªas ser amigo, ya que en su perfecci¨®n e imperfecciones resid¨ªa la genialidad y grandeza de su obra. Tal es el caso de Antonio Vega. Un tipo al que, lo conocieras o no, era inevitable considerarlo un amigo. No hay otro autor musical que haya ejercido mayor influencia sobre mi formaci¨®n como poeta. Recuerdo la impresi¨®n que me caus¨® o¨ªr por primera vez sus canciones, llenas de met¨¢foras que ligaban la f¨ªsica con determinada sentimentalidad, unas canciones muy indefinibles a nivel de textos, algo que creo que en la m¨²sica espa?ola nunca se hab¨ªa hecho. Me recuerdo perfectamente con 17 a?os pensando que ese tipo llamado Antonio Vega deber¨ªa sentir ante las ciencias lo mismo que yo, una emoci¨®n est¨¦tica. En ese momento, me puse en marcha para intentar formalizar a mi manera aquella intuici¨®n, que en ese momento ve¨ªa ya materializada en aquel compositor, lo que pasados muchos a?os llam¨¦ postpoes¨ªa. Su dominio de los conceptos cient¨ªficos era preciso, nunca le o¨ª una pifia, nunca fue impostado, nunca actu¨® por imitaci¨®n ni de o¨ªdas, sab¨ªa lo que dec¨ªa, dominaba perfectamente el sutil lenguaje de relacionar dos mundos aparentemente disjuntos en una misma met¨¢fora, sin quedarse corto ni pasase. Adem¨¢s, sab¨ªa escribir: donde otros fracasaban en ci¨¦nagas po¨¦ticas, ¨¦l sal¨ªa ileso, supo crear su propio lenguaje narrativo. Un maestro. "Yo part¨ª hace mucho tiempo ya, soy el fruto de la Relatividad" (Oc¨¦ano de Sol). En general, canciones como Escala real, Una d¨¦cima de segundo, Luz de cruce, Oc¨¦ano de sol, Lo que t¨² y yo sabemos, o Tesoros, entre otras muchas, denotan tal dominio de la palabra y la composici¨®n, que era imposible que no crearan escuela.

Recuerdo la ¨²nica vez que pude hablar con ¨¦l detenidamente. Fue a la salida de un concierto, har¨¢ unos 5 a?os. Los escenarios todo lo magnifican. Abajo, estaba muy envejecido. Le regal¨¦ mi libro de poemas Joan Fontaine Odisea, le cont¨¦ que, en parte, yo era escritor gracias a su influjo, a la impresi¨®n po¨¦tica y compositiva que me caus¨® o¨ªr por primera vez su canci¨®n Escala real, perdida ya en los microsurcos de un viejo maxisingle. ?l se emocion¨®, yo tambi¨¦n. Supongo que el hecho de que alguien venga recordarte una canci¨®n de la que nadie se acuerda, y que adem¨¢s te diga que ha sido una influencia fundamental para escribir, es algo que no ocurre siempre. Me agarr¨® del brazo y me dijo: "de puta madre, Agust¨ªn, de puta madre, gracias". Con esa humildad me lo dijo, lo que me sobrecogi¨® a¨²n m¨¢s. Gracias a ti, maestro.

Agust¨ªn Fern¨¢ndez Mallo es escritor.