Flores de mayo en el parqu¨¦
En el gran esquema de los mercados mundiales de capital, 500 millones de d¨®lares es una gota en un cubo. Pero esa cantidad -recaudada por un tr¨ªo de debutantes en las Bolsas estadounidenses la semana pasada- dice m¨¢s acerca del esp¨ªritu de los inversores de lo que su tama?o podr¨ªa dar a entender. La fuerte demanda y el buen precio dado a empresas m¨¢s arriesgadas indican un deseo latente de los inversores de poner el dinero a trabajar. ?se es un componente fundamental para cualquier recuperaci¨®n econ¨®mica.
No nos confundamos: es improbable que sea el comienzo definitivo de un nuevo mercado alcista o de un repunte de las salidas a Bolsa. Y los casi 500 millones de d¨®lares recaudados por los reci¨¦n llegados (DigitalGlobe, SolarWinds y OpenTable) equivalen a menos del 5% del efectivo que Bank of America atrajo en un d¨ªa el martes. Pero el hecho de que unas cuantas empresas desconocidas, con visibles defectos, puedan atraer tal inter¨¦s demuestra que los inversores est¨¢n dispuestos a dejar de centrarse en reparar los balances de empresas en apuros pero con un historial probado por el tiempo.
F¨ªjense en OpenTable, el servicio de reservas de restaurante por Internet. Incluso despu¨¦s de alcanzar un precio superior al esperado y reunir 60 millones, su reciente OPV no es gran cosa. Pero merece la pena se?alar que una empresa unida a los restaurantes caros golpeados por la recesi¨®n puede atraer m¨¢s que un mero vistazo de los inversores. Es incluso m¨¢s extraordinario si se considera que casi la mitad de los ingresos de la operaci¨®n ni siquiera se dedicar¨¢n a expandir el negocio. Aproximadamente la mitad del dinero obtenido ir¨¢ a los bolsillos de los inversores de riesgo de OpenTable: no obstante, los suscriptores de OpenTable en Merrill Lynch y Allen & Co. conf¨ªan lo suficiente en el apetito del mercado como para subir hasta un 50% el precio la operaci¨®n el martes por la noche, dos d¨ªas antes del estreno.
De manera similar, SolarWinds vio c¨®mo sus acciones sub¨ªan un 10% el mi¨¦rcoles, d¨ªa de su estreno, aunque el fabricante de software hab¨ªa fijado el precio de su oferta un tercio por encima de sus expectativas iniciales. La empresa, que afronta la competencia de grandes rivales como Cisco e IBM, tambi¨¦n dirigi¨® una parte de los ingresos hacia los accionistas vendedores.
La creaci¨®n de capital riesgo, del que la demanda de salidas a Bolsa constituye un importante indicador, es fundamental para volver a enderezar la econom¨ªa. Por consiguiente, cuando empresas como ¨¦stas disfrutan de tanta atenci¨®n es dif¨ªcil no considerarlo una se?al positiva, siempre que los inversores no pequen de una efervescencia excesiva demasiado pronto. -
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