Andan en las nubes

El barrio del Raval es un microcosmos fidedigno de las graves dolencias del Ayuntamiento de Ciutat Vella. En d¨ªas pasados, cerraron el legendario bar Mendiz¨¢bal porque hace medio a?o un cliente fum¨® un porro y tiempo despu¨¦s la Guardia Urbana encontr¨® otro porro apagado en una mesa. ?Vaya ridiculez! A unos pasos, en la misma calle del Hospital, el bar Mediterr¨¢neo, regentado por marroqu¨ªes, es la guarida de quienes trafican con el hach¨ªs, actividad ampliamente conocida por la polic¨ªa y vecindario. "Ah¨ª todos son malos. Los estamos observando para actuar cuando tengamos pruebas", me dec¨ªa hace dos a?os un mosso, cuya instituci¨®n, seguramente, a¨²n espera los an¨¢lisis del Science Institute para corroborar si se trata de hach¨ªs o caca de rata.

Entre un bar y otro, en las esquinas de Robadors y Egipc¨ªaques, las mafias de nigerianos, que siguen intactas como es de esperar en una mafiocracia, ganan terreno a las marroqu¨ªes, vendiendo a toda hora del d¨ªa hero¨ªna y coca¨ªna. Su presencia ha sido denunciada hasta el cansancio por vecinos y comerciantes, quienes se exponen a diversos actos de violencia, desde duelo de pu?ales a pleno sol hasta pleitos campales entre prostitutas. Cuando se acerca la polic¨ªa, no se inmutan. Llevan la coca¨ªna distribuida en peque?as bolitas plastificadas, que se apresuran a guardar en la boca, sus amplias quijadas les permiten almacenar muchas de ellas, y si el cacheo es inminente, se las tragan, modus operandi que tambi¨¦n conocen los agentes del orden, pero entre sus objetos, esposas y libretas para infracciones, no est¨¢n consideradas las lavativas. Quiz¨¢, en las in¨²tiles redadas que efect¨²an -para demostrar que algo se hace con los impuestos del pueblo- convendr¨ªa que les acompa?asen dentistas y proct¨®logos.

Pero no seamos tan injustos, es muy probable que la clausura del bar Mendiz¨¢bal haya sido una acto de buena fe por parte del Ayuntamiento para cuidar la salud p¨²blica de sus agentes, ya que, tal parece, los clientes de aquella terraza en discordia se fuman los porros y a la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra les hace efecto, pues no hay duda de que andan en las nubes.