"Concibo mis pel¨ªculas para hacer feliz a la gente"

Richard Curtis (Nueva Zelanda, 1956) es el art¨ªfice de algunas de las pel¨ªculas m¨¢s taquilleras del cine brit¨¢nico de los ¨²ltimos a?os como guionista de Cuatro bodas y un funeral, Notting Hill, El diario de Bridget Jones y Love actually, esta ¨²ltima tambi¨¦n su estreno en la direcci¨®n. Un cierto sector de la cr¨ªtica le ha reprochado la comercialidad de su talento, pero a ojos del gran p¨²blico es el rey incuestionable de la comedia rom¨¢ntica. Aunque el nuevo filme de Curtis, Radio encubierta, relata en cierto modo una historia de amor, los enredos y desenredos de pareja son aqu¨ª colaterales, porque el principal objeto de la pasi¨®n de los protagonistas es la m¨²sica que defini¨® a una generaci¨®n, el pop y el rock.

Pregunta. Su tributo a la m¨²sica parece una celebraci¨®n del esp¨ªritu rebelde de los sesenta...

Respuesta. M¨¢s que los sesenta, quer¨ªa reflejar un tiempo particular en tu vida, cuando dejas la universidad, te vas a vivir a un apartamento horrible y lleno de gente, y no tienes todav¨ªa que preocuparte por la familia, el dinero o un empleo. La pel¨ªcula versa sobre esa etapa en que eres joven, est¨¢s rodeado de amigos y te sientes libre

P. Pero la historia se centra en esa lucha real por liberar las emisiones del control del gobierno...

R. As¨ª ocurri¨®, y eso que se trataba de un gobierno laborista, de izquierdas. Cre¨ªan que la gente joven iba a ser explotada si pagaba por escuchar discos [la radio comercial no se legaliz¨® hasta 1973], pero tambi¨¦n que las emisiones deb¨ªan de ser controladas por un funcionario.

P. ?A qu¨¦ obedece su reincidencia en los repartos corales?

R. Lo que m¨¢s me interesa es explorar la amistad y eso se traduce en amplios repartos. En Notting Hill y Cuatro bodas y un funeral la relaci¨®n de Hugh Grant con sus amigos es tan importante como la que mantiene con la chica.

P. La cr¨ªtica brit¨¢nica ha acogido con tibieza Radio encubierta. ?Le condicionan las expectativas comerciales que generan sus pel¨ªculas?

R. Creo que los cr¨ªticos visionan mis pel¨ªculas en las circunstancias err¨®neas, a primera hora de la ma?ana en una sala semivac¨ªa, cuando est¨¢n concebidas para una multitud, para que el p¨²blico r¨ªa de los chistes en compa?¨ªa, para hacer feliz a la gente. Tampoco Love actually gust¨® a la cr¨ªtica y al final result¨® ser mi pel¨ªcula m¨¢s popular.