Lorenzo se pone gallito

Tras la carrera que se celebr¨® en Le Mans hace dos semanas, Valentino Rossi contact¨® con Aldo Drudi, el dise?ador de cascos para motos m¨¢s famoso del mundo, y el hombre que ha creado el universo iconogr¨¢fico que identifica al italiano. "Vale me llam¨® el mi¨¦rcoles, mucho antes que normalmente, para que comenzara a pensar qu¨¦ dise?o pod¨ªamos inventar con vistas al Mugello", asegura Drudi. "Estaba muy cabreado por lo que ocurri¨® en Le Mans [se cay¨® y termin¨® el ¨²ltimo], y quer¨ªa centrarse en la siguiente carrera. Lo del casco fue una especie de terapia", opina el dise?ador, que el a?o pasado, precisamente en esta carrera, dej¨® boquiabierto a todo el mundo con una de sus propuestas m¨¢s imaginativas: Rossi luci¨® un casco con su cara estampada.

"Valentino vino a cenar a casa y discutimos el dise?o. '?Qu¨¦ pasar¨¢ en Mugello?', le pregunt¨¦. Y ¨¦l se puso las manos en la cabeza, pensando en la presi¨®n que tiene que soportar en este circuito y la que le est¨¢ metiendo Lorenzo", revela el grafista italiano.

Hasta Drudi se ha dado cuenta del peligro que supone tener en el mismo garaje al mallorqu¨ªn, que ayer, en otro ejemplo de irreverencia, se apunt¨® su segunda pole position de la temporada, por delante de Casey Stoner, Loris Capirossi y Rossi, que abrir¨¢ la segunda fila de la parrilla. Dani Pedrosa, con un desgarro muscular en la pierna derecha que le provoc¨® "un dolor intermitente muy intenso" que le paralizaba la pierna, arrancar¨¢ octavo. ?lvaro Bautista abrir¨¢ la parrilla del dos y medio y Bradley Smith la de 125cc.

A pesar del tremendo tir¨®n que sigue teniendo Rossi, el inter¨¦s por Lorenzo se ha disparado desde la segunda carrera del a?o, en Jap¨®n, donde logr¨® su primera victoria de la temporada, delante de todos los gerifaltes de Yamaha. "Desde ese momento, las peticiones de entrevistas se multiplicaron", asegura H¨¦ctor Mart¨ªn, el amigo que se encarga de gestionar todas las cuestiones relacionadas con la comunicaci¨®n del espa?ol. "Antes, hac¨ªamos dos entrevistas el jueves y dos el s¨¢bado, cada una de 15 minutos. Ahora hacemos una m¨¢s cada d¨ªa, pero hemos tenido que reducir el tiempo a diez minutos", puntualiza el periodista. Y matiza: "Y la exigencia fue a¨²n mayor tras ganar en Le Mans y ponerse l¨ªder del campeonato".

Yamaha presume de tener bajo el mismo techo al presente y al futuro del motociclismo, algo que por otra parte puede convertirse en un problema. Rossi y Lorenzo son dos gallitos de pelea en un mismo gallinero, y el protagonismo que est¨¢ adquiriendo el motociclista balear amenaza con romper el clima de indiferencia mutua que hab¨ªa hasta ahora. "Lo bonito ser¨ªa ganar a Valentino as¨ª. ?l controla el cotarro y es normal porque se lo ha ganado. Jorge quiere ganarle en inferioridad de condiciones", confieren desde el entorno del balear. De cualquier forma, a Lin Jarvis, director deportivo de Yamaha, se le viene trabajo encima porque el contrato de Lorenzo expira a fin de a?o y las conversaciones ya han comenzado. La marca pretende renovar el acuerdo (ahora gira en torno a los tres millones de euros) evitando que se repita otro caso como el de Rossi, que se embolsa 15 millones y apenas tiene compromisos publicitarios con Yamaha. Al ritmo que va Lorenzo, Jarvis lo tiene crudo.