El Ayuntamiento tira sin permiso las casas del 'clan de los yugoslavos'

El Ayuntamiento derrib¨® ayer a las nueve de la ma?ana cuatro fincas en el sector III de la Ca?ada Real Merina, una v¨ªa pecuaria con varios cientos de construcciones ilegales.

Los cuatro derribos son supuestamente il¨ªcitos y sin autorizaci¨®n judicial porque algunas de las fincas demolidas est¨¢n en procesos judiciales abiertos. Pero lo m¨¢s curioso es que los cuatro inmuebles coinciden con los ¨²ltimos domicilios de la mayor banda de ladrones de casas de Madrid, la banda de los yugoslavos.

Este nutrido grupo de delincuentes -42 personas- que entraban en los domicilios con el m¨¦todo del resbal¨®n (deslizar un pl¨¢stico r¨ªgido por la cerradura para abrir la puerta) y est¨¢n acusados de cientos de robos con fuerza, vivieron hasta el 1 de junio en las viviendas derruidas y en sus alrededores, donde hab¨ªan instalado varias autocaravanas enormes.

Los inmuebles, en la Ca?ada, fueron derribados sin la orden de un juez

All¨ª hab¨ªan excavado zulos bajo la tierra donde escond¨ªan sus botines, kilos de joyas, sobre todo de oro, que enterraban en bolsas de basura. Pero no eran sus propietarios. Sus leg¨ªtimos due?os son gente como Irene Calderas, de 27 a?os, que asegura que es ella la que pasaba sus d¨ªas en esa "chabola" con su marido y sus dos hijos, de tres a?os y escasos meses. Irene aporta documentos. Muestra un certificado de empadronamiento que incluye a sus criaturas: "Las met¨ªa el Ayuntamiento de oficio cada vez que nac¨ªa una".

Con ese documento le basta para asegurarse que su vivienda no se puede tildar de vac¨ªa que es lo que arguye el consistorio madrile?o para hacerla desaparecer. Esto lo afirma el abogado de la familia, Roberto Alonso, que muestra los legajos que demuestran que esa finca, la 36, est¨¢ inmersa en un proceso judicial a¨²n inacabado. "Urbanismo no es nadie para decidir si est¨¢ habitada la casa o no", insiste el letrado, que apunta al futuro desarrollo urban¨ªstico de Los Ahijones como la verdadera causa de los derribos. En total, en ese tramo, se han realizado 138 derribos en el ¨²ltimo a?o natural.

Pero desde la Concejal¨ªa de Urbanismo, una de sus responsables tiene otra explicaci¨®n. "La polic¨ªa vigila estos sitios y se cerciora con sus informes de que est¨¢n vac¨ªas", explica. En este caso, comenta, supieron r¨¢pidamente que se hab¨ªan quedado sin inquilinos porque todos ellos fueron detenidos y enviados a prisi¨®n el pasado 1 de junio. De hecho, todos ellos, sin excepci¨®n, siguen en prisi¨®n.

"Nadie puede pensar realmente que esa gente estaba dentro de las casas", replica Alonso, que a modo de explicaci¨®n exclama: "?Todos sabemos c¨®mo es la Ca?ada, la gente llega all¨ª con sus caravanas, se instala, y ya est¨¢!". Irene asegura que lleva viviendo all¨ª desde 2002 y que ayer por la ma?ana, cuando llegaron sin previo aviso y sin orden judicial a dejarles sin casa, estaba "preparando a los ni?os para ir a la guarder¨ªa".

Ni ella ni su marido trabajan, "por la crisis". Aseguran que se han quedado en la calle y han optado por irse a vivir a casa de los padres de ella, que tambi¨¦n est¨¢ en ese tramo de la v¨ªa pecuaria. Irene asegura que a su padre, ya mayor, le ha dado un fuerte ataque de ansiedad al conocer la noticia.

Adem¨¢s, en el desalojo, la presidenta de la Asociaci¨®n de Vecinos de esa zona de la Ca?ada asegura que fue agredida por un polic¨ªa municipal. Aporta un informe m¨¦dico en la que figura que padece "dolor en el hombro derecho tras sufrir tracci¨®n brusca".