Familias hipotecadas piden alimentos a C¨¢ritas
Cada d¨ªa son m¨¢s. S¨®lo entre enero y mayo de este a?o, 30.000 personas han acudido a C¨¢ritas pidiendo ayuda urgente. El 40% era la primera vez que pisaban la organizaci¨®n. Entre los nuevos colectivos, aunque todav¨ªa minoritarios, destacan las personas con ingresos de entre 1.500 y 1.800 euros al mes que piden ayuda alimentaria para poder destinar sus ingresos al pago de su hipoteca. La crisis los est¨¢ destrozando. A ellos y a otros muchos: mujeres inmigrantes que tienen a sus maridos en paro y buscan trabajo sin tener formaci¨®n, familias con ni?os que no pueden pagar la guarder¨ªa, personas mayores, otros que no tienen techo, enfermos mentales... muchas de estas personas viven de realquiler y pagan entre 200 y 400 euros por una habitaci¨®n.
Las listas de espera tienen entre 1.500 y 2.500 personas
El 72% de las personas en edad laboral que piden ayuda est¨¢n en paro y la mitad est¨¢ en situaci¨®n irregular. El 13% trabaja con contrato y el 8% est¨¢ empleado en la econom¨ªa sumergida. Barcelona, Terrassa y Sabadell son las ciudades con mayor concentraci¨®n de personas atendidas.
Las mujeres, seg¨²n explican en C¨¢ritas, son las primeras que solicitan ayuda, para sus hogares y para sus hijos. Se nota el descenso de los inmigrantes reci¨¦n llegados, y los espa?oles que acuden a C¨¢ritas representan el 32%.
El total invertido en ayudas por la ONG asciende a 801.596 euros, aunque prev¨¦ acabar 2009 con un total de tres millones de euros. Las ayudas a la vivienda y a la infancia son las que m¨¢s suben. Las listas de espera en C¨¢ritas tienen entre 1.500 y 2.500 personas, seg¨²n el mes, y la espera para acceder a las ayudas es de entre tres y cinco semanas. "Tenemos una crisis social con riesgo de ruptura de la cohesi¨®n y la convivencia, y con una tendencia a culpar al inmigrante", denunci¨® ayer Jordi Rogl¨¤, director de la organizaci¨®n. "Tenemos una pobreza m¨¢s intensa, porque los pobres son cada vez m¨¢s pobres, y m¨¢s extensa, con nuevos colectivos que nunca antes hab¨ªan vivido esta situaci¨®n". El director de C¨¢ritas considera necesario que se adopten medidas extraordinarias: "Es el momento de las complicidades. Alquien tiene que coger la batuta".
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