El revuelo de los faraones
Egipto, con su estrella Zidan, dinamita el grupo de Brasil e Italia
"?Cuidado con Egipto!". No era una simple precauci¨®n, uno de esos escudos que con cierta carga demag¨®gica sueltan con frecuencia los t¨¦cnicos para acentuar la importancia de sus galones. Vicente del Bosque ten¨ªa toda la raz¨®n. Egipto no era una mar¨ªa y ha revolucionado a las her¨¢ldicas Brasil e Italia. Su asalto al campe¨®n del mundo (1-0) ha enredado de tal forma el Grupo B que lo mismo puede quedar eliminado Brasil que a¨²n repescarse Estados Unidos. Nadie est¨¢ a salvo, nadie est¨¢ descartado. Egipto tiene la culpa.
Y, al frente de los faraones, Mohamed Zidan, que a punto estuvo de ser el verdugo de la canarinha y cay¨® lesionado ante Italia. Junto a su compa?ero de vanguardia Aboutrika y el portero El Hadary, ha sido el principal forro de la sorprendente selecci¨®n que dirige Hassan Shehata, que relev¨® en 2006 al italiano Marco Tardelli, el inolvidable p¨®ster de la final mundialista de 1982 en Chamart¨ªn. Tan extasiado estaba Shehata con la victoria sobre la azzurra que la FIFA le exculp¨® de dar la conferencia de prensa posterior al encuentro. Lo hizo su segundo, Shawky Gharib, pero, antes de someterse al interrogatorio medi¨¢tico, se tom¨® unos minutos para dar p¨²blicamente gracias a Al¨¢.
Es una selecci¨®n genuina. S¨®lo cuatro de sus futbolistas juegan en el extranjero
Egipto, 40? en la clasificaci¨®n de la FIFA, es una selecci¨®n genuina. De las ocho participantes en la Copa Confederaciones es la que m¨¢s jugadores ha reclutado de su Liga. S¨®lo El Hadary (Sion), Rabbou (Al Ahli, Emiratos ?rabes), Shawky (Middlesbrough) y Zidan (Borussia Dortmund) han cruzado la frontera. El Hadary, el h¨¦roe ante Italia, intenta recuperar la canonizaci¨®n que lleg¨® a tener en su pa¨ªs. En 2001 gan¨® la Liga de Campeones africana con el Ahly, de El Cairo, y cop¨® todas las portadas cuando en la Supercopa, ante el Kaizer Chiefs, surafricano, marc¨® un gol decisivo con un tiro libre desde medio campo. En 2008 abandon¨® al club capitalino para enrolarse en el Sion, suizo. El Ahly le denunci¨® y, desde entonces, los seguidores del club m¨¢s popular de Egipto le abroncan cada vez que juega con la selecci¨®n.
Zidan es a¨²n un caso m¨¢s llamativo. Lleg¨® a rechazar las primeras convocatorias de su selecci¨®n a la espera de la nacionalidad danesa. Nacido en Puerto Said, el 11 de diciembre de 1981, fue cortado por el equipo de la ciudad, el Al Masry, y acab¨® en el pozo de la Tercera Divisi¨®n. A punto de perder la vocaci¨®n, un gui?o del destino dio un giro a su vida. Su padre le llev¨® en un viaje de negocios a Copenhague y all¨ª, mientras pateaba la pelota en un parque, un ojeador del B93 Copenhague le hizo una oferta. Zidan se enrol¨® en el B93 y m¨¢s tarde en el vecino AB. Lleg¨® a ser m¨¢ximo goleador del torneo dan¨¦s en 2004 y la Bundesliga le ech¨® el lazo. Pas¨® por el Werder Bremen, el Mainz y el Hamburgo hasta alistarse en 2008 en el Borussia Dortmund, en el que ha sido un goleador muy intermitente (seis goles en la Liga alemana) pese a su habilidad y perseverancia. En la selecci¨®n se ha convertido en un ¨ªdolo para la hinchada. El a?o pasado fue decisivo en la victoria de Egipto en la Copa de ?frica. Su popularidad tambi¨¦n se ha multiplicado tras su romance con la actriz May Ezzedine. Hoy, frente a Estados Unidos, ser¨¢ baja, pero todos le esperan en la semifinal. Egipto se siente muy capaz.
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