El malestar social agita Sur¨¢frica a un a?o del Mundial
El presidente Zuma reconoce la gravedad de la corrupci¨®n
La f¨®rmula es casi infalible. Individuos se rebelan contra la injusticia, llegan al poder, se corrompen, cometen injusticias y, pasado un tiempo, la gente se rebela contra los antiguos rebeldes. Esto es lo que ha estado ocurriendo esta semana en Sur¨¢frica, donde se han registrado protestas violentas y unas 200 detenciones, aunque hasta ahora sin muertos, en varias poblaciones negras del norte del pa¨ªs. Las protestas han sido en todos los casos contra las autoridades municipales, integrantes del Congreso Nacional Africano (CNA) de Nelson Mandela.
Choques de esta naturaleza, con la vieja f¨®rmula de fondo, son tan tristemente habituales en el mundo que no suelen ser noticia, especialmente si ocurren en lugares lejanos del continente africano. Pero en este caso las im¨¢genes de los enfrentamientos entre manifestantes y la polic¨ªa han dado la vuelta al mundo, especialmente las que se han visto en un pueblo llamado Siyathemba, cuyo detestado alcalde intent¨® calmar a los manifestantes, pero no se atrevi¨® a emerger del veh¨ªculo blindado que lo hab¨ªa llevado al lugar de los hechos.
La explicaci¨®n es que Sur¨¢frica ser¨¢ la sede del Mundial de f¨²tbol el a?o que viene y existe en muchas partes de la tierra un cierto nerviosismo en cuanto a la posibilidad de que el pa¨ªs no est¨¦ a la altura de las circunstancias, y concretamente a que la violencia convierta el espect¨¢culo m¨¢s grande del mundo en un fiasco. Cualquier posible s¨ªntoma de inestabilidad, por inocuo que pueda ser, genera un desproporcionado inter¨¦s.
?Es inocuo lo que se ha visto en Sur¨¢frica esta semana? En cuanto a su dimensi¨®n internacional, en cuanto al impacto que puede llegar a tener sobre el Mundial, sobre la viabilidad de celebrar el torneo en Sur¨¢frica, s¨ª. Para el Gobierno surafricano del nuevo presidente, Jacob Zuma, sin embargo, las protestas son motivo de alarma. Porque van al coraz¨®n del gran problema nacional surafricano: repartir la riqueza del pa¨ªs m¨¢s econ¨®micamente fuerte de ?frica; crear empleo, hacer que los servicios p¨²blicos m¨¢s elementales -luz, agua potable, casas de ladrillo (y no de hojalata)- lleguen a los m¨¢s pobres.
El descontento general que se ha expresado esta semana en ciertas partes del pa¨ªs (aunque por ahora, pocas) hubiera sido menor, la gente se hubiera mostrado m¨¢s comprensiva con el Gobierno, si no fuera por el hecho de que en muchos casos las autoridades municipales se han enriquecido sin atender en lo m¨¢s m¨ªnimo a las necesidades de la gente. Existen muchos Siyathembas en Sur¨¢frica, lugares en los que los alcaldes y los concejales del CNA se han repartido los puestos de trabajo municipales a base de amistades y relaciones familiares; y en los que, una vez en el poder, recalifican terrenos y otorgan contratos a cambio de jugosas cantidades de dinero que despu¨¦s meten en sus propios bolsillos.
Tal parece ser el caso de Lefty Tsotetsi (lefty significa izquierdista en ingl¨¦s), el alcalde de Siyathemba, cuyo veh¨ªculo blindado fue rodeado de gente armada con palos y tubos de metal cuando se le ocurri¨® la no muy feliz idea de dirigirse a los manifestantes y convencerles de que se fueran a sus casas. Se le present¨® con una lista de quejas y demandas, a las que contest¨® prometiendo que gastar¨ªa dinero p¨²blico en los colegios y en los aseos p¨²blicos. La turba le contest¨® "?cu¨¢ndo? ?cu¨¢ndo?", y despu¨¦s un sector se dirigi¨® a una casa nueva que se estaba construyendo el alcalde y la incendi¨®.
El presidente Zuma ha hecho un llamado a la calma y ha pedido que la gente no se tome la justicia por su mano, pero ha reconocido que existe en el pa¨ªs un problema grave de corrupci¨®n a nivel municipal y como consecuencia los servicios b¨¢sicos en muchos casos no est¨¢n a la altura de las necesidades. El mismo CNA ha reconocido como partido que las exigencias de los manifestantes son leg¨ªtimas.
Un antiguo militante del CNA que fue preso pol¨ªtico en los a?os ochenta coment¨® ayer en una entrevista telef¨®nica que los disturbios de esta semana podr¨ªan tener buenas consecuencias para el pa¨ªs. Servir¨¢n de aviso para el Gobierno de Zuma, dijo, y le presionar¨¢n para llevar a cabo una limpieza general en los municipios. "El hecho de que viene el Mundial nos ayuda tambi¨¦n. La necesidad que percibe el Gobierno de dar una imagen positiva al mundo el a?o que viene contribuir¨¢ a que la direcci¨®n del CNA por fin expulse a estos imb¨¦ciles in¨²tiles del partido".
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