Educaci¨®n reaviva la pol¨¦mica al cerrar un colegio en Cervo
Los padres recurrir¨¢n la decisi¨®n de la conseller¨ªa en los tribunales
Intereses urban¨ªsticos o revanchismo pol¨ªtico. Esos son los ¨²nicos argumentos que encuentran los padres del colegio p¨²blico Rivera Cas¨¢s, ubicado en la localidad de San Cipri¨¢n dentro municipio lucense de Cervo, para que la Conseller¨ªa de Educaci¨®n haya adoptado la decisi¨®n de cerrarlo y escolarizar a sus 68 alumnos en otro centro.
Los padres anuncian batalla y un inicio de curso escolar con pol¨¦mica. De entrada, recurrir¨¢n a la v¨ªa judicial y para el 7 de agosto han programado una jornada reivindicativa en la que se incluye un abrazo humano al centro en el que participar¨¢n abuelos, padres, alumnos y ex alumnos.
El inter¨¦s de la conseller¨ªa y el Ayuntamiento cervense de cerrar el colegio se remonta al a?o 2005, cuando Educaci¨®n ya hab¨ªa decretado la inactividad de este centro. El cambio de gobierno, con la entrada del bipartito en la Xunta y la persistencia de la Asociaci¨®n de Madres y Padres (Ampa), impidieron que se consumara el cierre.
Seg¨²n los padres, la intenci¨®n de la conseller¨ªa de Celso Curr¨¢s (PP) era facilitar el inter¨¦s del Ayuntamiento por desafectar el inmueble para proceder luego a su demolici¨®n y construir una plaza-balc¨®n sobre el mar. De todas formas, el Ampa tambi¨¦n sospecha de la posible existencia de un inter¨¦s urban¨ªstico. Por aquel entonces se estaba levantando un edificio en las inmediaciones del colegio que se ver¨ªa beneficiado, dando la posibilidad de dar m¨¢s alturas a los edificios al desaparecer el criterio de dotaci¨®n que ten¨ªa la infraestructura educativa.
Pese a la decisi¨®n de Educaci¨®n de mantener abierto el Rivera Cas¨¢s, el inicio de curso de ese a?o no estuvo exento de pol¨¦mica, ya que el Ayuntamiento, como propietario del inmueble, hab¨ªa cambiado las cerraduras y fue imposible dar clase en la jornada inaugural. Al d¨ªa siguiente tuvo que acudir un cerrajero, escoltado por la Pol¨ªtica Auton¨®mica, para realizar otro cambio de cerraduras y que las clases pudieran continuar con normalidad. Posteriormente se produjeron dos sentencias del juzgado de lo contencioso-administrativo de Lugo en contra de los criterios exhibidos por la entidad municipal.
Una vez recuperado el gobierno de la Xunta por el Partido Popular, la nueva Conseller¨ªa de Educaci¨®n retom¨® la idea de cerrar el Rivera Cas¨¢s, pese a tratarse de un colegio que en este tiempo duplic¨® su matr¨ªcula, pasando de los 30 alumnos de 2005 a los 68 que tiene en la actualidad.
S¨ª hab¨ªa otras opciones
Aunque hay varios solares que tambi¨¦n se podr¨ªan beneficiar en altura de la desaparici¨®n dotacional, los padres creen, tras el receso en la construcci¨®n, que el cierre obedece ¨²nicamente a un revanchismo pol¨ªtico por lo ocurrido en 2005.
De hecho, el director general de Centros, Jos¨¦ Manuel Pinal, justific¨® la decisi¨®n en la existencia de un informe que, supuestamente, aconsejaba que los ni?os fueran a otro colegio en mejores condiciones, ubicado en las afueras del n¨²cleo de San Cipri¨¢n.
El informe se emiti¨® el 27 de mayo y los padres acudieron a la inspecci¨®n para interesarse por su contenido. Fue all¨ª donde se encontraron con la sorpresa de que ¨²nicamente se valora si las dos comunidades educativas pueden ser acogidas en el centro de Gald¨ªn, pero no se analiza la posibilidad de que pueda suceder lo mismo en el Rivera Cas¨¢s.
"Esto confirma que la decisi¨®n no responde a motivos t¨¦cnicos, puesto que no se tiene en cuenta la comparaci¨®n entre ambos centros", concluy¨® Beatriz V¨¢zquez, una de las portavoces de la Ampa. Pero, adem¨¢s, en el mismo informe elaborado por la Jefatura de Inspecci¨®n se indica que, la fusi¨®n de los centros y la escolarizaci¨®n en el CEIP de Gald¨ªn, "dada su situaci¨®n fuera del n¨²cleo urbano y la peligrosidad de las v¨ªas de acceso", exigir¨ªa el transporte de todo el alumnado, algo que no sucede en la actualidad.
En cuanto al servicio de comedor, el informe tambi¨¦n pone reparos a la posibilidad de fusi¨®n y advierte de que los 93,17 metros cuadrados del comedor de Gald¨ªn ser¨ªan "insuficientes" para dar servicio a todos los alumnos, lo que har¨ªa necesario el establecimiento de turnos para comer.
Informes al margen, la Ampa tambi¨¦n apela a las normativas auton¨®micas, estatales y europeas que defienden que los servicios dotacionales o p¨²blicos est¨¦n cerca de los ciudadanos. Aluden, asimismo, a la propia Constituci¨®n Espa?ola que, advierten, "preserva por encima de todo la integridad de los menores, y no es de recibo que de una forma tan descarada quieran obligar a una comunidad educativa a exponer a sus hijos de forma innecesaria a riesgos importantes".
De todas formas, la Ampa luchar¨¢ "por todos los medios" para evitar el cierre del colegio. De momento ya han solicitado la mediaci¨®n del Valedor do Pobo y una entrevista con el presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez Feijoo, al que quieren explicar que en este asunto se actu¨® "con gran oscurantismo" y recordarle que una de sus promesas electorales fue que no iba a adoptar ninguna decisi¨®n que afectase a una comunidad educativa sin consultarla previamente. "Pues aqu¨ª, de momento, no se nos ha tenido en cuenta para nada", concluy¨® Beatriz.
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