C¨®rdoba recupera el arte barroco de San Agust¨ªn

En un par de meses, los vecinos de San Agust¨ªn recuperar¨¢n el templo que da nombre a este barrio cordob¨¦s. Una iglesia que, durante 35 a?os, ha estado cerrada a pesar de ser una de las joyas del barroco en la ciudad. Tras dos a?os de intensos trabajos de restauraci¨®n, el edificio vuelve a lucir un rostro que ya casi nadie recordaba: un espectacular despliegue de ornamentos barrocos, llenos de artificio y teatralidad, propio del estilo y gusto de la ¨¦poca. Pero San Agust¨ªn es mucho m¨¢s, pues no s¨®lo es un tesoro barroco, si no que esconde una valiosa pieza arquitect¨®nica del g¨®tico inicial del siglo XIV. Por ello, en la restauraci¨®n que ya termina, se han querido resaltar algunos retazos de ese pasado de reconquista.

El templo sufri¨® saqueos y sirvi¨® de cuadra a las tropas napole¨®nicas

Se ha intentado que no destaque la mano de los restauradores y arquitectos

El periplo de San Agust¨ªn ha sido como el de muchas otras iglesias. Objeto de remodelaciones profundas -como la ya citada del barroco, que cambi¨® el esp¨ªritu del edificio-, saqueos (las tropas francesas napole¨®nicas lo usaron de cuadra) y, finalmente, ca¨ªdo en desgracia por el deterioro y el abandono. Como resultado, muchos cordobeses ten¨ªan una memoria sombr¨ªa del inmueble, con sus muros oscurecidos por la suciedad, a?os de descuido y restauraciones muy cuestionables.

En esta ¨²ltima recuperaci¨®n, a diferencia de las anteriores, se ha intentado que la mano de los restauradores y arquitectos no destaque. Su objetivo era recuperar el lujo de la intervenci¨®n barroca del siglo XVII, que convirti¨® en singular al templo. Como si de una nueva fachada tridimensional se tratase, los artesanos de la ¨¦poca recubrieron la piedra original con profusas yeser¨ªas y murales que terminaron reinventando el inmueble medieval. En el resultado final, se respira la influencia de otra obra que era entonces protagonista en C¨®rdoba: la construcci¨®n de la catedral cristiana en el centro de la antigua mezquita aljama musulmana. De ello da prueba el dise?o, decoraci¨®n y factura de la b¨®veda, muy ligada a la catedralicia. Ello ha hecho pensar a expertos como Antonio Paniagua, que fue hecha por las mismas manos. ?l es jefe del Departamento de Conservaci¨®n del Patrimonio de la Delegaci¨®n de Cultura en C¨®rdoba y ha dirigido las obras de recuperaci¨®n y restauraci¨®n de la iglesia. "La b¨®veda de la catedral fue construida por Juan de Ochoa, que hered¨® la obra de la saga de los Hern¨¢n Ruiz. La decoraci¨®n es de Francisco Guti¨¦rrez. Creemos que o bien ¨¦l mismo, o bien sus disc¨ªpulos son los que trabajaron en San Agust¨ªn".

De la decoraci¨®n de la b¨®veda destacan sus yeser¨ªas y murales, que siguen la l¨ªnea que llenan el espacio de reflejos dorados. Las pinturas representan escenas del Credo, y de la Inmaculada -del siglo XVII-, situada en el coro y atribuida a Crist¨®bal Vela. La riqueza patrimonial de los retablos, carpinter¨ªas, pinturas y altares son otras joyas.