"El brazalete de capit¨¢n es mi recompensa a una vida entregada al Espanyol"
Al poco de asumir la capitan¨ªa del Espanyol, Jarque charl¨® con este peri¨®dico en el hotel de concentraci¨®n del equipo en Peralada (Girona). La entrevista que reproducimos se iba a publicar en el especial sobre la Liga de finales de este mes.
Primer d¨ªa de la pretemporada del Espanyol. En Peralada (Girona), sede de la concentraci¨®n del equipo periquito, el t¨¦cnico, Mauricio Pochettino, llega al campo y cita en el c¨ªrculo central a David Garc¨ªa e Iv¨¢n de la Pe?a, el segundo y el tercer capit¨¢n del Espanyol, respectivamente. Instantes despu¨¦s llama a Dani Jarque, un central barcelon¨¦s de 26 a?os forjado en la cantera blanquiazul y que debut¨® en Primera Divisi¨®n en 2002, ante la estupefacci¨®n del vestuario. Ojos como platos. Ra¨²l Tamudo, brazalete y emblema blanquiazul en la ¨²ltima d¨¦cada, quedaba apartado de la capitan¨ªa en una decisi¨®n unilateral del entrenador. "Estoy preparado", replica Jarque. Fraccionada la plantilla en las ¨²ltimas temporadas y en un club agitado por decreto, Jarque asume la responsabilidad justamente el a?o que el Espanyol estrena estadio, recupera su casa. "El brazalete no me puede quedar grande", conviene el defensa, curtido en el club desde ni?o, desde que tiene uso de raz¨®n.
"Ser¨¦ uno m¨¢s, pero algo tengo claro: exigir¨¦ a todos esfuerzo y generosidad"
"El club est¨¢ creciendo. Doce a?os despu¨¦s tenemos un campo, es la bomba"
Pregunta. ?C¨®mo ha sentado su designaci¨®n dentro del vestuario?
Respuesta. Bien, bien. El equipo me ha dado su confianza y yo he aceptado el reto con los ojos cerrados. Es un orgullo, una recompensa a una vida entregada al club, una satisfacci¨®n redonda por estrenar el brazalete en un campo nuevo. Es la bomba.
P. Pero tambi¨¦n son m¨¢s responsabilidades, ?no?
R. Tendr¨¦ que esforzarme en mantener la armon¨ªa del vestuario, dar la cara cuando las cosas vayan mal, escuchar los deseos de la plantilla y luchar por los intereses comunes. Me conciencio para ello. Algo tengo claro: exigir¨¦ a todos mucho trabajo, ayudas al compa?ero y generosidad en el esfuerzo. El tema de la calidad es otra cosa. No se puede valorar. Somos el Espanyol y hay que salir a morder, rascar y demostrar nuestro orgullo.
P. ?Le ha pedido Pochettino que sea un l¨ªder en el campo?
R. No; tengo que ser uno m¨¢s.
P. ?Se conforma con eso?
R. Bueno..., no. Ya no soy ese central que al debutar se ca¨ªa por el contacto rival. Ya no soy un ni?o. He ganado en agresividad, experiencia y contundencia. Pero no destaco por dar patadas. Hay que ser intuitivo y tener poder de anticipaci¨®n. Los delanteros de hoy en d¨ªa son rapid¨ªsimos, endiablados. As¨ª que no puedo perder la concentraci¨®n ni un solo momento.
P. ?Es Pochettino un t¨¦cnico que complica a los defensas porque les obliga a adelantar la l¨ªnea?
R. Un poco s¨ª. Pero as¨ª es m¨¢s divertido. Nos pide que la presi¨®n sea arriba, que las l¨ªneas est¨¦n juntas y que no hagamos la trampa del fuera de juego. Es demasiado dif¨ªcil para el poco beneficio que reporta. Y, con el bal¨®n controlado, tambi¨¦n nos reclama que tengamos buen pie, que lo saquemos con criterio y que ganemos l¨ªneas con los pases.
P. Un c¨®rner a favor debe ser el mayor de los respiros...
R. M¨¢s o menos. ?sa es una sensaci¨®n casi indispensable para un defensa porque se despreocupa por un momento de lo que tiene detr¨¢s. Es la nota diferente de los partidos.
P. ?Y los fichajes, la nota diferente del equipo?
R. Desde luego. Nakamura nos ofrece calidad; Ben Sahar, potencia; Verd¨², juego en campo contrario, y Pillud, energ¨ªa y trabajo. Hemos dado un paso m¨¢s. Y debemos aprender de lo sucedido en el curso anterior, cuando est¨¢bamos rotos y casi descendidos. Quiz¨¢ es la ventaja de este Espanyol, que es un equipo joven con muchas cicatrices y con lecciones aprendidas, como que no podemos bajar los brazos y que, con las pilas puestas, podemos ganar a cualquiera. Ya basta de altibajos. Es il¨®gico y nos hace mediocres. Y no lo somos.
P. ?As¨ª lo indica el nuevo estadio?
R. S¨ª. Debe ser una olla a presi¨®n para animarnos y presionar a los rivales y los ¨¢rbitros. Es magn¨ªfico tener casa, doce a?os despu¨¦s. El Espanyol est¨¢ cambiando. Tiene patrimonio, con el campo y la ciudad deportiva, y se piensa mucho en la cantera, que funciona de perlas. El club est¨¢ creciendo.
P. El presidente, Daniel S¨¢nchez Llibre, se ha hecho con la mayor¨ªa de las acciones del club. ?Qu¨¦ le parece?
R. Que eso me queda lejos. Nosotros, al campo.
P. ?Cara o cruz?
R. Siempre cara.
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