EL MALDITO DEL C?RCULO POLAR
Entre fiordos noruegos y en busca del Nobel Knut Hamsun. Padre de la novela moderna y defensor del nazismo, el pa¨ªs celebra su pol¨¦mico legado en el 150? aniversario de su nacimiento
El sol no se pone nunca del todo en la cubierta del Gamle Salten. De madrugada, el atardecer parece a¨²n interminable. Sin perderse en el horizonte hasta bien entrada la noche, el sol rodea lentamente el barco, lleno estos d¨ªas de expertos y lectores de Knut Hamsun (1859-1952), premio Nobel de Literatura en 1920 y arrumbado en los estantes de la historia por su simpat¨ªa con el r¨¦gimen nazi durante la invasi¨®n de Noruega por el Ej¨¦rcito alem¨¢n. El Gamle Salten hace el trayecto entre Bodo y Prestid, 1.500 kil¨®metros al norte de Oslo, dentro ya del C¨ªrculo Polar ?rtico. All¨ª espera Steven Holl, vestido con un traje de color vainilla y tocado con un sombrero panam¨¢. "?sta es la obra de la que me siento m¨¢s orgulloso. Mi abuelo era noruego y es como una vuelta al origen", dice el arquitecto estadounidense al pie del edificio que ha construido para el Centro Hamsun.
El arquitecto Steven Holl ha construido un museo dedicado al escritor
La presencia de esta torre de madera de cinco plantas en un paraje verde rodeado de monta?as cortadas a cuchillo explica la controversia que ha acompa?ado el proyecto. Holl, famoso en Europa por el museo Quiasma de Helsinki, dice que ¨¦ste no es m¨¢s que otro cap¨ªtulo que a?adir a la pol¨¦mica que ha rodeado siempre la figura de Hamsun, cuyo 150? aniversario se conmemor¨® el martes pasado. A la torre le faltan cuatro grados para ser perpendicular y su autor la define como "un cuerpo aparentemente inestable", como el novelista que le da nombre.
Noruega llevaba d¨¦cadas sin saber qu¨¦ hacer con Hamsun. No s¨®lo es su escritor m¨¢s famoso despu¨¦s de Ibsen sino que para muchos -de Kafka a Thomas Mann pasando por Henry Miller o Bukowski- tambi¨¦n es el padre de la novela moderna. Esa paternidad tiene fecha: 1890, el a?o en que public¨® Hambre, el a veces angustiado y a veces altivo mon¨®logo interior de un hombre que malvive en las calles de una ciudad que no tiene misericordia. Ni con ¨¦l ni con nadie. La cruda modernidad con punto y comas. Claudio Magris y Paul Auster han sido los ap¨®stoles m¨¢s recientes del escritor.
Al final de su vida, sentado ya en la cima de la fama, Hamsun celebr¨® la "fuerza" del esp¨ªritu de la Alemania nazi, que invadi¨® Noruega durante cinco a?os. El 7 de mayo de 1945, tiempo despu¨¦s de ofrecer su Nobel a Joseph Goebbels y cuando todos los colaboracionistas se dispon¨ªan a enjuagar su pasado ante la inminencia de la victoria aliada, ¨¦l escribi¨® en el Aftenpostens, el peri¨®dico m¨¢s importante del momento, un encendido elogio f¨²nebre de Hitler, al que hab¨ªa llegado a conocer. "Guerrero de la Humanidad", lo llamaba. El pa¨ªs que lo hab¨ªa llevado a los altares meti¨® a Hamsun en un hospital psiqui¨¢trico y le impuso una multa que lo dej¨® en la ruina. Su muerte siete a?os m¨¢s tarde fue recibida con un inc¨®modo silencio y durante d¨¦cadas fue, a la vez, un escritor popular y maldito. Nunca dejaron de leerse sus libros, pero pocos reconoc¨ªan haberlos le¨ªdo. En Espa?a, donde tuvo su momento de gloria en los treinta, su obra forma parte del cat¨¢logo de varios sellos. En oto?o, N¨®rdica seguir¨¢ ese camino con m¨¢s novelas y una biograf¨ªa.
Entretanto, Noruega ha empezado a saldar sus cuentas con el Hamsun escritor sin negar las miserias del hombre. Ante los temores de algunos familiares de supervivientes y de varias asociaciones jud¨ªas de que las conmemoraciones de este a?o se tradujeran en comprensi¨®n hacia la postura del novelista durante la II Guerra Mundial, el Gobierno noruego sali¨® al paso con un comunicado en el que subrayaba que se trataba de celebrar los "logros literarios" de Hamsun al tiempo que recordaba que sus "simpat¨ªas nazis" ocupaban un lugar destacado en la gran exposici¨®n que se le dedic¨® en Oslo a principios de a?o.
Al pintor Karl Erik Harr, que ha consagrado su vida a ilustrar la obra del narrador y que impuls¨® en 1982 las Jornadas Hamsun que se celebran cada a?o la primera semana de agosto, no le gusta el nuevo edificio de Prestid -"alguien tiene que decirlo"-, pero cree que la rehabilitaci¨®n definitiva del "cronista de las tierras del norte" es un acto de justicia. "?Nazi? Hoy en Noruega no hay riesgo de que surjan movimientos neonazis. La influencia de Hamsun ha sido literaria, no ideol¨®gica".
Un autor de culto
- Thomas Mann: "El esplendor global que el Premio Nobel dio a su nombre me llen¨® de aut¨¦ntica satisfacci¨®n".
- Camilo Jos¨¦ Cela: "Knut Hamsun ten¨ªa un esp¨ªritu inquieto lastrando un cuerpo inquieto y errabundo y su ¨²nica preocupaci¨®n fue la literatura como meta y devor¨¢ndose a s¨ª misma (...), aunque [estaba] guiado en todo momento por un ¨²nico norte -la cultura, o quiz¨¢ mejor, la literatura- y una ¨²nica meta, la de ser escritor y tan s¨®lo eso".
- Paul Auster: "En Hambre se plantea un pensamiento nuevo sobre la naturaleza del arte".
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