Un hombre preso por error cinco d¨ªas reclama 300.000 euros
La juez no ve delito en la actuaci¨®n de la polic¨ªa, que confundi¨® a dos personas
Juan Enrique Tena Mart¨ªn pas¨® cinco d¨ªas en prisi¨®n debido a un error en la grabaci¨®n de los datos por parte de la Guardia Civil, que le atribuy¨® el delito de Israel Tena Mart¨ª, un condenado por blanqueo que ya se encontraba cumpliendo condena y con el que compart¨ªa un apellido. Fue en Granada, la pasada Semana Santa. Tras varios meses de investigaci¨®n, Aurora Fern¨¢ndez, la juez que le envi¨® a prisi¨®n y que posteriormente abri¨® diligencias por detenci¨®n ilegal y falsificaci¨®n, est¨¢ a punto de dar carpetazo al asunto, al no encontrar indicios de delito en la actuaci¨®n policial.
La abogada de Juan Enrique Tena, Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez, ha reclamado explicaciones en todas las instancias judiciales, pol¨ªticas y de la Administraci¨®n para intentar esclarecer lo sucedido. Sin ning¨²n ¨¦xito. Ahora se prepara para iniciar la reclamaci¨®n de los da?os morales sufridos por su cliente, que ha estado de baja por depresi¨®n hasta hace s¨®lo unas semanas. La letrada reclamar¨¢ a los Ministerios del Interior y de Justicia un m¨ªnimo de 300.000 euros, aunque la cifra podr¨ªa rondar los 400.000.
Adem¨¢s, L¨®pez pretende ponerse en contacto con los grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados para que reclamen informaci¨®n sobre el funcionamiento de la base de datos de requisitorias y soliciten, en su caso, la modificaci¨®n del procedimiento, ya que no entiende por qu¨¦ el nombre de su defendido estaba en ese fichero.
Juan Enrique Tena viaj¨® en Semana Santa a Granada para vivir las procesiones y acab¨® protagonizando una aut¨¦ntica pesadilla, cuando a las seis de la madrugada del jueves santo dos agentes llamaron a su puerta, le dijeron que se vistiera, le preguntaron si ten¨ªa algo pendiente con la justicia y se lo llevaron esposado. Pas¨® cinco d¨ªas entre rejas en la c¨¢rcel de Albolote, por la coincidencia de su arresto con los d¨ªas festivos. En prisi¨®n, seg¨²n contar¨ªa m¨¢s tarde, vivi¨® un "aut¨¦ntico calvario". "Ten¨ªa tanto miedo que no me atrev¨ªa a mirar a los presos a la cara", se?al¨® tras su puesta en libertad.
Cuando a¨²n estaba entre rejas proclam¨® su inocencia y solicit¨®, aconsejado por otros reclusos, el habeas corpus (obligaci¨®n de presentar ante el juez a todo detenido en el plazo de 24 horas, de modo que el juez puede ordenar la libertad inmediata del detenido si no encuentra motivo suficiente de arresto), que le fue denegado por el juez decano de Granada, Antonio Moreno.
?Delincuentes e inocentes en el mismo fichero?
Tras la puesta en libertad de Juan Enrique Tena, el Ministerio del Interior puso en marcha una investigaci¨®n para averiguar qu¨¦ hab¨ªa llevado al error que acab¨® con un inocente encarcelado. Seg¨²n fuentes de la Guardia Civil, a ra¨ªz de este caso -originado, indican, "por un error humano"- se han reforzado los controles de las bases de datos de requisitorias (b¨²squeda y captura). El trabajo realizado por los agentes es ahora supervisado por una persona que comprueba que los datos introducidos son correctos. Estos controles ser¨¢n especialmente ¨²tiles cuando se den duplicidades, casos de personas en los que coincidan los dos apellidos.
La secuencia de hechos fue la siguiente: el 5 de febrero, el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa graba una orden de b¨²squeda y captura contra el condenado Israel Tena Mart¨ª, que es dada de baja el 24 de ese mes tras el ingreso del acusado en la c¨¢rcel. Un d¨ªa antes, el 23, la Guardia Civil da de alta la requisitoria de Juan Enrique Tena, que es encarcelado el jueves santo, 9 de abril. Quedan en el aire tres interrogantes: por qu¨¦ se emite la requisitoria dos veces con distintos nombres, por qu¨¦ cuando el aut¨¦ntico delincuente es capturado s¨®lo se borra una de ellas; y por qu¨¦ el nombre de Juan Enrique estaba en esos ficheros.
En su declaraci¨®n ante la juez de Granada, uno de los agentes que trabaja en la Central de Requisitorias se?al¨® un dato inquietante: que el sistema "se nutre con una fuente de datos de personas que nunca han tenido antecedentes con la justicia, o bien de car¨¢cter policial"; un sistema "en el que conviven en una base de datos personas con problemas, bien policiales, bien judiciales, con ciudadanos an¨®nimos". Fuentes del instituto armado lo niegan e insisten en que hay bases de datos diferenciadas. "Si una persona no tiene nada pendiente no deber¨ªa aparecer. Si est¨¢ es porque ha tenido algo". Juan Enrique Tena no ten¨ªa antecedente alguno. Su abogada se?ala: "Parece que todos estamos en el bombo".
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