La gripe impulsa el trabajo en casa... temporalmente

Para curarse y recuperarse, para atender a un enfermo o como refugio. El hogar puede convertirse a partir de oto?o en el lugar de trabajo de miles de espa?oles. Es entonces, con la llegada del fr¨ªo, cuando se prev¨¦ que el virus H1N1 se propague con mayor rapidez. Las Administraciones han puesto sobre alerta a las empresas para que elaboren protocolos de actuaci¨®n para evitar que las ausencias en el trabajo, que pueden alcanzar hasta el 40% de las plantillas si la pandemia es larga, pongan en peligro su producci¨®n.

El trabajo a distancia, desde casa, es una de las opciones que ha planteado el Ministerio de Sanidad para asegurar la recuperaci¨®n, evitar los contagios y facilitar que se atienda a familiares enfermos. ?Dar¨¢ la nueva gripe un vuelco a la cultura del presencialismo, tan arraigada en Espa?a? "La enfermedad es una mala noticia, pero bienvenida sea si sirve para potenciar el teletrabajo", afirma el vicepresidente de la patronal madrile?a y miembro del comit¨¦ ejecutivo de la CEOE, Juan Pablo L¨¢zaro.

S¨®lo el 8% de los trabajadores desempe?a su tarea desde el domicilio

Adem¨¢s de por enfermedad, muchos empleados deber¨¢n atender a familiares

No ser¨¢ tan f¨¢cil que cuaje. Ahora s¨®lo el 8% de los empleados espa?oles trabajan desde casa, frente al 25% de algunos pa¨ªses n¨®rdicos. Y es cierto que en un a?o las empresas que contrataron a gente para que desempe?ara sus tareas desde su domicilio creci¨® un 20%, pero de momento s¨®lo lo hacen el 14,7% de las compa?¨ªas espa?olas, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE).

Pero adem¨¢s, el teletrabajo topa con el rechazo de los sindicatos mayoritarios, que dudan de que se puedan controlar los riesgos laborales en un domicilio particular. "Esta medida va a ser puntual, limitada en el tiempo", afirman fuentes sindicales. No son los ¨²nicos que mantienen sus reservas. Los empresarios opinan que esta modalidad de trabajo seguir¨¢ creciendo, pero progresivamente, puesto que todav¨ªa no est¨¢ muy extendida en Espa?a. Y, al igual que varios expertos, le ven algunos flecos. El principal, el del control de la salud y seguridad laborales.

Para empezar, en Espa?a no hay una normativa laboral espec¨ªfica sobre teletrabajo. Esta f¨®rmula se rige s¨®lo por un acuerdo marco de 2002 de la Uni¨®n Europea, que define qu¨¦ es el teletrabajo, establece su car¨¢cter voluntario y la protecci¨®n de datos y marca algunos derechos colectivos.

El socio abogado de Sagardoy, Manel Hern¨¢ndez, explica que una de las complicaciones que se debe resolver es la de la seguridad laboral. "Un inspector s¨®lo puede ir a un centro de trabajo, nunca a un domicilio particular. El problema es c¨®mo se ejerce el control de las condiciones laborales", asegura. Y es que en Espa?a, agrega Hern¨¢ndez, de momento s¨®lo hay alguna resoluci¨®n judicial que se refiere al trabajo desde casa y que fija su car¨¢cter voluntario y alg¨²n convenio que lo recoge de forma somera.

El Ministerio de Sanidad present¨® el mes pasado una gu¨ªa para que las empresas y los centros de trabajo puedan poner en marcha protocolos de actuaci¨®n ante la pandemia de gripe. El primer borrador del documento, finalmente, consensuado con empresarios y sindicatos, inclu¨ªa el concepto teletrabajo. Sin embargo, salt¨® del texto ante la oposici¨®n de los sindicatos mayoritarios junto al t¨¦rmino absentismo, que los representantes de los trabajadores consideran que s¨®lo debe usarse cuando la falta al lugar de trabajo no est¨¦ justificada.

La secretaria de Pol¨ªtica Social de UGT, Carmen L¨®pez, explica que el teletrabajo no est¨¢ contemplado por la normativa laboral espa?ola. "Una cosa es que en caso pandemia se deba aislar a un trabajador y, si se puede, se le d¨¦ acceso telem¨¢tico para que desempe?e su actividad, y otra es el teletrabajo, que no est¨¢ contemplado por la ley", sostiene.

El sindicato CC OO tambi¨¦n rehus¨® que el documento de Sanidad incluyera este t¨¦rmino. La organizaci¨®n argumenta que el trabajo desde casa puede desbarajustar la prevenci¨®n de riesgos laborales. "En caso de accidente de trabajo no es tan f¨¢cil demostrar que es un siniestro laboral. Pero es m¨¢s, ?c¨®mo se eval¨²an los riesgos del hogar?", se pregunta Jaime Gonz¨¢lez, de la Secretar¨ªa Confederal de Salud Laboral de CC OO.

Fuentes sindicales agregan que el teletrabajo plantea otros problemas, como el de la negociaci¨®n colectiva. Los sindicatos sostienen que el empleo en casa individualiza las relaciones laborales e impide el contacto con otros colegas de la empresa. "No es f¨¢cil la movilizaci¨®n cuando los trabajadores est¨¢n dispersos, pero hay f¨®rmulas, como la intranet de la empresa o las reuniones", propone Jos¨¦ Ram¨®n Pin, profesor del IESE.

Aun as¨ª, dentro de los sindicatos, el debate no es ni blanco ni negro. Gonz¨¢lez admite que movimientos ecologistas est¨¢n reclamando fomentar el teletrabajo porque entienden que reduce desplazamientos y, por lo tanto, tambi¨¦n la contaminaci¨®n en las ciudades. De hecho, CC OO de Catalu?a ha elaborado una gu¨ªa de actuaci¨®n para la gripe A en la que sugiere que las empresas "identifiquen tareas que se puedan gestionar desde el domicilio", es decir, que realicen una "promoci¨®n del teletrabajo".

De cualquier modo, la gu¨ªa de Sanidad, como la que ha editado la Generalitat de Catalu?a, incluye el trabajo a distancia como medida para organizar las tareas frente a la pandemia, en coordinaci¨®n con los ¨®rganos de representaci¨®n de los trabajadores y siempre que sea posible. No es lo mismo un puesto de administrativo, que puede desempe?arse en el hogar, que ser parte de una cadena de montaje en una f¨¢brica, por ejemplo.

Las patronales ven con buenos ojos la propuesta del teletrabajo, incluso con independencia de la nueva gripe. "Es sin¨®nimo de progreso. Hay empleos, como el de los call centers, de sistemas inform¨¢ticos, comerciales o de administraci¨®n que podr¨ªan acogerse a este modo de trabajo. No s¨®lo es una forma de evitar atascos y poluci¨®n en las ciudades, sino que es una herramienta para mejorar el bienestar de la gente", asegura Juan Pablo L¨¢zaro, de la CEOE.

Pero, ?est¨¢n preparadas las empresas para el teletrabajo? Es m¨¢s, ?est¨¢n a punto para asumir que podr¨ªan prescindir de la mitad de su plantilla? Seg¨²n una encuesta de la consultor¨ªa de riesgos y seguros Marsh, el 73% de las sociedades est¨¢n "poco o nada" armadas para hacer frente a una pandemia como la de la nueva gripe. S¨ª lo est¨¢n las grandes corporaciones, pero no la mayor¨ªa de las peque?as y medianas empresas. Y ¨¦stas todav¨ªa est¨¢n menos dispuestas para el teletrabajo, puesto que no disponen de las herramientas necesarias.

Seg¨²n el informe La Sociedad de la Informaci¨®n en Espa?a 2008, elaborado por Telef¨®nica, s¨®lo el 3,7% de las microempresas y el 11,1% de las compa?¨ªas de 10 a 48 trabajadores disponen de acceso remoto, es decir, el sistema a trav¨¦s del cual un ordenador puede acceder a la red de la misma forma que otro que est¨¦ en el centro de trabajo.

El secretario general de la patronal Cecot, David Garrof¨¦, explica que las pymes dif¨ªcilmente se adaptar¨¢n a una reducci¨®n de plantilla del 40%. "No es culpa de nadie, una pandemia es imprevisible. Pero debemos ver c¨®mo evoluciona y su gravedad", sostiene. Garrof¨¦ s¨ª es partidario del teletrabajo, y opina que las pymes todav¨ªa no han aprovechado todo el potencial de las nuevas tecnolog¨ªas. "Hay puestos de trabajo que podr¨ªan hacerse desde casa. Y es innegable que se mejora la gesti¨®n de algunas tareas", afirma.

Adem¨¢s del uso de nuevas tecnolog¨ªas, el teletrabajo tambi¨¦n exige un mando que se adapte a este cambio organizativo. Por ello la mayor¨ªa de manuales para esquivar el impacto de una pandemia recomiendan elegir un equipo que gestione la crisis. "Internet permite realizar las tareas habituales sin que haya un contacto f¨ªsico ni visual. Y eso exige un nuevo estilo. La direcci¨®n debe guiarse por objetivos, y no por tareas, y muchos jefes no saben plantear esas metas", asegura Jos¨¦ Ram¨®n Pin.

Si bien las pymes todav¨ªa est¨¢n rezagadas, las grandes corporaciones s¨ª tienen sus protocolos y sus planes de continuidad, que son los que garantizan la viabilidad del negocio pese a una merma de la mano de obra. Fuentes empresariales sostienen que las primeras en hacerlo han sido las farmac¨¦uticas, puesto que se debe garantizar el suministro a los hospitales y centros de salud. Tambi¨¦n el sector de la alimentaci¨®n tiene protocolos, como Leche Pascual. Y, en general, todas las multinacionales tienen su plan de continuidad. Es el caso de Telef¨®nica y Banco Santander. Y ambas compa?¨ªas afrontan ya la prueba del invierno latinoamericano.

Una portavoz de Banco Santander explica, por ejemplo, que la entidad cuenta con un protocolo interno de actuaci¨®n que contempla los puestos clave de la organizaci¨®n que siempre deben ser cubiertos. El plan tambi¨¦n prev¨¦ m¨¢s videoconferencias y que algunas tareas se puedan realizar desde casa, lo cual ya se permiti¨® en la filial mexicana de la firma. Tambi¨¦n Telef¨®nica ha puesto a prueba su protocolo en sus filiales latinoamericanas, y tambi¨¦n ha echado mano del trabajo a distancia.

Fuentes empresariales aseguran que muchas sociedades esperan a la vuelta de vacaciones para comunicar sus protocolos a los trabajadores o para seguir con mayor atenci¨®n los sucesos. Pero Juan Pablo L¨¢zaro ya ha dise?ado el plan para su compa?¨ªa de log¨ªstica. "Hemos definido los grupos de trabajadores que corren m¨¢s riesgo porque sufren enfermedades cr¨®nicas, como asma. A ellos se presta especial atenci¨®n. Pero tambi¨¦n hemos duplicado el servicio de limpieza y hemos pedido que se desinfecten bien barandillas, picaportes, auriculares del tel¨¦fono o teclados", explica L¨¢zaro.

La empresa tambi¨¦n aconseja a sus trabajadores algunas medidas de higiene y, adem¨¢s, ha previsto aumentar el n¨²mero de personas que trabajen desde casa. De hecho, todos los modelos de plan de continuidad aconsejan a la empresa que adopte medidas de flexibilidad para combatir varios frentes. Primero, el de posibles aislamientos para tener al empleado en observaci¨®n, aun cuando ¨¦ste se encuentre bien; o cuarentenas, cuando alg¨²n trabajador haya contra¨ªdo una gripe grave. Quedan excluidos, claro est¨¢, quienes est¨¦n padeciendo la enfermedad, que estar¨¢n de baja.

Pero, adem¨¢s, podr¨ªa darse la circunstancia de que tuviera que cerrarse alg¨²n colegio -como est¨¢n dispuestos a hacer algunos Gobiernos europeos-, por lo que el teletrabajo permitir¨ªa a muchos padres atender a sus hijos sin dejar sus tareas. Puede haber muchas complicaciones m¨¢s, pero las gu¨ªas tambi¨¦n contemplan que algunos empleados se dejen llevar por el p¨¢nico al contagio, lo cual tambi¨¦n deber¨¢ ser contemplado por la empresa.

Ahora, no obstante, los agentes sociales est¨¢n m¨¢s preocupados por la redacci¨®n de una segunda gu¨ªa para las empresas p¨²blicas y privadas de servicios asistenciales. Por ejemplo, para m¨¦dicos, enfermeras y cuerpos de seguridad. Sin resolver bien la prevenci¨®n de este primer eslab¨®n, opinan empresas y sindicatos, cualquier protocolo puede caer como un castillo de naipes.