Ma?ana, d¨ªa clave
Si las buenas previsiones meteorol¨®gicas se cumplen, los rescatadores esperan llegar el domingo hasta ?scar P¨¦rez - El coste de la operaci¨®n se sit¨²a en 120.000 euros
Los esfuerzos del Ej¨¦rcito paquistan¨ª son generosos. Pero las facturas de sus movimientos se amontonan ya en la sede de la Embajada espa?ola en Islamabad, exigida por el Gobierno de Pakist¨¢n para que avale las operaciones de rescate de ?scar P¨¦rez. S¨®lo el vuelo del helic¨®ptero MI-17 cost¨® 25.000 d¨®lares (17.570 euros), cifra que aumenta con cada intervenci¨®n militar y que Pe?a Guara, el club del alpinista, cree que se disparar¨¢ hasta los 120.000 euros. Lorenzo Ortas, coordinador del rescate en las oficinas de Pe?a Guara se asusta al ver los n¨²meros, pero, a su lado, el presidente del club, Manolo Bara, ni se inmuta: "Yo no soy un gran monta?ero como Lorenzo, pero llevo a?os trabajando en la banca y creo que puedo aportar mi grano de arena para garantizar que se asumir¨¢ el coste del operativo de rescate", explica, muy sereno.
Pe?a Guara asume que es su responsabilidad garantizar el rescate de P¨¦rez, cuyo viaje no habr¨ªa sido posible sin el patrocinio de un club que cuenta con 4.500 socios. Mientras Ortas y muchos otros se afanan en coordinar la parte t¨¦cnica del rescate, Bara pone a pruebas sus conocimientos y contactos para garantizar que se puedan afrontar todos los gastos. Sin embargo, el presupuesto del club tiene un techo, m¨¢s all¨¢ del cual ser¨¢ preciso buscar financiaci¨®n. De momento, Bara cuenta con 18.000 euros garantizados por la compa?¨ªa de seguros (para evacuaciones en helic¨®ptero) que cubre la expedici¨®n de ?scar y ?lvaro Novell¨®n y la cobertura m¨¦dica de su rescate (incluido un avi¨®n medicalizado). Adem¨¢s, Bara tiene el compromiso del Gobierno de Arag¨®n de que cubrir¨¢ aquello a lo que el club no llegue, y una l¨ªnea de cr¨¦dito abierta en un banco. Varios estamentos privados y patrocinadores del club se han ofrecido para financiar parte de la operaci¨®n. Pe?a Guara se concentra en salvar la vida de ?scar sin reparar en los gastos.
El herido sabe, desde el momento en el que sufri¨® el accidente, que su rescate ser¨ªa largo y complejo. As¨ª se lo record¨® Novell¨®n antes de despedirse de ¨¦l y lanzarse monta?a abajo para pedir ayuda. Por eso sobre la zona vuela un helic¨®ptero una vez al d¨ªa: para recordarle con su estruendo que debe seguir luchando y, como ayer, para tomar fotograf¨ªas a¨¦reas, estudiarlas y ver la posici¨®n exacta en la que se encuentra.
El optimismo ha crecido mucho en las ¨²ltimas horas: ma?na, domingo, podr¨ªa ser una jornada clave en el mejor de los casos previstos. Ese d¨ªa los rescatadores podr¨ªan alcanzar la posici¨®n de ?scar. Adem¨¢s, el buen tiempo parece milagrosamente garantizado hasta el 18 de agosto. De momento, Jordi Corominas, Jonatan Larra?aga y Fabrizio Zangrilli se afanan en superar el desnivel entre el campo base, a 4.500 metros de altura, y el collado que da acceso a la arista noroeste, a 5.800, equipando de paso la ruta con cuerdas fijas.
Una veintena de personas, entre alpinistas y porteadores, trabajan a turnos en la monta?a, perfectamente coordinados y avanzando al m¨¢ximo de sus capacidades. Todos esperan que ?scar tire de la esperanza para observar de forma met¨®dica las reglas de la altura: protegerse, hidratarse de forma obsesiva, no abandonarse, resistir.
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