Bolt se divierte, Gay acelera
El jamaicano le regala la victoria a su compa?ero Bailey en la serie mientras que Gay y Powell se dedican a correr en serio
Usain Bolt no gan¨® una carrera de 100 metros. Gran noticia ser¨ªa si no fuera porque se comport¨® m¨¢s como un chiquillo bromista y feliz que como el mejor atleta del mundo, el s¨ªmbolo universal de la velocidad. Pese a ser el hombre m¨¢s veloz de un planeta, a¨²n no ha corrido 100 metros a todo vapor, a pleno rendimiento. Ayer tampoco lo hizo. "Sus l¨ªmites nadie los conoce, ni ¨¦l mismo", dice Mo Greene, uno de los grandes de la historia. "No sabemos d¨®nde llegar¨¢ cuando d¨¦ la ¨²ltima zancada con la misma energ¨ªa que la primera". Tampoco, quiz¨¢s, Bolt lo sepa. Tampoco le importar¨¢ mucho. O eso parece. Prefiere jugar, divertirse.
Sucedi¨® lo inesperado, su derrota, mediada la serie de cuartos de final. La quinta y ¨²ltima. En la dura y, a la vez flexible, recta azul del Ol¨ªmpico de Berl¨ªn ya hab¨ªan exhibido sus poderes los pretendientes a lo largo del atardecer. Hab¨ªa pasado Asafa Powell, el malquerido por su federaci¨®n, que se hab¨ªa llevado tal susto en la serie matinal -se relaj¨® tanto, subestimando a sus rivales, mediada la recta que a punto estuvo de quedar eliminado: lleg¨® el tercero por los pelos - que prefiri¨® no arriesgar: sali¨® como una bala, como suele, progres¨® como un cohete y no par¨® hasta la ¨²ltima zancada, con la que par¨® el cron¨®metro en 9,95s (viento contrario de 0,4 m/s). Hab¨ªa pasado Tyson Gay, el rey del Mundial de Osaka destronado en los Juegos de Pek¨ªn, quien, con su ingle doliente a cuestas y viento pr¨¢cticamente nulo quiso impresionar al respetable con una gran tanda de recuperaci¨®n final, su especialidad, tras una salida mediocre: 9,98s. Bajar de los 10s parec¨ªa tal juego que hasta el proscrito Dwain Chambers, el ingl¨¦s que regres¨® con rabia tras dos a?os de sanci¨®n por dopaje, se acerc¨® a la l¨ªnea: 10,02s entre los abucheos del p¨²blico alem¨¢n, que, la historia le alimenta -el dopaje de Estado de la RDA, el dopaje comercial de la RFA...-, se muestra intolerante ante quienes han pecado y vuelven.
"Los l¨ªmites de Bolt no los conoce nadie, ni ¨¦l mismo" dice Mo Greene
La ¨²nica posibilidad de Gay estar¨ªa en no correr al lado del jamaicano
Faltaba s¨®lo, pues, Bolt, el gran Bolt, el show de Bolt.
Y el show lleg¨®, pero no en los momentos de la presentaci¨®n, como suele ser habitual, en los que Bolt se suele soltar el pelo con bailes y mascaradas, sino en la mism¨ªsima carrera. Corr¨ªa a su lado su compa?ero de entrenamientos con Glen Mills y club, el Racers Tracks Club de Kingston, y amigo Daniel Bailey, un gran talento de la isla de Antigua, y llegado el metro 50 Bolt se volvi¨® hacia ¨¦l despu¨¦s de mirar a su espalda y ver que los dem¨¢s estaban lejos, le habl¨®, le anim¨® sonriente, casi a carcajadas, le invit¨® a ganarle. Bailey acept¨® encantado y, con gusto, y una gran sonrisa en los labios, procedi¨® a adelantarle (10,02s por 10,03s del recordman jamaicano). Terminaron los dos ri¨¦ndose, como dos amigos que van cont¨¢ndose un chiste por la calle. Un gesto, el de Bolt con Bailey, que impresion¨® m¨¢s a la feliz concurrencia que todas las zancadas aceleradas, que todos los pisotones, pistones y cilindros humeantes de sus rivales.
"Estaba feliz por como hab¨ªa salido as¨ª que no necesitaba trabajar m¨¢s", dijo Bolt. "Estoy ahorrando y me estoy divirtiendo. Estoy feliz conmigo mismo y me port¨¦ bien".
As¨ª se presentan, pues, los protagonistas la v¨ªspera del gran duelo, de la carrera que justifica todos los Mundiales.
Si en las semifinales ninguno patina, en la final (21.35h de hoy) se producir¨¢ el primer enfrentamiento directo de Bolt y Gay desde hace m¨¢s de un a?o, desde un d¨ªa de junio lluvioso en Nueva York en el que Bolt bati¨® el r¨¦cord del mundo por primera vez ante las narices del estremecido Gay. Y las secuelas de aquel hecho perduran en la memoria de ambos talentos, que se presentan a la cita del Mundial con los papeles cambiados. Cuando lo normal ser¨ªa que toda la presi¨®n recayera sobre quien llega como rey y debe defender su bien, sucede al contrario: la cara relajada y cool, tan cool con sus pumas naranjas, de Bolt contrasta con la seriedad casi asc¨¦tica de Gay, subrayada por una barba cerrada, casi de monje.
Aunque el norteamericano llega con mejor marca, los sabios dicen que su ¨²nica posibilidad de victoria radica en no correr la final en una calle vecina a la de Bolt, para evitar ser avasallado f¨ªsica y mentalmente por su tremenda zancada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.