Un hito en la medicina espa?ola

Desde los primeros trasplantes mundiales de ri?¨®n, coraz¨®n o h¨ªgado hasta su irrupci¨®n en Espa?a tuvieron que pasar d¨¦cadas antes de que los enfermos espa?oles se beneficiaran de unas t¨¦cnicas que ya hab¨ªan llegado a medio mundo. En el caso del trasplante de cara, poco m¨¢s de tres a?os han bastado para que Espa?a se incorpore al selecto club de pa¨ªses (Francia, EE UU y China) capaces de desarrollar esta t¨¦cnica. Evidentemente, algo ha cambiado.

Y con ser encomiable la gesta del doctor Pedro Cavadas y todo el equipo del hospital La Fe, y digna de los m¨¢ximos reconocimientos, lo es a¨²n m¨¢s que al igual que sucedi¨® con los tres trasplantes de antebrazos realizados por el mismo grupo, la donaci¨®n se haya producido en un tiempo r¨¦cord: menos de dos meses desde que se dio la autorizaci¨®n desde la ONT y menos de tres desde que se realiz¨® la solicitud. Nada que ver con la experiencia francesa o norteamericana, donde el proceso se alarg¨® mucho m¨¢s. Sin duda la red de coordinaci¨®n de trasplantes funciona, y muy bien.

Pero adem¨¢s, no se trata ni mucho menos de un hecho aislado, de un oasis en el desierto: al menos otros dos hospitales en Sevilla y Barcelona est¨¢n con todo dispuesto para que tras este octavo trasplante de cara del mundo, tambi¨¦n el noveno y el d¨¦cimo se realicen en Espa?a. No es una genialidad aislada sino el resultado del trabajo de mucha gente con un gran sistema sanitario detr¨¢s.

Las reflexiones que deja este trasplante alog¨¦nico de tejidos compuestos faciales (que es la forma m¨¦dicamente correcta de llamarlo) son muchas. Desde luego mi m¨¢s sincera felicitaci¨®n personal e institucional a todos los que lo han hecho posible, y el agradecimiento a la familia del donante por su gesto de solidaridad. Es imposible dar m¨¢s.

Pero al mismo tiempo hay que recordar lo obvio: no estamos en una carrera para ver qui¨¦n llega primero, sino en un proceso cuyo fin ¨²ltimo es encontrar una soluci¨®n quir¨²rgica para tres enfermos sin otra expectativa terap¨¦utica. Uno de ellos est¨¢ en v¨ªas de lograrlo pero nuestros esfuerzos deben centrarse ahora en encontrar donante para los otros dos.

Dentro de las muchas notas positivas que ha tenido el trasplante de cara efectuado en La Fe hay una de la que no nos podemos sentir en absoluto orgullosos: la filtraci¨®n de datos del donante, producida mientras se estaba llevando a cabo la intervenci¨®n. Los datos publicados, por otra parte, inexactos, adem¨¢s de atentar contra la privacidad de una familia que ha mostrado una generosidad extraordinaria en un momento tan dif¨ªcil, son un mal antecedente para otros casos similares que sin duda se dar¨¢n en el futuro. De nuevo recordar a los pacientes que aguardan en Virgen del Roc¨ªo y Vall d'Hebron. Ellos deben ser ahora la prioridad de la ONT, como el resto de enfermos que esperan un trasplante en Espa?a. Es nuestra ¨²nica raz¨®n de ser.

Rafael Matesanz es director de la Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes.