La hora del rigor
El presidente del Gobierno debe buscar un amplio consenso para hacer frente a la crisis
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, traz¨® ayer las grandes l¨ªneas de un plan de actuaci¨®n frente a la crisis. A la espera de conocer su proyecto de Ley de Presupuestos, en el que se contemplar¨¢, sin precisar nada, una subida de impuestos "limitada y temporal", y la tan anunciada como desconocida Ley de Econom¨ªa Sostenible, destinada a incentivar un nuevo modelo de crecimiento, cabe reclamar austeridad, decisi¨®n y el m¨¢s amplio consenso posible. Habr¨¢ que saber, entre otras cosas, c¨®mo se compensa el incremento de gasto p¨²blico que implica su programa, en un momento en que el d¨¦ficit est¨¢ disparado y la crisis no da tregua.
El Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE) ha confirmado que la econom¨ªa espa?ola atraviesa la m¨¢s pronunciada contracci¨®n en su ritmo de crecimiento desde el inicio de la democracia. Es tambi¨¦n una de las m¨¢s severas de Europa. En el segundo trimestre la ca¨ªda ha sido del 4,2% respecto al mismo periodo de 2008. La demanda nacional es la principal responsable del desplome. Lo m¨¢s inquietante es la continuada contracci¨®n de todos los componentes de la formaci¨®n bruta de capital fijo; la inversi¨®n en bienes de equipo cae en el segundo trimestre un 28,9%. Una econom¨ªa que frena a ese ritmo la renovaci¨®n de sus inversiones est¨¢ reduciendo su capacidad de crecimiento. Por el momento, el sector exterior no puede compensar la situaci¨®n y la econom¨ªa no aprovecha los indicios de repunte en la demanda de otros pa¨ªses. Las exportaciones caen a un ritmo del 15,7%. La contracci¨®n afecta tambi¨¦n al mercado de trabajo que ha perdido en un a?o 1,3 millones de empleos netos a tiempo completo. No es de extra?ar que los hogares lleven seis trimestres reduciendo el consumo. Ante este panorama, Zapatero afirm¨® que lo peor ha pasado. Ya se ver¨¢. Lo indiscutible es que seguimos inmersos en la recesi¨®n, destruyendo crecimiento potencial y empleo. El cuadro que hoy exhibe nuestra econom¨ªa no permite anticipar que esta crisis vaya a pasar r¨¢pidamente por Espa?a.
El presidente del Gobierno reiter¨® ayer su voluntad de negociar en los pr¨®ximos meses con los agentes sociales y las fuerzas pol¨ªticas un ambicioso programa de reformas para establecer un modelo de crecimiento sostenible, sin la dependencia suicida de la construcci¨®n. Loable prop¨®sito que deber¨¢ concluir en algo tangible. Algunas de las reformas, como la de la educaci¨®n, y en concreto la formaci¨®n profesional, son asignaturas muchas veces suspendidas por los gobiernos democr¨¢ticos. Zapatero deber¨¢ demostrar que es capaz de alcanzar un acuerdo pol¨ªtico que incorpore acciones extraordinarias para activar la econom¨ªa e impulsar una inversi¨®n del Estado en destinos adicionales a los de la obra p¨²blica. La contrapartida no podr¨¢ ser otra que la contenci¨®n del gasto p¨²blico y la elevaci¨®n de algunos impuestos. Es la hora del rigor.
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