Las minor¨ªas de izquierdas aspiran a ser determinantes

Gaspar Llamazares suele repetir que Zapatero pone el intermitente a la izquierda, pero acaba siempre girando a la derecha, especialmente, en asuntos econ¨®micos y sociales.

El diputado de Izquierda Unida pretende que en el nuevo curso pol¨ªtico el presidente del Gobierno olvide los gui?os a la derecha y gire definitivamente hacia la izquierda. Es decir, que olvide a CiU y al PNV y se lance directamente a pactar los Presupuestos para 2010 con los partidos minoritarios de la izquierda. O sea, ERC, IU, ICV, BNG y Nafarroa Bai. "Que el Gobierno abandone la geometr¨ªa variable y lidere un proyecto social y de izquierdas", exige Llamazares.

Esta vez, las diferencias de posici¨®n parecen m¨¢s claras porque, por ejemplo, CiU exige que no haya subida de impuestos y los partidos de la izquierda condicionan su apoyo a las cuentas a una verdadera reforma fiscal que grave m¨¢s a las rentas m¨¢s altas. "Que no haya maquillaje fiscal", advierte Llamazares tras recordar otras modificaciones impositivas de Zapatero como la deducci¨®n de 400 euros y la supresi¨®n del impuesto de patrimonio que, en su opini¨®n, han llevado a una situaci¨®n fiscal injusta.

"Una econom¨ªa social y sostenible", es el lema de estos partidos, como punto de partida de sus relaciones con el PSOE para el nuevo curso pol¨ªtico, con la aspiraci¨®n de ser determinantes y decisivos y condicionar al Gobierno. Llamazares defender¨¢ tambi¨¦n las posiciones sindicales y asegura estar dispuesto a modificar las prestaciones para los desempleados, con f¨®rmulas m¨¢s objetivas, como la de las rentas de reinserci¨®n.

Adem¨¢s de los asuntos econ¨®micos, estos partidos de la izquierda le son imprescindibles al Gobierno para sacar adelante leyes como la del aborto que llegar¨¢ al Congreso antes de final de a?o. Sin embargo, ese apoyo y esa tramitaci¨®n no son pac¨ªficas porque los partidos que forman la mayor¨ªa absoluta necesaria para aprobar la ley no s¨®lo no aceptan cambios, sino que exigen ir m¨¢s all¨¢.

No aceptan cambios en la capacidad de decidir de las mujeres de 16 a?os, ni en la supresi¨®n de penas de c¨¢rcel, ni en los plazos, ni en la regulaci¨®n de la objeci¨®n. Es m¨¢s, advierten de que si el Gobierno rectifica alguno de esos puntos retirar¨¢n su apoyo. Es m¨¢s f¨¢cil aprobarla en sus t¨¦rminos actuales que con modificaciones.

El PSOE aspira a ampliar esa mayor¨ªa y s¨®lo lo puede hacer incorporando al PNV. El problema es que los nacionalistas vascos utilizan como referencia el informe que Margarita Ur¨ªa hizo en el Consejo General del Poder Judicial, con recomendaciones de cambios que la izquierda no acepta.