Poco champ¨¢n en la mostra

Se acabaron las botellas de champ¨¢n a discreci¨®n. Los zumos de naranja reci¨¦n exprimido, los croissants calientes y las esperas en lujosos salones de hotel. La Mostra de Venecia y, especialmente, las agencias de relaciones p¨²blicas que coordinan las entrevistas, los encargados del protocolo del festival y, en definitiva, los que controlan el chiringuito, han decidido cortar por lo sano: de los tentempi¨¦s y el caf¨¦ caliente que se ofrec¨ªan a los periodistas, al profesional y al invitado de turno se ha pasado a una concepci¨®n mucho m¨¢s espartana: agua. Con gas y sin gas. Ya se sabe, la crisis.

La gran mayor¨ªa de eventos se suceden ya no en hoteles como el Des Bains o el Excelsior, sino en carpas o espacios esponsorizados (Lancia Caf¨¦, Quintaessencia, Nastroazzurro) situados a pie de mar en estructuras temporales, donde las consumiciones son de pago casi siempre y el confort es poco menos que cero.

Pero no s¨®lo en la intendencia se nota el baj¨®n de la Mostra en este 2009, que ha tenido a un pol¨ªtico, el presidente de Venezuela Hugo Ch¨¢vez, como su invitado m¨¢s medi¨¢tico hasta el momento. Tambi¨¦n, en las llegadas de George Clooney -que ha presentado en p¨²blico a su nueva novia, la velina Elisabetta Canalis- Matt Damon, Ewan McGregor, Nicolas Cage o Eva Mendes (la indiscutible reina del festival, elegante y encantadora a partes iguales), que han preferido quedarse en hoteles como el Cipriani, a salvo de curiosos. Los fiestorros de a?os atr¨¢s han sido sustituidos por min¨²sculas fiestas privadas y los famosos han brillado por su ausencia.

As¨ª, personajes menos populares pero m¨¢s ex¨®ticos como la actriz Tilda Swinton, que presumi¨® de vestirse de Devota & Lomba d¨ªa s¨ª y d¨ªa tambi¨¦n; la extra?a y revolucionaria pareja formada por Oliver Stone y el mencionado Ch¨¢vez; el director Michael Moore y su pareja Kathleen Glynn; o la actriz francesa Isabelle Huppert se llevaron muchos m¨¢s flashes que de costumbre. Incluso, la veterana Jane Birkin que se present¨® a la cita con un jersey sin pedigree, fue acribillada por los fot¨®grafos. ?stos, al menos, esperan terminar bien el festival con la llegada al Lido de Tom Ford, gur¨² y n¨²mero uno del mundo de la moda, que ahora ha decidido pasarse al cine y ha tra¨ªdo hasta aqu¨ª su primer filme: A single man.