"Amo conquistar. Si pagas, ?qu¨¦ gusto hay?"

Periodista: "Le tengo que preguntar por el asunto que est¨¢ en todos los medios internacionales, que son las velinas y prostitutas que han ido a sus fiestas...".

Berlusconi. "Le da envidia, ?eh?".

P. "Claro. No, quer¨ªa preguntarle si cree que esto est¨¢ da?ando la imagen de Italia...".

B. "Muchos turistas extranjeros han reservado para las vacaciones del a?o que viene".

P. "No s¨¦ si ha pensado en dimitir. En este momento est¨¢ enfrentado con la prensa, la Iglesia, con su compa?ero Fini... Es un poco complicado de gestionar".

Berlusconi. "Veo que usted s¨®lo lee l'Unit¨¢ y La Repubblica. Lo de las velinas es mentira. Hicimos un curso, con mujeres con las mejores notas en la universidad, que conoc¨ªan varios idiomas, para hacer de asistentes para nuestros candidatos a las elecciones europeas. De este curso fueron seleccionadas tres personas y las pusimos en la lista europea. Son personas con gran pasi¨®n, entusiasmo, y muy cultas, que ser¨¢n grandes parlamentarias.

Segundo, no hay ning¨²n asunto de prostituci¨®n. Los c¨ªrculos Menos mal que est¨¢ Silvio me pidieron unos encuentros. Un emprendedor de Bari, llamado Tarantino, vino a algunas cenas acompa?ado por bellas mujeres. Y yo pido que entre los hombres de la sala levanten la mano los que creen que no es agradable sentarse en una mesa y en vez de encontrarse enfrente personas lejanas de la est¨¦tica (sic), los ojos se puedan posar sobre mujeres simp¨¢ticas y agradables. Eran mujeres que ¨¦l tra¨ªa como amigas suyas, y eso es todo. Una de esas personas me ha acusado, y responder¨¢ ante los tribunales. S¨®lo digo que las penas a las que se enfrenta son de hasta 18 a?os por cuatro delitos. No he decidido a¨²n si la denunciar¨¦. S¨ª he denunciado a los peri¨®dicos. Vamos hacia la absoluta desinformaci¨®n. La realidad de los peri¨®dicos es distinta a la italiana. Con esta informaci¨®n, pobre Italia. Espero que la prensa despierte pronto de esta pesadilla.

Una precisi¨®n. Cuando fui v¨ªctima de un ataque de la persona que cre¨® un esc¨¢ndalo, tambi¨¦n ah¨ª se comprob¨® que yo nunca he pagado una lira ni un euro por una prestaci¨®n sexual. Nunca he tenido que dar dinero por prestaciones sexuales. Y le digo por qu¨¦. Porque para quien ama conquistar, la satisfacci¨®n m¨¢s bonita est¨¢ en la conquista. Si pagas, pregunto, ?qu¨¦ gusto puede haber? Como puede ver, no tengo problemas para hablar de las cosas de la vida. Tal vez por eso gusto a los italianos y tengo el 68% de aprobaci¨®n. Acabo: dimitir. Estoy convencido, teniendo el r¨¦cord...".

Tocando a Zapatero: "Perdona, pero me han hecho una pregunta, es un periodista tuyo...".

Zapatero: "No, si est¨¢ interesante...".

Berlusconi. "Por respeto a Espa?a tengo que continuar. He superado al gran Alcide De Gasperi, que gobern¨® 2.497 d¨ªas. Creo sinceramente que soy de lejos el mejor presidente de Italia en sus 150 a?os de historia. Lo digo por lo que hago y lo que he hecho, por eso tengo el 68% de aprobaci¨®n".

Al periodista de EL PA?S: "Podr¨ªa decir mucho sobre lo que escribe su peri¨®dico. Lo evitar¨¦. Pero para mantener la credibilidad hay que abrir los ojos, no ser facciosos y mirar a la realidad. Ca¨ªda de credibilidad significa ca¨ªda de ventas, de lectores, de publicidad. As¨ª se va a la quiebra. Y creo que EL PA?S sabe algo de eso".