Obama clama en la ONU por la cooperaci¨®n internacional
El presidente advierte de que EE UU solo no puede hacer frente a los problemas globales
"Aquellos que criticaban a Estados Unidos por actuar solo en el mundo, no pueden ahora hacerse a un lado y esperar a que Estados Unidos resuelva solo los problemas del mundo". Esta frase, pronunciada ayer por Barack Obama en su primera intervenci¨®n como presidente norteamericano ante la Asamblea General de la ONU, define toda su filosof¨ªa sobre una nueva era de cooperaci¨®n internacional. Pero tambi¨¦n resume toda su frustraci¨®n por la falta de apoyo encontrado hasta ahora ante crisis complicadas como Ir¨¢n y Afganist¨¢n.
Obama lleg¨® a la tribuna de la ONU en una hora cr¨ªtica de su presidencia. En un momento en el que est¨¢ apresurado para demostrar que su apuesta por la diplomacia y el di¨¢logo como primera opci¨®n para hacer frente a los problemas del mundo es acertada. Ayer mismo, una encuesta de NBC y The Wall Street Journal reflejaba que ya s¨®lo el 50% de los estadounidenses respalda la pol¨ªtica exterior de la Administraci¨®n, siete puntos menos que en julio.
El discurso refleja la frustraci¨®n por la falta de apoyos en Ir¨¢n y Afganist¨¢n
El presidente norteamericano busca resultados y ayuda para conseguirlos. Asegur¨® que, muchas veces, "el antiamericanismo ha sido una excusa para la inacci¨®n colectiva". Manifest¨® su convicci¨®n de que, en esta ¨¦poca, "los intereses de las naciones est¨¢n compartidos" y no pueden ser defendidos "con la actuaci¨®n aislada de Estados Unidos".
Obama admiti¨® algunos errores cometidos por su pa¨ªs en el pasado y pas¨® lista a los cambios registrados desde que ¨¦l est¨¢ en la Casa Blanca, especialmente al hecho de que el Gobierno norteamericano est¨¢ ahora sinceramente comprometido en la promoci¨®n del multilateralismo. Pero advirti¨® de que ese cambio debe encontrar ya el eco correspondiente en la actitud de otros pa¨ªses.
"Hemos buscado, con palabras y con hechos, una nueva era de compromiso con el mundo. ?ste es el momento en que cada uno asuma su parte de responsabilidad para una respuesta global a los problemas globales", dijo.
Desafortunadamente para los intereses de su Administraci¨®n, no ha sido as¨ª hasta ahora. Pese a haber advertido a sus socios europeos de que una victoria de los talibanes en Afganist¨¢n representa un mayor peligro para Europa que para Estados Unidos, los miembros de la OTAN van poco a poco desentendi¨¦ndose de esa guerra, incapaces de soportar bajas entre sus filas, mientras que los norteamericanos pierden all¨ª una media de casi una decena de vidas por semana.
Rusia no acaba de fijar una posici¨®n rotunda sobre Ir¨¢n, pese a que Estados Unidos no s¨®lo ha renunciado al escudo antimisiles, sino que ha retirado tambi¨¦n de su agenda la ocupaci¨®n de Georgia. El impacto del discurso de El Cairo no ha servido para que los pa¨ªses ¨¢rabes flexibilicen su posici¨®n frente a Israel. Como tampoco los gestos hacia Cuba han facilitado una actitud m¨¢s firme de Am¨¦rica Latina con Hugo Ch¨¢vez.
Un presidente muy impopular, como George W. Bush, acab¨® su presidencia aislado del mundo, v¨ªctima de sus propias equivocaciones. Pero otro muy popular, como Barack Obama, aparece hoy tambi¨¦n aislado ante los grandes desaf¨ªos internacionales por la aparente incoherencia e indecisi¨®n de los que deb¨ªan estar a su lado.
El reloj corre muy deprisa, y la oportunidad de redise?o mundial que naci¨® con la elecci¨®n de Obama puede desaparecer muy pronto. Las opciones de paz con Ir¨¢n, por ejemplo, pueden ser tan s¨®lo cuesti¨®n de d¨ªas. Obama intent¨® ayer llamar la atenci¨®n del mundo sobre la urgencia de la situaci¨®n.
"Hemos llegado a un momento decisivo", advirti¨® el presidente norteamericano. "Estados Unidos est¨¢ listo para abrir un nuevo cap¨ªtulo en la cooperaci¨®n internacional. Pero un futuro de paz y prosperidad s¨®lo ser¨¢ posible si reconocemos que todas las naciones tienen derechos, pero tienen tambi¨¦n responsabilidades".
Por ejemplo, en el caso de Ir¨¢n y Corea del Norte. Obama reconoci¨® su derecho a desarrollar programas nucleares con prop¨®sitos pac¨ªficos. Pero dijo que "si esos pa¨ªses deciden ignorar las obligaciones internacionales, si ponen su prop¨®sito de construir armas at¨®micas por encima de la estabilidad y la seguridad regional, el mundo tiene que pedirles explicaciones, el mundo tiene que permanecer unido y demostrar que las leyes internacionales no son una promesa vac¨ªa".
El presidente norteamericano insisti¨® en que su concepci¨®n de las relaciones internacionales es muy diferente a la de su antecesor: "Ninguna naci¨®n puede tratar de dominar a otra. Ning¨²n orden mundial que ponga a un pa¨ªs o a un grupo sobre otro puede perdurar. La divisi¨®n tradicional entre el Norte y el Sur no tiene ya sentido".
Algunas de esas frases fueron recibidas por aplausos en una Asamblea General que, sin embargo, permaneci¨® muda cuando Obama a?adi¨® que en un nuevo orden internacional de cooperaci¨®n y respeto no debe de faltar la democracia.
"La democracia no puede ser impuesta por ninguna naci¨®n desde fuera, y en el pasado Estados Unidos ha sido con frecuencia selectivo en la promoci¨®n de la democracia", admiti¨®. "Pero eso no debilita nuestro compromiso sino que lo refuerza: hay principios b¨¢sicos que son universales, y Estados Unidos jam¨¢s renunciar¨¢ al derecho de los pueblos a decidir su propio futuro en cualquier lugar del mundo".
La respuesta global
- "El antiamericanismo ha sido una excusa para la inacci¨®n colectiva".
- "Es el momento de que cada uno asuma su parte de responsabilidad para una respuesta global a los problemas globales".
- "Un futuro de paz y prosperidad s¨®lo ser¨¢ posible si reconocemos que todas las naciones tienen derechos, pero tienen tambi¨¦n responsabilidades".
- "Si Ir¨¢n y Corea del Norte ponen su prop¨®sito de construir armas at¨®micas por encima de la estabilidad y la seguridad regional, el mundo tiene que pedirles explicaciones, el mundo tiene que permanecer unido y demostrar que las leyes internacionales no son una promesa vac¨ªa".
- "Estados Unidos jam¨¢s renunciar¨¢ al derecho de los pueblos a decidir su propio futuro en cualquier lugar del mundo".
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