Se caen las cubiertas

Con una excusa perfecta e indiscutible, el alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, anunci¨® ayer el abandono de su discutido proyecto de cubrici¨®n del cielo de la plaza de Espa?a y las calles comerciales Dato y San Prudencio. "La crisis econ¨®mica nos obliga a abandonar las cubiertas", anunci¨® en un foro un tanto extra?o para hablar de comercio y urbanismo, la Comisi¨®n de Hacienda, y en una comparecencia madrugadora, a las nueve de la ma?ana. Queda as¨ª descartado -"de momento", pues Lazcoz se resiste a enterrar la idea- el elemento m¨¢s llamativo proyecto Alh¨®ndiga, su propuesta para revitalizar el comercio en el centro de la ciudad.

Desde que se anunci¨® la iniciativa, no han cesado las cr¨ªticas sobre una idea que se sustentaba en la voluntad del alcalde y en unos apuntes t¨¦cnicos de la ingenier¨ªa Idom. El cubrimiento de parte del centro de Vitoria con estructuras transparentes que permitir¨ªan el paso lateral del aire, se hab¨ªa presentado como la intervenci¨®n necesaria para convertir esos espacios cl¨¢sicos en un renovado centro urbano que compitiera con las ¨¢reas comerciales de las afueras de Vitoria.

Lazcoz insiste en que mantiene la idea a la espera de mejores tiempos

Lazcoz quitar hierro a la mayoritaria oposici¨®n popular y t¨¦cnica

Ayer, estas "tejavanas", como las calific¨® despectivamente el portavoz del PP, Javier Maroto, se cayeron ante todo por la falta de apoyo de la oposici¨®n y, sobre todo, de los ciudadanos. El alcalde quiso quitar hierro a esta oposici¨®n popular -resalt¨® las 1.575 intervenciones en el buz¨®n ciudadano abierto, pero no el hecho de que el 93% de ellas eran cr¨ªticas- y no hizo referencia a los argumentos contrarios que han surgido desde la mayor¨ªa de los arquitectos y urbanistas de la ciudad.

En un reportaje publicado por este diario el pasado 1 de junio sobre el asunto, ninguno de los entrevistados (salvo el autor de la propuesta) defend¨ªa esa intervenci¨®n en el primer ensanche de Vitoria, y menos en la plaza de Espa?a, monumento emblem¨¢tico de Justo Antonio de Olaguibel. Se da la circunstancia de que un buen n¨²mero, arquitectos consultados se negaron a ofrecer su opini¨®n por temor a que tuviera repercusiones negativas en si trabajo, cuando el Plan E estaba poni¨¦ndose en marcha.

El alcalde insisti¨® ayer en que su idea se mantiene, que s¨®lo se pospone, pero por si acaso no habl¨® de m¨¢s estrategias de participaci¨®n ciudadana. "Lo principal ahora es potenciar las pol¨ªticas sociales y de empleo, para resolver los problemas de la ciudadan¨ªa", subray¨®. De momento, gracias al citado Plan E, se est¨¢ llevando a cabo otra de las propuestas del proyecto Alh¨®ndiga, la reforma de las calles Prado, Gorbea y Sancho el Sabio, tambi¨¦n entre la incertidumbre de sus comerciantes y la euforia de los mun¨ªcipes.