"S¨®crates necesitar¨¢ m¨¢s cintura en este segundo mandato"

La izquierda es mayoritaria en Portugal, sociol¨®gicamente, pero es incapaz de ponerse de acuerdo. As¨ª ha sido en el pa¨ªs vecino desde la recuperaci¨®n de la democracia hace m¨¢s de tres d¨¦cadas, opina el ex presidente M¨¢rio Soares. "La izquierda no se une para construir un gobierno, pero s¨ª lo hace para impedir un gobierno de derecha". Por esa raz¨®n, a?ade, una victoria de Manuela Ferreira Leite (conservadora) en las elecciones legislativas del pasado 27 de septiembre habr¨ªa sido una desgracia. "El presidente de la Rep¨²blica podr¨ªa haberla designado primera ministra, pero despu¨¦s, en el Parlamento, el Partido Socialista (PS), el Partido Comunista (PCP) y el Bloco de Esquerda no le habr¨ªan dejado formar gobierno".

"Que Portugal apoyara la reelecci¨®n de Dur?o Barroso fue un gran error"

A sus 84 a?os, Soares ha estado en la lucha electoral para apoyar al socialista Jos¨¦ S¨®crates, que hoy recibir¨¢ el encargo del presidente, An¨ªbal Cavaco Silva, de formar gobierno, y a los candidatos del PS en las elecciones municipales de ayer. La biograf¨ªa de M¨¢rio Soares (Lisboa, 1924) le avala como un referente ¨²nico de la pol¨ªtica portuguesa. Treinta y dos a?os jug¨¢ndose el pellejo en la lucha contra la dictadura, fundador del PS, primer ministro, presidente de la Rep¨²blica dos mandatos consecutivos, candidato en las ¨²ltimas presidenciales de 2006, integrante del Consejo de Estado.

Y esa misma biograf¨ªa conquista muchos corazones dentro y fuera de su partido. En la reciente campa?a electoral, Soares particip¨® en un mitin en Oporto para apoyar a S¨®crates. Al subir al estrado, la multitud empez¨® a gritar "Soares ¨¦ fixe" (Soares es fenomenal), una consigna muy coreada en tiempos pasados. El viejo zorro demostr¨® su habilidad pol¨ªtica y evit¨® lo que pod¨ªa haber sido una situaci¨®n inc¨®moda para el actual l¨ªder socialista. Dijo a sus seguidores: "Queridos amigos, quiero deciros que S¨®crates es el hombre del momento y es el hombre para el futuro". Y grit¨® varias veces "S¨®crates ¨¦ fixe" hasta lograr la respuesta de la gente.

Soares estima que "S¨®crates no tendr¨¢ la fuerza que le dio la mayor¨ªa absoluta en la legislatura pasada, pero hay que recordar que durante la campa?a electoral fue blanco de los ataques de los otros candidatos. Eran todos contra S¨®crates y, sin embargo, gan¨® las elecciones. Por ello, su victoria tiene un significado mayor". Recomienda al pr¨®ximo jefe de Gobierno "flexibilidad y cintura pol¨ªtica" para negociar con todos los partidos. "No puede hacer una alianza con ninguno, ni le hace falta, pero tendr¨¢ que llegar a acuerdos puntuales. Aprendi¨® mucho en cuatro a?os. Era un hombre que no ten¨ªa una gran cultura pol¨ªtica, pero es en¨¦rgico, determinado y con coraje, tres cosas important¨ªsimas en pol¨ªtica". El primer examen, dice Soares, ser¨¢ la votaci¨®n de los presupuestos del Estado en el Parlamento. "Se aprobar¨¢n, porque la oposici¨®n no se atrever¨¢ a provocar una crisis", pronostica.

El ex presidente sabe lo que es gobernar en minor¨ªa. Vivi¨® esta situaci¨®n como primer ministro en el primer Gobierno constitucional (1976-77), y otras mucho peores en los momentos ¨¢lgidos del proceso revolucionario despu¨¦s del 25 de abril de 1974. "El pa¨ªs estuvo al borde de la guerra civil, cuando el Partido Comunista y sectores militares radicales quer¨ªan instalar una democracia popular en Portugal". Estaba en juego la toma de Oporto, el bombardeo de Lisboa, el futuro de la naci¨®n. Soares tuvo un papel destacado a la hora de impedir un ba?o de sangre y en las negociaciones posteriores que impidieron un regreso al pasado.

La buena relaci¨®n afectiva entre Soares y S¨®crates, de 52 a?os -"me trata como si fuera su padre"-, no le impide al fundador del PS admitir las diferencias pol¨ªticas entre ambos. "Estoy a la izquierda de S¨®crates. ?l era blairista, y yo he sido cr¨ªtico de Blair desde el primer d¨ªa. Me decepcion¨® su apoyo a la reelecci¨®n de Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, le dije que fue un gran error".

Soares cree que la relaci¨®n del primer ministro con el presidente no ser¨¢ f¨¢cil, y reconoce que temi¨® un conflicto institucional a ra¨ªz de los ataques de Cavaco Silva al Gobierno y al Partido Socialista despu¨¦s de las legislativas. "Pero, a diferencia de Espa?a, en Portugal raramente ocurren tragedias, exceptuando las naturales. Aqu¨ª impera la comedia, cuando no la farsa".