Roma beatifica al cardenal Sancha, un l¨ªder antiliberal

En la edad moderna el catolicismo espa?ol ha contado con grandes prelados, uno de los m¨¢s destacados Ciriaco Mar¨ªa Sancha y Herv¨¢s (Quintana de Pidio -Burgos- 1833, Toledo, 1909), que ayer fue beatificado en la catedral de Toledo con gran pompa. Para presidir la ceremonia Benedicto XVI envi¨® a su prefecto de la Congregaci¨®n para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Amato. La misa congreg¨® a miles de fieles y fue concelebrada por el actual prelado toledano, Braulio Rodr¨ªguez, y otros cuatro cardenales. Asistieron el presidente del Congreso, Jos¨¦ Bono; el presidente de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda, y la presidenta del PP en esa comunidad y secretaria general del partido, Mar¨ªa Dolores de Cospedal.

El Vaticano no suele encontrar motivos para elevar a los altares a sus altos prelados. En los ¨²ltimos tres siglos s¨®lo un papa, P¨ªo X, ha sido canonizado. Por eso destaca la decisi¨®n de beatificar a Sancha, en un primer paso hacia la santificaci¨®n. La carrera de este prelado es impresionante, hasta su cargo de Primado de Toledo y Patriarca de las Indias. Le¨®n XIII lo hizo cardenal en 1894. Se gan¨® el apodo de padre de los pobres y fund¨® la Congregaci¨®n de Hermanas de la Caridad. Pero Sancha fue, tambi¨¦n, un l¨ªder entre cl¨¦rigos que luchaban a brazo partido contra el liberalismo, se echaron al monte con los carlistas o amargaron la vida a C¨¢novas y a Sagasta. Cuando Emilio Castelar pronunci¨® su discurso a favor de la tolerancia religiosa, los peri¨®dicos cat¨®licos publicaron la noticia en p¨¢ginas con bordes negros y los obispos celebraron oficios expiatorios. Y cuando el Gobierno promulg¨® la ley que autorizaba el matrimonio civil (1870), el clero habl¨® de la legalizaci¨®n del "concubinato p¨²blico universal".