De Santo Domingo a San Siro

De Santo Domingo, en Alcorc¨®n, a San Siro, donde espera el segundo equipo con m¨¢s Copas de Europa; del gatillazo final en el Reyno de Navarra a la inquietante estepa rusa, donde reina el Rubin Kaz¨¢n, el ¨²nico azote azulgrana en lo que va de curso; de San Mam¨¦s, ya en puestos de descenso, al Manzanares, donde aterrizar¨¢ el l¨ªder de la reputad¨ªsima Premier. No hay tregua futbol¨ªstica ni bingos predecibles ante un calendario tan variopinto.

Con Higua¨ªn al rescate y un ¨¢rbitro extraviado con efecto motivador, el Madrid ha encontrado unas horas de sosiego antes de medirse ma?ana al Milan, que, de forma sorprendente, le tom¨® la matr¨ªcula en Chamart¨ªn. Un partido de extraordinario calado entre dos clubes que suman 16 t¨ªtulos del gran torneo europeo. En Milanello hay una cierta par¨¢lisis institucional y el Milan apenas se ha barnizado en los ¨²ltimos a?os. Todo lo contrario que el Madrid, de nuevo el gran agitador del mercado mundial. Del presunto vigor de unos y el estado comatoso de otros no hubo rastro en la reciente cita en el Bernab¨¦u. Todo apuntaba a un mero accidente madridista, hasta su sequ¨ªa en Gij¨®n e inmediata inmolaci¨®n en Santo Domingo. Al Madrid, que hizo un notable ejercicio de casta y orgullo frente al Getafe, le asaltan las dudas, pero tiene caladero para buscar el sistema id¨®neo. En Mil¨¢n, incluso con Cristiano en la enfermer¨ªa y Guti de penitencia, a Manuel Pellegrini a¨²n le sobrar¨¢n estrellas: ?Ra¨²l, que respir¨® el s¨¢bado en el banquillo; el pujante Higua¨ªn; el esperado Benzem¨¤, o Kak¨¢, un hijo pr¨®digo de Silvio Berlusconi? Por muchas dudas que desvelen al entrenador madridista -otra a la vista podr¨ªa ser el mayor rendimiento del actual Sergio Ramos como central que como lateral-, el Milan tampoco tiene br¨²jula y mucho menos cesto para cambiar el paso. Escarmentado tras el estropicio provocado por Pato, el Madrid sabe que con s¨®lo subir los decibelios de aquel d¨ªa tendr¨¢ mucho ganado.

Tambi¨¦n el Bar?a tendr¨¢ que meditar ante el Rubin Kaz¨¢n, que le hizo un inopinado nudo en su bautismo en el Camp Nou. A la espera de una mejor versi¨®n de Iniesta y alguna pista de Henry, el equipo de Guardiola a¨²n tiene momentos seductores, pero ha bajado su porcentaje goleador. No supo bajar la persiana a sus duelos con el Rubin y Osasuna y pen¨® por ello. Un patinazo en Rusia le enredar¨ªa uno de los campeonatos en los que defiende el t¨ªtulo.

Quien definitivamente perder¨ªa el hilo en caso del en¨¦simo naufragio es el Atl¨¦tico, ca¨ªdo ya a los puestos de descenso en la Liga (tras la goleada del Villarreal al Tenerife, s¨®lo son peores el Xerez y el M¨¢laga). A Quique S¨¢nchez Flores le ha ca¨ªdo un hueso para su estreno en el Calder¨®n. Pero quiz¨¢ sea el mejor cartel posible para el Atl¨¦tico, que, si a¨²n mantiene alguna fidelidad con sus entra?as, siempre fue un equipo tan capaz para las gestas como calamitoso para los bolos. El Chelsea, l¨ªder ingl¨¦s, ser¨¢ un examen exigente, pero de sus visitas europeas no hay grandes huellas en esta flamante era Abram¨®vich.

M¨¢s calma se presume para el Sevilla, que pica en todas las competiciones y recibe al paliducho Stuttgart, al que ya gole¨® en Alemania. A su rebufo en la Liga ya tiene al Valencia, vencedor en M¨¢laga y que parece haber recuperado algunas viejas se?ales.