Simulacro casi tr¨¢gico

El salto al vac¨ªo desde un segundo piso para mostrar las ventajas de un sistema de desalojo en altura en caso de incendio acab¨® en una ca¨ªda sobre la acera y la fractura del tobillo izquierdo y los calc¨¢reos de ambos pies del trabajador encargado de la exhibici¨®n.

Todo ocurri¨® delante de las c¨¢maras convocadas para la ocasi¨®n y de decenas de curiosos. J. C. D. R., de 39 a?os, empleado de la empresa guipuzcoana AMSPI, se lanz¨® desde el segundo piso del hotel Amara de San Sebasti¨¢n. Se trataba de presentar un invento, un brazo mec¨¢nico con una cuerda conectada a un arn¨¦s para rescates en edificios, que deb¨ªa haberle depositado suavemente en el suelo. Pero el invento fall¨®, y cay¨® al suelo desde una altura de 15 metros.

Los responsables del artilugio, denominado AMSPI (Aparato Mec¨¢nico para Salvar Personas en un Incendio) estaban tan convencidos de que todo ir¨ªa sobre ruedas que ni siquiera hab¨ªan dispuesto una ambulancia por si acaso. El inventor y responsable de la compa?¨ªa, Joaqu¨ªn Tamayo, dijo en un primer momento desconocer las razones del accidente. Por la tarde, atribuy¨® el fallo a que alguien hab¨ªa manipulado la m¨¢quina, sin concretar c¨®mo. "Era el estreno mundial. En 15 a?os de prototipos y pruebas nunca hab¨ªa fallado. Lo est¨¢n investigando y todo saldr¨¢ a la luz", asegur¨®. Su aparato, a?adi¨®, ha recibido varios premios, entre ellos el del Sal¨®n Internacional de Inventos de Ginebra. Otro de los trabajadores de la compa?¨ªa no quiso abundar en la teor¨ªa de la conspiraci¨®n: "Ahora lo que tengo es cargo de conciencia. Y eso que pudo ser peor".