Abdul¨¢ deslegitima el poder de Karzai
Un polic¨ªa afgano, presunto infiltrado talib¨¢n, mata a cinco soldados brit¨¢nicos
El antiguo candidato presidencial afgano, Abdul¨¢ Abdul¨¢, llam¨® ayer "ileg¨ªtimo" al mandatario surgido de una no elecci¨®n y asegur¨® que la Comisi¨®n Electoral Independiente, encargada de organizar los comicios, se extralimit¨® en sus funciones legales al cancelar la segunda vuelta, prevista para este s¨¢bado. Abdul¨¢, quien dio el primer paso al retirarse el domingo pasado de la campa?a electoral aduciendo un clima de fraude, dijo ayer que Hamid Karzai es presidente sin la legitimidad necesaria para hacer frente a los retos del pa¨ªs: violencia talib¨¢n, corrupci¨®n, desempleo y pobreza. Abdul¨¢ descart¨® una vez m¨¢s entrar en el futuro Gobierno.
Karzai, mientras, mueve sus hilos para formar lo que su portavoz, Siyamak Herawi, denomin¨® un Gabinete de tecn¨®cratas, en el que repetir¨¢n algunos de los actuales ministros. Es un eufemismo, porque lo que est¨¢ sucediendo entre bambalinas es que Estados Unidos y los pa¨ªses europeos con mayor n¨²mero de soldados en el terreno le exigen cambios estructurales en la forma de gobernar. En el caso de Washington, exige adem¨¢s algunas detenciones de los corruptos m¨¢s notorios para aplacar a su opini¨®n p¨²blica, que no comprende bien por qu¨¦ Occidente ha decidido mirar para otro lado tras el desastre electoral de las ¨²ltimas nueve semanas.
Entretanto, un polic¨ªa afgano mat¨® ayer a cinco soldados brit¨¢nicos en la provincia de Helmand (sur), aunque los talibanes aseguraron que fue uno de sus combatientes, infiltrado, informa Reuters. El hombre abri¨® fuego contra un destacamento de las tropas brit¨¢nicas, que realizan labores de formaci¨®n de las fuerzas de seguridad afganas. Los brit¨¢nicos respondieron con fuego al atacante, pero ¨¦ste logr¨® escapar.
Ramzan Bashasdost, el tercer candidato presidencial m¨¢s votado, y el hombre que ha salido reforzado de esta larga campa?a electoral, asegura que el pueblo afgano no cree en sus dirigentes y que tanto Karzai como Abdul¨¢ son parte del mismo problema. "En Afganist¨¢n, el gobernante no necesita el respaldo del pueblo para mantenerse, le basta el de los se?ores de la guerra y las potencias extranjeras. Mientras Karzai los tenga, gobernar¨¢. Si los pierde, caer¨¢".
Este hazara que fue ministro de Planificaci¨®n y revolucion¨® el sistema de ayudas a las ONG locales, una de las fuentes de corrupci¨®n, y que fue destituido por Karzai a los nueve meses, sostiene que la batalla est¨¢ perdida mientras no se cambie a la clase pol¨ªtica. "No se puede pretender luchar contra la corrupci¨®n cuando el Gobierno est¨¢ compuesto por corruptos. No se puede aspirar a la justicia cuando el Gobierno est¨¢ compuesto por se?ores de la guerra con las manos manchadas de sangre. Las elecciones eran la oportunidad y se han convertido en un problema. No creo que se pueda cambiar nada antes de las legislativas de 2010. Todo el sistema est¨¢ secuestrado por la camarilla que destruy¨® el pa¨ªs".
Bashasdost cree que el env¨ªo de m¨¢s tropas que estudia el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ser¨ªa un grave error ("s¨®lo traer¨¢n m¨¢s muerte"), pero tambi¨¦n asegura que su retirada en estos momentos ser¨ªa contraproducente. "Karzai no durar¨ªa ni un minuto y yo no podr¨ªa seguir en mi oficina mucho m¨¢s. La guerra ser¨ªa generalizada. Es necesario un plan y un Gobierno honesto que crea en los valores democr¨¢ticos".
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