Se mueven
"Detr¨¢s de la oscuridad hay un Pa¨ªs que se mueve". Lo escuch¨¦ hace poco, pero antes de la manifestaci¨®n del 31. Esta esperanzadora certeza explicar¨ªa que el s¨¢bado miles de personas clamaran en Valencia contra el choriceo y la impunidad con que se ha venido perpetrando. Todas aquellas y aquellos "radicales" desacat¨¢bamos a Camps y a Franco meti¨¦ndonos en pol¨ªtica, y por eso nos ha insultado el beato Cotino. Ser¨¢ que el humo del incienso ciega sus ojos. Y que sus meninges no le permiten colegir que las caminatas de protesta no son un placer, por mucho pecado que le parezca al gobierno. Sin duda habr¨ªamos estado m¨¢s a gustito en el cine, el bar, con un libro o una videoconsola.
Recordar¨¢n que ni en la convocatoria ni en las pancartas aparec¨ªan siglas partidistas. Y que, aunque tambi¨¦n desfilaban militantes y dirigentes, el grueso de la movilizaci¨®n m¨¢s bien pertenec¨ªa a ese "subsuelo social", en buena parte de poca edad, al que se refiere Miquel Ramos en su art¨ªculo Un pa¨ªs en marxa, malgrat tot (Pa¨ªs Valenci¨¤, segle XXI. Valencians pel Canvi). Mantiene el joven m¨²sico y periodista que tal sustrato es abundante y potente, y advierte a los partidos que "subordinar toda acci¨®n pol¨ªtica al r¨¦dito electoral va en contra de la honrada definici¨®n de ser de izquierdas".
Todo lo cual nos lleva a la delicada cuesti¨®n de qu¨¦ papel le est¨¢ reservado a la sociedad civil en la imprescindible regeneraci¨®n democr¨¢tica. No habr¨¢ de ser, ciertamente, el de sustituir o cuestionar la necesidad y la importancia de los partidos, sino m¨¢s bien el de espolear a ¨¦stos a actuar en serio, a dejarse de disputas cainitas y, como escribe Manuel Alcaraz: "A no confundir oposici¨®n con queja, a lanzar propuestas pol¨ªticas sustantivas". El profesor alicantino apuesta por "una trama limpia y c¨ªvica, por contraste a la instalada en las cloacas del poder valenciano".
Y ese parece el objetivo de quienes el s¨¢bado se agruparon tras una pancarta todav¨ªa un tanto misteriosa: En moviment. La escasa literatura que por el momento han producido utiliza mucho los t¨¦rminos resistencia, oportunidades, dignidad, llengua, transparencia, igualdad... Algo s¨¦ de este asunto: que se dirigen a "las fuerzas de progreso" para exigir un cambio, para dar apoyo moral (sin ser la muleta de nadie); que quieren representar a tantos valencianos y valencianas que no han dejado de hacer cosas positivas en todo este tiempo oscuro y triste; que quisieran "repescar a los desenga?ados". En unos momentos en que el prestigio de las instituciones y de quienes las gobiernan est¨¢ bajo m¨ªnimos, alguien se pone en moviment "porque si la gente abandona la pol¨ªtica estamos perdidos". Loado sea todo esfuerzo honrado por evitar el definitivo naufragio colectivo.
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