El esp¨ªritu del centauro
Al igual que en su impactante trilog¨ªa sobre el Holocausto, Primo Levi muestra en sus cinco libros de relatos -reunidos en el volumen Cuentos Completos- la urgencia de que los dem¨¢s sepan
Primo Levi entr¨® en el campo de concentraci¨®n de Auschwitz en diciembre de 1944. Ten¨ªa 24 a?os, hab¨ªa estudiado Qu¨ªmicas a pesar de las leyes raciales de Mussolini que prohib¨ªan a los jud¨ªos el acceso a estudios superiores y hab¨ªa formado parte brevemente de un grupo partisano. En el vag¨®n de mercanc¨ªas donde fue trasladado a Auschwitz viajaban hacinadas 45 personas. De ellas sobrevivieron 4. Fue el vag¨®n m¨¢s afortunado de los 12 que formaban el convoy. A los dos d¨ªas de su ingreso en el campo de concentraci¨®n, de los 650 jud¨ªos italianos que hab¨ªan entrado en aquel tren quedaban poco m¨¢s de cien. Levi resisti¨® los diez meses de cautiverio gracias a la azarosa fortuna, a sus conocimientos b¨¢sicos de alem¨¢n, a su profesi¨®n de qu¨ªmico y a una necesidad que revel¨® ser tan urgente y violenta como encontrar comida: hablar a los dem¨¢s, hacer que los dem¨¢s supiesen.
Cuentos Completos
Primo Levi.
Varios traductores.
El Aleph. Barcelona, 2009.
928 p¨¢ginas. 30 euros.
Contar.
"Cuando estaba en el campo de concentraci¨®n ten¨ªa siempre el mismo sue?o: so?aba que regresaba, que volv¨ªa con mi familia y les contaba, pero no me escuchaban (...) Era comparable al sue?o de T¨¢ntalo, en el que ¨¦ste casi come, llega a acercar el alimento a la boca pero no logra morderlo. Es el sue?o de una necesidad primaria, la necesidad de comer y beber. As¨ª era la necesidad de contar", declar¨® Levi a?os despu¨¦s.
A su regreso a Italia, Levi habl¨® de lo vivido a su familia, a sus amigos, a la que ser¨ªa su mujer. Contaba de viva voz lo que pronto ser¨ªan sus libros: sus memorias del Holocausto, sus relatos, sus poemas, sus novelas, sus ensayos... Auschwitz lo hab¨ªa convertido en escritor. ?l se defin¨ªa como parte de "los tatuados", "los marcados". Aquella expresi¨®n no s¨®lo hac¨ªa referencia al n¨²mero azul grabado en su brazo izquierdo: 174517. Con la misma violencia y de forma indeleble le hab¨ªan se?alado como jud¨ªo a ¨¦l, que formaba parte de una familia de hebreos asimilados y no religiosos. "Me han marcado como se estampa una plancha de hierro, ya soy jud¨ªo: me han cosido la estrella de David y no s¨®lo en la ropa". De la misma forma le encadenaron a las palabras. "La experiencia del lager me oblig¨® a escribir", dec¨ªa. Auschwitz revel¨® ser una escuela tan atroz como aguda sobre la naturaleza humana y el mundo.
El jud¨ªo Levi escribi¨® sus memorias sobre el Holocausto, una trilog¨ªa que se ha convertido en un documento esencial. No es posible comprender la realidad de los campos de concentraci¨®n nazis sin leer Si esto es un hombre (1947), La tregua (1963) y Los hundidos y los salvados (1986). Tres libros poderosos, austeros y reflexivos. "He asumido deliberadamente el lenguaje tranquilo y sobrio del testigo, no el lamento de la v¨ªctima ni la voz airada de quien busca venganza", declar¨®. Tras la publicaci¨®n de Si esto es un hombre transcurrieron casi dos d¨¦cadas de silencio, provocado por el escaso inter¨¦s que suscit¨® el libro. La pesadilla recurrente de Levi en la que los dem¨¢s se negaban a escucharle se hab¨ªa hecho realidad. Pero a partir de la publicaci¨®n de La tregua, un Primo Levi ya reconocido se volc¨® en la escritura hasta su muerte, en 1987. Ahora se publican sus Cuentos Completos, una buena oportunidad para seguir escuch¨¢ndole contar.
El volumen, que edita El Aleph, re¨²ne los cinco libros de relatos que escribi¨® el autor italiano: Historias naturales (1966), Defecto de forma (1971), El sistema peri¨®dico (1975), Lilit y otros relatos (1981) y ?ltima Navidad de guerra (2000). Todos hab¨ªan sido publicados ya en Espa?a, excepto dos relatos que permanec¨ªan in¨¦ditos en castellano. Marco Belpoliti, autor del pr¨®logo, se?ala que Levi fue, ante todo, un escritor de cuentos. Incluso los dos primeros libros de su famosa trilog¨ªa sobre el Holocausto est¨¢n estructurados en forma de relatos. La lectura de sus cuentos revela a un escritor dotado de una inquietante fantas¨ªa, pero al mismo tiempo profundamente arraigado en la realidad. Un narrador h¨ªbrido: realista y fant¨¢stico, cient¨ªfico y delirante, vital y fatalista... Un ser mezclado, nada que ver con el sue?o perverso de las razas puras. Un verdadero centauro, como a ¨¦l le gustaba definir a los hombres.
Entre sus relatos m¨¢s hermosos figuran aquellos que hablan de especies mezcladas: mujeres fecundadas por polen, j¨®venes a quienes les crecen alas... Ah¨ª est¨¢n, entre otros, 'Disfilaxis', 'La gran mutaci¨®n' o 'Quaestio de Centauros', donde plantea una segunda creaci¨®n: "?Por qu¨¦ el delf¨ªn es parecido a un pez y, sin embargo, pare y amamanta a sus cr¨ªas? Porque es hijo de un at¨²n y de una vaca. Y las tortugas son hijas de un sapo y de un pe?asco. Y los murci¨¦lagos, de una lechuza y de un rat¨®n. Y las conchas, de un caracol y de un canto rodado. Y los hipop¨®tamos, de una yegua y de un r¨ªo (...) ?Y de qu¨¦ otra manera, como no fuera a duras penas, se podr¨ªa explicar la desmesurada mole de las grandes ballenas, de los leviatanes? Sus huesos le?osos, su piel aceitosa y negra y su aliento abrasador son el testimonio vivo de un matrimonio venerable, del abrazo voraz del mismo fango primordial cuando abarc¨® la quilla femenina del arca (...)".
Los Cuentos Completos reflejan el amplio abanico de intereses de Levi. Hay cuentos sobre Auschwitz, por supuesto, donde vuelven a aparecer personajes de los que ya hab¨ªa hablado en su trilog¨ªa. Pero hay, sobre todo, cuentos de ciencia-ficci¨®n, fant¨¢sticos, costumbristas, de corte m¨¢s ensay¨ªstico, biogr¨¢ficos, pol¨ªticos... Hay historias breves, ingeniosas, a veces clarividentes, donde Levi describe inventos estrafalarios -un Versificador, un Turboconfesor aprobado por la Iglesia o una m¨¢quina para medir la belleza-, junto a otros que el tiempo ha tra¨ªdo a nuestras vidas: la clonaci¨®n, cascos que permiten acceder a la realidad virtual
Todos contienen el esp¨ªritu de centauro del escritor: la viva curiosidad por el funcionamiento del mundo, la capacidad de observaci¨®n y su claridad estructural de cient¨ªfico y, al mismo tiempo, la lucidez y la sabidur¨ªa que adquiri¨® en Auschwitz. El resultado son relatos que hablan de una realidad m¨¢s compleja y extraordinaria que la que percibimos los dem¨¢s. En el lager, Levi fue testigo de c¨®mo la racionalidad extrema se convierte en la m¨¢s pura irracionalidad, de c¨®mo el estricto cumplimiento de normas y leyes da como resultado el absurdo. Preguntado por sus historias fant¨¢sticas, ¨¦l declaraba: "No son historias de ciencia-ficci¨®n, si por ciencia-ficci¨®n se entiende 'futurismo', la fantas¨ªa futurista barata. Estas historias son m¨¢s posibles que muchas otras". ?l sab¨ªa bien de lo que hablaba.
Gran parte de los relatos fueron publicados por Levi en peri¨®dicos antes de ser reunidos en libros. Que el lector no busque un orden tem¨¢tico ni cronol¨®gico y, sobre todo, que no busque mensajes, tal como indica el propio autor: "Suplico al lector que no busque mensajes. Es un t¨¦rmino que detesto, pues me atribuye ropajes que no son m¨ªos, sino que de hecho pertenecen a un tipo humano de quien desconf¨ªo: el profeta, el visionario. No soy nada de eso; soy un hombre normal con buena memoria que cay¨® en un torbellino y sali¨® de ¨¦l m¨¢s por suerte que por virtud, y que desde entonces ha conservado una cierta curiosidad sobre los torbellinos grandes y peque?os, metaf¨®ricos y actuales".
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